Las emociones son fuertes.
Tanto los infartos como la adrenalina.
Cada uno se mata a su manera.
Otros lo odian, pero algunos sienten ese mono de volver a probar esa droga que les hace sentir por un momento.
Dura poco pero que poco...
La feria es increíblemente colorida. Algunos con epilepsia, otros fanáticos.
Pero subirse a una atracción nunca se sintió tan bien.
Sobretodo cuando creces y te das cuenta de que has perdido esa emoción de ir. O no.
Sigues teniéndola. Sigues queriendo subir.
Esa adrenalina es más fuerte que el momento.
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Lo que nunca llegaron a escuchar
PoesíaEscribo mi vida a través de poemas sin rimas. Vomito letras y se forman nudos. Enlazate con mi depresión.