El final de un problema y el inicio de otro.

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Hoy cenan silenciosamente, de pronto Jun Wu suelta la granada:

—Habrá noches que no volveré a casa.

Xie Lian luce consternado.

—¿Por qué?

—Tengo otro cargo dentro de la compañía, es simultáneo, así que mis obligaciones se acumulan. Quizá venga sólo los fines de semana.

—...Eres admirable, pero no te esfuerces.

—Mientras sea yo no hay problema. Sé que puedo hacerlo— afirma seriamente.

Es extraño, Xie Lian nunca vio esta mirada en los profundos ojos glaciales de Jun Wu.

—... ¿Y tú? — pregunta Jun Wu.

Xie Lian se contenta con su interés, no sabiendo que esta es la última vez que se lo pregunta.

—...Me aburro. Todos estos lujos, son preciosos, pero si no tienes con quien compartirlos...es tedioso.

—¿Qué hay de tus amigos?

—Ellos están ocupados. Feng Xin, Mu Qing, Shi QingXuan, BanYue, Pei Su, Lang Qian Qiu, incluso el niño que vende flores, San Lang. Todos tienen algo que hacer— se sostiene la quijada mientras dibuja con la cuchara en su sopa de pollo.

—¿Y tu primo?

—Qi Rong, parece que se ha tomado en serio cuidar a su hijo, a veces lo trae para que lo cuide. El pequeño GuZi es un caramelo— sonríe con ilusión, pensar en este niño disipa todas sus penas.

Jun Wu no sabe cómo reaccionar a la reacción de Xie Lian.

–Si lo trae para que tú lo cuides, entonces no lo cuida— habla con seriedad.

Xie Lian suspira con decepción.

—Yo le pido que lo traiga más seguido.

—No deberías.

—Es para ayudarle a mi primo, él trabaja y el chico pasa solo en casa. Conmigo termina sus tareas y tiene sus comidas a tiempo, comidas decentes— los ánimos de Xie Lian se encienden con el tema. Jun Wu se desconcierta, pero tiene una sospecha.

—¿Y qué dice tu primo al respecto?

—...Teme que me robe el cariño de su hijo— entristece.

El presentimiento de Jun Wu es correcto.

—En ese caso deja de pedirle que lo traiga, crearás un conflicto emocional para el niño.

—... ¿No podríamos tener un hijo? — ruega con desconsuelo.

Jun Wu se sorprende como nunca antes en su vida, Xie Lian se sorprende en menor medida, jamás esperó esta reacción de su marido.

Xie Lian hace la petición en el peor momento, quizá un año atrás Jun Wu hubiese aceptado...quizá.

—Xie Lian, ¿te sientes solo?

El gesto sereno de Xie Lian se desvanece y queda vacío.

—...Me gustaba cuando pasábamos tiempo juntos.

—...Siempre puedes hacer otra cosa. Puedes estudiar algo que te guste, algún idioma.

Con esta respuesta Xie Lian entiende que no pueden volver al pasado.

—Quizá tome clases de cocina— intenta recobrar su buen humor.

—Perfecto, haz eso— termina la cena y se va a duchar, mientras Xie Lian se queda comiendo solo...

Pena de muerte. | JunLian | - 10Donde viven las historias. Descúbrelo ahora