Las vacaciones terminaban y tocaba regresar a Nevermore a por un nuevo año de clases y repleto de sorpresas. Pero lo principal era encontrar al acosador de Miércoles, algo que durante el tiempo que estuvo en mi casa, no le llamó demasiado la atención. Tampoco había vuelto a recibir fotos ni nada por el estilo.
—Ah, de nuevo a clases—dije mientras paseaba por el largo camino hasta la academia.
—Un año que seguro encontraré enemigos y gente a la que torturar
—Siempre pensando en cosas bonitas—ella me miró.
—Ya sabes como soy, adoro el dulce aroma de la muerte—continuó su paso—además, en el tiempo que hemos estado juntos deberías haberte acostumbrado a mi personalidad.
—No, si me encanta. Pero me gusta más esa parte tierna, dulce y pequeña que me daba besos por las noches—Miércoles paró en seco y me miró fríamente.
—No te atrevas a decirle a nadie lo que ha pasado durante estas vacaciones y menos usar esas palabras conmigo—parecía molesta.
Me acerque lentamente a ella, le levanté el mentón y la besé.
—Nadie sabrá lo dulce que puedes llegar a ser. Mantendré tu reputación de araña venenosa intacta—Miércoles esbozó una sonrisa y nos volvimos a besar.
—Más te vale.
Al llegar, Enid ya estaba allí y cuando nos vio fue corriendo a darnos un abrazo a cada uno.
—¡Os he echado tanto de menos!—estaba super feliz.
—Solamente han pasado cuatro días—contestó Miércoles zafándose de su abrazo.
—Aún así ha sido mucho tiempo.
El nuevo director Lorex nos dio la bienvenida. Era un gran amigo de la directora Weems y quiso seguir sus pasos para darnos a los estudiantes un futuro.
Este año me tocaba habitación para mí sólo así que iba a disfrutar mucho de la soledad y del silencio. Enid y Miércoles eran compañeras de nuevo. Después de deshacer las maletas fuimos a reunirnos y dar un paseo donde nos topamos con Xavier y Bianca.
—¿Qué tal ha ido todo?—preguntó ella.
—Muy bien—respondió Enid.
—Yo aguantando el lastre de este sentimiento llamado amor y afectos emocionales. Antes habría sido capaz de matar y descuartizar a este hombre—dirigió sus ojos hacia mí—pero ahora no puedo hacerlo ya que lo necesito.
Todo el grupo quedó en silencio y me miraron raro.
—Supongo que...es su forma de decirme te quiero—me encogí de hombros.
—Ya veo—Enid estaba algo asustada.
—¿Y vosotros qué tal todo?—pregunté para cambiar de tema.
Estuvimos hablando durante largo rato pero en la cafetería de la academia. En uno de los momentos, toque la mano de Miércoles con los dedos antes de sentir que ejercía presión hasta hacerme daño.
—No—dijo en un susurro para que el resto no lo escuchase.
Al final estuvimos toda la tarde y parte de la noche así que nos quedamos a cenar. Era agradable ver a todos reunidos allí.
—Venga, es hora de regresar a los dormitorios—acompañe a Enid y Miércoles hasta su puerta.
Luego, miré a Enid quien estaba con el teléfono tratando de grabar. Mantuve la mirada hasta que se metió dentro.
Miércoles cerró la puerta y se me quedó viendo.
—Ha sido un día tranquilo—dije.
—Si, esperaba algún asesinato o algo por el estilo. Pero ha sido aburrido y...—la besé sin dejar que terminase la frase.
—Tenía ganas
—Idiota, ¿y si alguien nos ve?
—¿Y?, no es como si no lo supieran ya por Enid
—Tienes razón, aún así—la volví a besar.
—Sino dejas de hacer eso...yo te voy a matar, lo digo muy en serio.
Yo sonreí, no podía ocultar que estaba feliz.
—Será mejor que vuelva ya—la miré y le supliqué con los ojos.
—No
—Por favor
—Argh, está bien...—me tomó la cara y fue ella quien dio el beso.
—No ha sido tan difícil, ¿cierto?.
Le di un abrazo, un beso y me marche a mi dormitorio muy contento.
Las primeras clases fueron lentas y algo aburridas, más que nada era lo que veríamos durante todo el curso. Me senté sólo atrás del todo.
—Que cansado estoy—dijo Ajax.
—Sino has hecho nada—replicó su novia.
—Chicos, voy a la biblioteca, os veo luego—dije recordando que quería un libro en específico.
Le di un beso a Miércoles que me miró fríamente y me despedí de ellos.
Estando ya allí, me puse a ojear unas estanterías hasta encontrarlo. Finalmente pude verlo en la parte superior del mueble. Lo recogí subiendo en una escalera y al bajarme sentí un fuerte pinchazo en el costado. Tenía un cuchillo clavado. Al mirar a mi alrededor, vi que alguien escapaba corriendo.
No había nadie más en la biblioteca y como pude salí de allí, sangrando. Llame a Enid y le pedí que viniera rápido junto a Miércoles ya que ella lo tenía muchas veces en silencio y le conté la situación antes de colgar.
Me caí al suelo sin fuerzas, con un fuerte dolor y lágrimas en los ojos. No quería morir.
—¡Tn!—escuché al cabo de poco.
Enid venía con una enfermera y Miércoles me miraba con los ojos abiertos. Y perdí el sentido.
Desperté al cabo de unas horas en la cama de la enfermería. Sentía un fuerte dolor en el costado que estaba vendado. Miércoles estaba sentada a mi lado en una silla.
—Hola—dije débil.
—¿Cómo te encuentras?, ¿viste algo?, me asegurare de matar a ese desgraciado y...—pero le tapé los labios.
—Lo sé, no hace falta que digas nada.
Ella me rodeó con sus brazos y sentí la calidez de una persona que normalmente estaba fría.
—Si te hubieras muerto...te habría matado
—Je,je, no podía dejarte sola.
Ella me dio un pequeño beso y se retiró un poco.
—Gracias por quedarte aquí conmigo—dije feliz.
—No pienses que lo hago por ti, te necesito para la investigación—volteó y le tomé de la mano.
—Gracias
—Idiota...
Enid y los chicos vinieron a verme un rato, la rubia fue la más preocupada.
—No creo que te pase nada estando ella aquí—Bianca miró a su rival—te ha cuidado muy bien.
—Lo sé, ella es—Miércoles me fulminó con la mirada—es así.
Tendría que estar un par de días allí. Ahora tocaría ver quien habría sido capaz de intentar asesinarme.
Pero lo haría junto a Miércoles.
Continuará...
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Rompiendo los esquemas (Miércoles x Tú)
FanfictionIngresar a un lugar nuevo y con gente desconocida nunca es fácil. Y además de eso, es de gente que no son normales complicando todavía más el tema. Decidido a encajar en la nueva academia, aprender y hacer amigos, pronto te darás cuenta de que todo...