Instinto

Capitulo 26: Regreso

Al día siguiente los tres aprendices de héroe descansaban en el hospital de Hosu comentando lo sucedido la noche anterior llegando a la conclusión de que,a diferencia de Native-san habían tenido bastante suerte.

—Si hubiese querido matarnos no estaríamos aquí. —revisado sus heridas.

—Esta claro que nos dejo vivir —respondió Todoroki mirando su brazo vendado.

El sonido de la puerta interrumpió la conversación de los jóvenes que al mirar vieron entrar a Mirko, Manual y un hombre de gran tamaño con cabeza de perro y vestido con un traje negro y una llamativa corbata con un estampado de dalmata.

—A ver cachorros —visiblemente molesta—. me gustaría discutir con vosotros vuestra "actuación" —haciendo unas comillas con los dedos—. Pero tenéis visita —Señalando al hombre tras ella con el pulgar.

—Les presento al jefe del distrito policial de Hosu el señor Tsuragamae. —añadió Manual al ver que la heroína conejo no tenia intención de presentar al hombre que los acompañaba.

—No es necesario que se levanten. —realizando un pequeño gesto con la mano—. Se que que vienen de una situación bastante perra.

Izuku no podía creer lo que veía, sabia que algunos quirks generaban cambios físicos bastante drásticos pero esto era desconcertante.

—Vengo a informarles de la situación en la que se encuentran. —revisando un informe—. El asesino de héroes esta actualmente en tratamiento por las quemaduras, múltiples fracturas y otras heridas.—cerrando la carpeta y mirando a los tres chicos—. Su actuación, aunque heroica, fue una violación del reglamento que nunca tuvo que darse.

—¿Que deberíamos haber hecho? —visiblemente enfadado—.¿¡Native-san esta muerto y de no haber actuado Iida también lo estaría!? ¡¡No!! ¡Salvar personas eso es lo que hacen los héroes! ¡¡Ese es nues...!!

—Bien dicho cachorro. —dijo Mirko interrumpiendo al mitad mitad—. ¿Pero que tal dejar que termine de hablar?

Tomando un momento para medir sus palabras el jefe de policía continuo su exposición.

—Al final del día esa es mi opinión oficial. Pese a ello tenemos dos opciones. Anunciar públicamente su victoria sobre el asesino de héroes, recibir la admiración publica y el castigo por su actuación ilegal —haciendo una pausa para cubrir su hocico con la mano y soltar un ladrido—. O aprovechar la coyuntura de la situación. Darle el rédito a Endeavour e ignorar su actuación siempre que se comprometan a no contar nada.

Un silencio incomodo se apodero de la sala, los jóvenes tenían ante si una decisión aparentemente imposible, ninguna era correcta o incorrecta en si misma justo antes de que alguno de ellos respondiese el el jefe Tsuragamae volvió a hablar

—Personalmente, no quiero que nadie pueda ladrarles. Consideren esto un glorioso paso en falso. —mostrando su pulgar arriba mientras daba un ladrido.