Bulletproof [IiDeku]

Capítulo 8

Izuku volvió a la oficina media hora después de comer, siéndole advertido que sería buscado nuevamente a la hora de la cena si seguía aun en el hospital sin salir de la oficina, que era lo más seguro puesto que aún habían cuentas por sacar y papeles por acomodar, además de que Tokoyami seguía llegando cada cinco minutos a la oficina con papeleo nuevo y él mismo tenía que hacer diferentes documentos Excel para actualizar los medicamentos y los insumos que quedaban en los tres edificios que conformaban el hospital, aunque revisando uno de los papeles y observando el que había hecho anteriormente de hace unos tres días pudo darse cuenta que algo no estaba bien, frunció el ceño sin dejar pasar un solo número mal y pulsó el botón hacia recepción, sabiendo que sería Mina la que atendería.

“Mina mándame a Tokoyami a la oficina y a la abuela Chiyo también, por favor.”

“Ya se los envío, jefe.”

La llamada fue colgada mientras Izuku imprimía el documento y tomaba el que había recibido hacía pocos minutos, leyendo poco a poco y notando nuevamente lo que estaba mal, no eran ideas suyas y no sabía si debía comenzar a sentirse molesto, dio pase a quien estuviera tocando y vio llegar justamente a las dos personas que mandó a buscar.

“¿Sucedió algo, jefe?” Cuestionó Tokoyami primero que la doctora.

“Nos están robando ¿o en qué se usó tanta penicilina, sueros e inyectadoras de diez cc?” Cuestionó Izuku viéndolos seriamente, extendiéndoles los dos documentos con sus fechas correspondientes.

“Es posible que haya sido en el accidente de hoy, pero no sabría decirte porque yo no hice el conteo de los insumos y las medicinas hoy.” Respondió Chiyo mientras observaba ambos documentos con seriedad junto a Tokoyami.

“Hubo una enfermera que lo hizo, desconozco su nombre y sinceramente nunca la había visto, pero como han estado llegando enfermeras y doctores nuevos, pienso que puede ser alguien de ese grupo.” Comentó Tokoyami con su expresión en blanco a pesar de sentirse arrepentido por no haberse tomado el tiempo de él mismo hacer ese conteo tan importante como siempre solía hacerlo.

“Sólo he aceptado un doctor y fue a Amajiki, no he contratado a nadie más, Tokoyami.” Comentó Chiyo completamente preocupada. “¿Cómo era la chica, te acuerdas?”

“Por supuesto, era un chica un poco alta de cabello castaño claro y ojos verdes.” Respondió Tokoyami con la misma preocupación. “De hecho, la vi hace un momento cuando venía hacia aquí y estaba hablando con el guardia de la puerta.”

“Búscala y tráela, Tokoyami.” Ordenó Izuku seriamente.

El nombrado no tardó en asentir y marcharse corriendo de la oficina para buscar a la chica mientras Chiyo seguía revisando, notando que habían pérdidas algo grandes en algunos otros medicamentos que sabía, llegaban semanalmente con frecuencia, era como si esa persona supiera justo esa clase de información, pero sinceramente ella misma no había contratado a nadie con esa apariencia, lo cual era raro que estuviera allí alguien como ella, esperaba que fuese su falta de memoria y no una verdadera intrusa, porque eso significaría que no había estado muy al pendiente de su gente y del hospital en sí.

Izuku también esperaba que solamente fuera un error, aun así le pasó un mensaje a Himiko para que estuviera alerta y comenzara a investigar a todos aquellos que trabajaban actualmente en el hospital, dándole permiso de deshacerse de cualquiera que fuera o se viera sospechoso, no podían darse el lujo de dejar libre a cualquier extraño mientras la organización del Humo estaba movilizándose desde que la jefa perdió a su único hijo, era peligroso siquiera pensar en toparse de frente con Bakugou Mitsuki y si ésta enviaba gente a su territorio de manera infiltrada, significaba que definitivamente le estaba buscando problemas a su propia organización.