Habitación blanca y luminosa a mas no poder, en medio una cama verde agua gigantesca con cortinas blancas casi transparentes, un escritorio verde agua con libros e accesorios de diseñadora, un apple, un par de sofas de diseño frente a la cristalera que da al jardín, la mía es la más grande definitivamente. Un baño de diseño actual, bañera vintage blanca frente a la ventana, donde nadie puede ver desde fuera de ella, una placa de ducha que parece ser un coliseo romano y inmaculado, un lavabo impresionante, pero lo mejor es que mi querido representante sabe como contentarme. Una puerta al lado de la ducha me hizo pensar si era una puerta al futuro, pero no, era puerta hacía mi sueño.
Un vestidor gigante en colores blancos y aguas, repleto de ropa nueva y de mis marcas preferidas, un tocador verde agua muy vintage, un espejo gigante iluminado por un ventanal, abrí el cajon y lleno de pinturas nuevas, me moví por el gran vestidor, y había sitio para todo, incluso para maniquís, por si quería experimentar. Una nota: "lo mejor para la mejor".
Las chicas, al parecer lo sabían todo, lo habían planeado ellas con ayuda de él. Subimos a la siguiente planta en las que había un "pequeño" gimnasio, un baño con jacuzzi , ducha con chorros y Sauna, un estudio de musica, y una sala de baile. Al bajar al piso de abajo, vimos unas escaleras que daban a un piso de abajo, al abrir la puerta vimos una cosa aun mas de lujo... Un cine particular, con sillones y una pantalla enorme. De la emoción empezamos a saltar de sillón en sillón.
-¿Ya me estáis destrozando la casa?
Nuestro joven y apuesto representante estaba en la puerta. Las chicas lo llenaban de de gracias por todo lo que había hecho por nosotras, y que le iban a preparar la cena. Yo me quede abajo sola con él.
-Te has vuelto a pasar...
-Te tengo que enseñar algo
