TE NECESITO

CAPITULO 11 ¿PREPARADA?

A la mañana siguiente Sesshomaru despertó, vio a su querida Kagome justo junto a él que aun dormía plácidamente, con mucho cuidado se apartó y se vistió, salió de la cueva en busca de algo que comer puesto que al despertar la joven tendría hambre. Caminaba por el bosque y frente al apareció un sujeto con apariencia de niño.

X – buenos días señor Sesshomaru

Sesshomaru – ¿se puede saber quién eres tú?

X – mi nombre es Urikio el guardián del este bosque

Sesshomaru – y ¿Qué es lo que quieres?

Urikio – solo vine a dejarle esto –estiro sus manos- es un poco de ropa para la señorita Kagome, algo me dice que la necesita

Sesshomaru –como lo supiste

Urikio –mis hermanos me lo dijeron, no me dieron los detalles, solo me pidieron este favor, y además... el darte un mensaje: "ahora que la miko ha tenido una relación íntima, podría perder sus poderes de miko, si realmente la quieres debes ayudarla, que se ponga esta ropa y reposo por al menos un mes"

Sesshomaru lo miro y dijo -¿Quiénes son tus hermanos y porque les interesa tanto Kagome?

Urikio –ya te dije solo soy el mensajero, si quieres saber más sígueme

Sesshomaru no confiaba mucho en ese sujeto, pero quería saber que era lo que pasaba, a lo lejos 3 sombras observaban el panorama, una voz de mujer dio las órdenes –ha caído prosigan con el plan.

2 –como diga

Dos de las sombras se separaron –debemos darnos prisa Sesshomaru no es nada tonto, si se da cuenta antes de que logres avisarle nos matara, vamos hermano

-          Como digas

Por su parte Kagome aún dormía, sus sueños no se hicieron esperar, ella corría, tenía algo que proteger, la perla ¿quizá? Esa siempre había sido la razón, pero en esta ocasión algo hacia la diferencia, ¿Qué, que era? Un llanto alguien lloraba, Shipo pensó, pero no era el en ese lugar solo había guerra y muerte representados por demonios espantosos y viles, que sostenía a un pequeño hanyo entre sus dedos enormes y sangrientos, lo iban a devorar, la miko buscaba su espada desesperadamente, no había nada, dentro de ella un grito se ahogaba, no podía quedarse sin hacer nada...

Kagome –no te atrevas- grito

Oni – ¿pero que tenemos aquí?

Oni 2 –una mujer, se ve apetitosa, hermano puedo comérmela

Oni –haz lo que quieras, yo solo quiero a este suculento bebé

La desesperación de Kagome era enorme, su impotencia no se hizo esperar, se los comerían y no podría hacer nada, de repente comenzó a brillar como aquella vez un aura muy pura emanaba de su cuerpo, creando un arco y una flecha de luz, que disparo y dio a esos Oni que de inmediato desparecieron, el pequeño cayó al suelo, y siguió llorando, Kagome fue a su encuentro para calmarlo.

Kagome –ya pequeño, ya estas a salvo, no dejare que nadie te haga daño. Por alguna razón el corazón de la chica se detuvo al contemplar unos grandes y expresivos ojos color miel, se parecían a los de su abuela pero ahora en ese pequeñín, ¿Qué pasa? –pensó.

Voz – ¿acaso, quieres saberlo?

Kagome –Kumiko... ¿eres tú?

Voz –me  llamo Naoriko, hija del bosque y Guadiana del futuro, y eso que tienes ahí, es un hanyo

La persona frente a Kagome parecía una niña con doble coleta y listón azul de proporción delgada y cabello hermosamente negro, un rosto pálido pero lindo ojos de un intenso color carmesí, vestía una yukata en colores claros

Kagome entrecerró los ojos  –sé que es un hanyo...

Naoriko –aun no termino; esta niña... vive en ti... es una niña aunque por la apariencia parezca un...

Kagome -¿Cómo que vive dentro de mí?

Y –eso te lo puedo explicar yo

Kagome – ¿y tú eres?

Ahora veía a un niño de piel nívea y cabello lila, parecía más alegre que la niña anterior, pero tenía mucha presencia el chico continuo

Y – soy Yaoriko, hijo del bosque y guardián del presente, tu ayer fuiste preñada por un daiyokai el resultado es...

Naoriko –un nuevo ser

Kagome –eso quiere decir que tengo en mis entrañas... hubo una pausa enorme, Kagome se llevó las manos al vientre –que llevo en mi al hijo de Sesshomaru

Yaoriko –así es, solo que hay un inconveniente con ello, ahora tus poderes de miko...

Naoriko –desaparecerán

Kagome –no eso es imposible, ¿Por qué?

Yaoriko –sí que haces muchas preguntas, pero como dijo mi hermana las resolveremos. En primera fue porque eres una miko, en segunda, no debes tener una relación íntima con nadie y menos con alguien como Sesshomaru que es un yokai, puesto que es un ser oscuro, sin embargo hay algo que se puede hacer...

Naoriko –si no quieres perder los poderes que posees debes sacrificar a ese niño que se comerá tu energía espiritual, lentamente.

Kagome –no eso jamás

Yaoriko –supuse que dirías algo como eso, pero no te preocupes hay otra opción

Kagome - ¿Cuál es?

Yaoriko –que lo tengas, pero que decidas bien, en qué mundo lo veras nacer y criar, aun no es tuyo

Kagome – ¿eso qué quiere decir?

Yaoriko –que tu cuerpo aun no anida en el útero al pequeño hanyo, pasara poco tiempo, para que se empiece a formar, en ese momento tu energía espiritual ira disminuyendo, el traje que Sesshomaru te traerá es para protegerte de que los yokais se den cuenta de tu estado y no te ataquen.

Kagome -¿Por qué se preocupan tanto por mí?

Yaoriko –si algo te pasa el destino de este y tu mundo podrían cambiar

Kagome –peo que sepa no es válido intervenir en el tiempo

Yaoriko –eso solo se le prohíbe a los viajeros, nosotros somos guardianes del tiempo en etapas y si lo hacemos es porque nos han pedido un favor, no diré quién, ni cuando solo que de ahora en adelante tengas más cuidado

Kagome –entiendo

Yaoriko  -ahora debes continuar tu día hasta siempre y una cosa más la luz pura que te envuelve en momentos muy críticos, es parte de tu verdadero poder interno, que ya quiere liberarse.

El presente se fue, su andar era tranquilo y rápido a la vez.

Naoriko –si tu decisión es tener a ese bebé que así sea, cuando estés lista para decidir nos llamas, con estas palabras: "pasado, presente y futuro reúnanse aquí, pues mi decisión ha sido tomada"

Kagome asintió, -uhm ¿Qué ha sido eso, un sueño?, no fue la realidad, se tocó el vientre desnudo, -un bebé no estaba lista para esto, descuida no dejare que nada te ocurra, hijo de... su querido...  Sesshomaru.