En alguna parte de la ciudad, en una habitación con expedientes al alrededor, con fotos de jóvenes y adultos, rechazado y tachados; un anciano se encontraba arrodillado, bebiendo té, tranquilo y calmado. Mientras una tortuga voladora miniatura le gritaba y regañaba.
-¡¿Por qué escogió a ese par de adolescentes!?- vocifero la cosa verde.- son adolescentes, ¡No son adecuados! Podrías haber elegido al chico del Ejército y la señorita de kit Box.
- Él chico del Ejército sufre problemas de ira y tendía a golpear violentamente a sus compañeros, por eso lo botaron del Ejército.
» La señorita, sufre adicción, se inyecta heroína e inhala casi todo lo que pueda. Fueron buenas opciones, pero sus problemas opacaron sus atributos.
-¿Ahora me dices que esos chicos no tienen problemas? Uno es casi el mentiroso perfecto y el otro es un chico del que sólo sabemos de su vida a partir de los 8 años. Además son adolescentes.
- Pero, uno de ellos sabe esgrima y es un chico muy discreto, nadie sabrá su identidad. Él otro práctica Boxeo con su padre los fines de semana y, a pesar de lo inútil que suena, sabe como usar bien un yo-yo. El ser adolecentes no es signo de inmadurez. Sólo Piénsalo Ways, hace 16 años sentimos el poder del miraculous de el pavo real y comenzamos la búsqueda de unos portadores adecuados. Llevo tiempo analizando sus pros y contras, sé que son la mejor opción.
El ser volador estaba preocupado, no confiaba que unos adolescentes fueran la mejor opción. Pero era la única que había. La habitación se halló en un silencio tenso, pero extrañamente pacífico. Él anciano sabía que tal vez no duraría mucho tiempo en esa vida e intento recordar esos pequeños detalles: olía a té, especias y cerrillos viejos. Le gustaba ese olor.
Tras terminar la batalla, Oriol decidió ir a su casa. Ingresó a su cuarto por la ventana, mientras era recibido por los ladridos eufóricos de Buddy. Parece que el can hizo la ilusión de que se encontraba en su cuarto.
Sintió unos pasos por la escalera, se deshizo del traje y a los segundos vio como un hombre fornido habría la puerta.
- Hola, papá. - le dijo al hombre que abría la puerta. Él estaba sonriendo.
- Hola, Oriol. Tú mamá terminó de hacer la comida. Vamos para que comas con ella.- dijo emocionado el señor al chico.
Salieron de la habitación con el perro detrás de ellos, caminaron un pasillo largo y llegaron a la recepción, sala y comedor. Lograron ver a Catrina cantando "Mil horas" en voz alta, por lo que no se daba cuenta de su llegada.
- Mamá... ¡Mamá!- dijo Oriol, para acercarse a la radio y apagarla- Mamá, llevamos diciéndote, que llegamos un buen rato.
- ¡Oh! mi nene, ya llegaste- decía la mujer, para voltear ver a su hijo y acercarse a besarle en las mejillas- mamá te extraño tanto, pero ya está lista la comida.
Se fueron a la gran mesa que tenían, estaba cubierta por un mantel blanco con bordados. Mientras ellos preparaban la mesa ella llegaba con la comida.
- Hoy es Fideos verdes con carne- dijo la mujer emocionada, ella conocía muchos platos, en serio, muchos platos de comida.
Su familia mantenía vivos esos detalles, esas cosas de su cultura, que los hacía sentirse en casa. No querían olvidar lo hermoso de su país, solo el mal recuerdo de algunas personas.
Al terminar la comida Oriol sentía que algo malo iba a pasar, y al prender el televisor se dio cuenta de ello.
< Miedo entre los ciudadanos de París, estatuas de piedra esparcidas en toda la ciudad. >
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Miracoulos: Aventuras De Mr.Bug Y Chat Noir
FanfictionParis necesita un héroe, ¡no a una hormonal acosadora! Oriol, a recibido el miracoulos de la mariquita y ahora tendrá que volverse algo que no cree que sea. UA. Miracoulus Chat Noir sigue y será el compañero. Amo-odio esta serie. Posibles errores...