Cambiando ❤️Rengiyyu✨

cap 18 -resultados y el último día de paz-

Los 4 estuvieron todo el día en el pueblo, paseando y comiendo. Los dos infantes iban jugando mientras que los dos adultos estuvieron hablando sobre la prueba. No es que les preocupara ser un doncel, se preocupan por ser sacados del cuerpo de cazadores si es que quedan embarazados... Bueno si es que llegaban a tener relación con algún hombre. Fueron a la finca del agua para que pudieran descansar los 4 en ese lugar que se les hizo muy
tranquilo a los dos Rengoku. Era la cuarta vez que se quedaban ahí por petición de Senjuro quien se sentía más seguro ahí, así que decidieron dejar una prendas para ambos rubios.

Tomioka fue a darle algo de comer al gato que se había encontrado el otro día, este animal se encontraba mal según dijo el veterinario. Tomioka había notado que era una hembra después de unos días de tenerla en su finca. Le prestaba atención a la gata y pudo notar que siempre miraba hacia una dirección cuando salía de la finca.

To: Veré qué es lo que tiene después —Hablo el azabache quien traía a la gata en brazos— La noto algo extraña, la sacaré antes de mi misión -.

Kyo: Está bien, no te preocupes yo me quedaré con Haruko —Sonrió y se acercó a Tomioka— ¿Pero que es lo que le notas raro? —Pregunto acariciando el pelaje de la gata—

To: Cuando sale al patio empieza a quejarse y siempre voltea a la misma dirección —Dijo para dejar a la gata en el suelo, quien se empezó a restregar en las piernas del azabache— ¿Bueno quieres algo para comer? —Volteo a verlo con una leve sonrisa involuntaria—

Kyojuro se sorprendió un poco por la leve sonrisa de Tomioka, pero después le sonrió y hablo.

Kyo: Yo comeré todo lo que tú cocines Tomioka-san, deja voy y le pregunto a los niños —Dijo para luego salir dejando algo sonrojado al azabache—

A Tomioka le agrada tener a los 2 Rengoku y a Haruko, le hacía ilusión tener una familia, lo hacían sentir la calidez que tenía con Tsutako, pero... Le daba miedo perderlos.

Sen: Tomioka-san —Llamo Senjuro— ¿Quiere que le ayude con la comida? —Empezo a jugar con la mangas de su yukata y agachó la cabeza—

To: No te preocupes Rengoku-kun, ve a jugar —Dijo agachándose al nivel del niño— Yo me ocuparé de todo ¿Esta bien?

El rubio solo se dedicó a mira por un rato al azabache y después de unos segundos asintió con la cabeza y una sonrisa.

Sen: Está bien Tomioka-san —Dijo el rubio para irse corriendo hacia otra habitación—

Tomioka empezó a cocinar mientras Kyojuro se daba un baño y los niños estaban jugando. Mientras cocinaba escuchaba gritos y pasos corriendo de un lado a otro, algo que le asustó y
preocupo un poco pero luego escucho las risas por lo que se tranquilizó un poco. Mientras iba removiendo la comida sintió unos brazos en su cintura y algo, o alguien, recargarse
en su hombro. Volteo hacia su hombro viendo cómo el rubio mayor tenía los ojos cerrados y una suave sonrisa.

Kyo: Huele delicioso Tomioka-san —Dijo y se alejó un poco cuando se dió cuenta de la acción que había
hecho—

To: Gracias —Dijo para darse media vuelta y mirar al rubio— ¿Podrías poner la mesa? —Se recargo en una encimera y se cruzo los brazos—

Kyo: Asintió con la cabeza y se acercó hacia un mueble— Mañana tal vez nos den los resultados de la prueba, jamás pensé que fuera realidad eso —Menciono—

To: Yo tampoco —El azabache giro y se acercó a la olla que soltaba vapor— Ya está la comida voy con los niños.

El rubio le dió un sonido afirmativo al azabache quien salía de la cocina para buscar a los niños quienes habían dejado de correr por el interior de la finca.

La cena estubo tranquila para todos, deliciosa para los 2 infantes y el adulto rubio. Giyu se encontraba lavando los platos utilizados mientras que Kyojuro estaba recogiendo todos los juguetes y objetos que habían tirado/utilizado los niños. Cuando era casi hora de dormir el azabache había mandado a los otros 3 a bañarse para que durmieran más a gusto. Era algo que se estaba haciendo una rutina para el azabache y le agradaba.

[...]

Al día siguiente se encontraban los 4 caminando hacia la finca mariposa. Muy temprano les llegó una carta de la pilar mariposa, diciendo que los esperaba en su finca con los resultados de ellos y otros más.
Tomioka antes de salir de su finca agarro el libro que tenía de Kanae para dárselo a Shinobu. Su cuervo no podía soportar todo el peso de aquel libro y el cuervo del rubio estaba ocupado mandando un recado.

Cuando llegaron encontraron al pilar del viento y niebla esperando en la puerta de la finca. Giyuu bajo de sus brazos a Haruko quien seguía medio dormida, Kyojuro hizo lo mismo pero tenía a su hermano quien seguía somnoliento.

Kyo: Buenos días compañeros —Saludo el rubio mientras se acercaba a los otros 2—

Giyuu solo se alejó un par de metros para no pelear con el albino, intentaba eliminar el sueño que
traían ambos niños revolviendo el cabello de Senjuro y cepillando con sus dedos el pelo de Haruko.
Esperaron unos minutos más hasta que llegó Aoi y les indico a dónde tenían que ir ya que la pilar estaba algo ocupada en estos momentos. Hicieron caso y se dirigieron a una habitación que estaba algo alejada de las habitaciones con pacientes.
Kyojuro y Giyu se quedaron atrás por irse a dejar a los niños con Kamado y compañía, mientras volvían a su camino estuvieron hablando sobre las posibilidades de salir doncel. Cuando llegaron vieron a los otros dos pilares esperando fuera de la habitación, con curiosidad el azabache abrió la puerta. Lo primero que vio fue un montón de frascos vacíos y otros llenos con sustancias de distintos
colores. Cerro la puerta y se recargo en la pared a un lado del rubio quien lo observaba con una ceja alzada. El azabache no entraría ahí si no está la pilar, talvez y toque algo y sea venenoso para el... Esperaron por varios minutos, no había señal de que llegara todavía la pilar del insecto, por lo que desespero al albino quien ya se estaba marchando.

Sa: Vuelvo otro día —Fue lo último que escucharon del albino y decidieron esperar unos minutos
más—

Shi: Moshi Mosh~~ —Saludo la oji-morada quien había llegado unos minutos después, por no decir horas— Lo siento la demora, tuve unas complicaciones con el doncel pero nada que no pueda solucionar —Dijo la pilar para acercarse a la puerta— Pueden pasar pero no toquen nada —Se hizo a un lado dejando pasar a los pilares—

La pilar les explico la reacción que tuvo la sangre de cada uno con la del doncel, tomaban un color intenso y luego se evaporaba la sangre de un doncel con la de un hombre normal por así decirlo. Les fue diciendo y mostrando sus resultados a los demás pero uno por uno y con discreción, si querían revelarlo que lo hicieran, no es como si alguien hubiera salido doncel... ¿Verdad?... Tomioka era el último y por esto estaban ambos solos.

Shi: Tomioka-san... —Llamo la atención del azabache— La reacción de tu sangre y la del doncel no tuvo
alguna reacción... No sé si sea porque eres un doncel pero aún así necesito que se cuide —Lo último lo dijo con una mirada y tono picarona, también moviendo las cejas de arriba a abajo
sucesivamente—

Tomioka no entendió esa acción pero decidió ignorarla. Le entrego el libro que le había dicho que le daría para que supiera más sobre los donceles y más. Hablaron unos minutos más y después de eso Tomioka se dirigió a dónde Tanjiro y los demás.

Toda la tarde se quedaron ahí hablando con los jóvenes cazadores y cuando empezó a anochecer decidieron irse hacia la finca del pilar del agua... Bueno solamente el dueño de la finca y Haruko. Los hermanos Rengoku no podían estarse quedando en la finca de Tomioka, aunque esté se había acostumbrado a la compañía de estos dos sabía que debían de estar en casa... con su padre. Se despidieron a mitad de camino... Un "buenas noches y duerme bien" de ambos adultos... La noche parecía estar tranquila... Para todos sin ninguna excepción...¿Bajar la guardia? Fue lo que hicieron muchos... O... Buenos los mounstros de la noche no... Quien iba a saber que ese día iniciaría la tragedia, traería tristeza a muchos pero más para nuestro pilar del agua...