Las heridas abren, abren sentimientos y también te abren los ojos.
Aquello que vivimos y sufrimos día a día, es solo un esfuerzo de lo que nos viene.
La tirita que todo lo tapa. Pero lo tapa, no lo cura.
Así que la mejor tirita que hay es un beso.
Su beso.
O el nuestro propio.
A veces hay que quererse para curarse, para sentirse y amarse.
Pero creo que el amor propio es un complemento circunstancial de instrumento.
Mi vida no se basa en tiritas, mi vida se basa en el sentido de la tirita.
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Lo que nunca llegaron a escuchar
PoetryEscribo mi vida a través de poemas sin rimas. Vomito letras y se forman nudos. Enlazate con mi depresión.