Violencia, lo único capaz de hacer sentir algo a la indiferente Naeya, y es que desde que era una niña nunca sintió emoción alguna hasta que vió frente a sus ojos un asesinato. cómo modelo principal de la empresa de ropa de su padre ella no podía da...
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Habían dado un par de vueltas en silencio, Las calles, anteriormente vacías, comenzaban verse más concurridas a medida que el día avanzaba, había llegado a su encuentro en la agencia de madrugada, el sol ni si quiera se estaba asomando, ahora se podía ver uno que otro madrugador transitando las mismas calles en las que Naeya caminaba, de cerca la seguía su guardaespaldas, la miraba de reojo más de lo que se fijaba en el camino.
Naeya por otra parte, continuaba caminando de brazos cruzados y con la vista fija en el suelo, sus uñas se clavaban con fuerza en la piel de sus brazos atravesando así la delicada tela de encaje que cubría sus brazos. Su cabeza agachada y sus pasos firmes, pisotones liderados por el enojo que poco a poco la inundaba. Sus sentidos que comúnmente la mantenían a tanto de su entorno comenzaban a ser abrumados por sus pensamientos.
A pocos pasos de ella se encontraba la agencia en la cual anteriormente había estado, de allí saliendo dos personas, un rubio y un pelinegro, el de cabello claros no tardó mucho en reconocerla, no fue su vestimenta elegante ni su caminar distinguido lo que le produjo la necesidadde mirar en su dirección, fue el aura amenazante que le llamó la atención apenas la vio, la cual ahora parecía emanar de cada poro en el cuerpo de ella. Se detuvo en seco, llamando así la atención de su acompañante, el de cabello azabache lo miró por sobre su hombro, caminó hasta su lado nuevamente y clavó su mirada en la mujer que veía su amigo. ━━También lo estas sintiendo ¿verdad?━━ Mencionó aún con la vista fija en la chica.
━━Si...━━ Murmuró en respuesta notando la sangre brotar de el ceñido agarre de Naeya en sus propios brazos. ━━Ella es rara.━━
━━Tu también.━━ Respondió el antes de emprender camino hacia ella, se acercó a paso lento, saludó al guardaespaldas cuando este notó su presencia. Se aclaró la garganta en cuanto llegó a un lado de la chica y antes de que siquiera dijese una palabra Naeya le dirigió una mirada, apenas un vistazo de reojo, pero por alguna razón, el sintió la necesidad de retroceder ¿Qué demonios estaba mal con esa mujer? ¿Y porque él tenía tantas ansias por descubrirlo? Solo fue una mirada pero el sintió como si de pronto la presencia de Naeya fuese abrumadora. Un cosquilleo placentero se abrió paso en su cuerpo. ━━¿Mucho estrés?━━ Dijo a modo de saludo posicionándose a su lado.
━━¿Lo conoce?━━ Consultó el guardaespaldas.
━━Socio de mi padre.━━ Contestó Naeya.
Goo no estaba seguro de que esperar de su encuentro, en realidad ni si quiera estaba pensando en que hacía cuando se acercó hacia ella, simplemente quería sentir aquella punzada amenazante que le provocaba la mujer.
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━━Todos los candidatos son geniales, estéticamente también.
Mencionó Jared mientras con disimulo miraba el reloj en su muñeca, Kim había llegado hace ya bastante tiempo sin embargo Naeya no veía con el, es precisamente a ella a quien más necesitan, no estuvo presente ni en las pruebas mentales, en las encuenstas psicologicas y tampoco ahora, en la prueba de aptitud física, se suponía que estaría acá hace dos horas ¿Que es lo que estaba mal?
Mientras la esperaban, el señor Kim se dedicaba a ofrecer pequeños combates con los que aspiraban a tomar su puesto, en base a eso los juzgaban y decidían que tan capaces serían de cumplir su rol.
