❝ Capitulo 6 ❞

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Todo en torno a la responsabilidad de Naeya era dar una buena impresión, y no es qué esté dando una muy encantadora ahora mismo

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Todo en torno a la responsabilidad de Naeya era dar una buena impresión, y no es qué esté dando una muy encantadora ahora mismo. Se dio cuenta se eso cuando la sensación viscosa en sus dedos pasó a estar también a lo largo de toda su mano y la sangre continuó escurriendo por sus brazos. ━━Mier... da.━━ Dijo Ella, interrumpiendose a si misma por un pequeño espasmo. El guardaespaldas, ajeno a su estado, solo le prestaba atención al hombre rubio frente a ambos, el cual miraba a Naeya con algo un poco menos que morbo.

Levantó la mirada de a poco, dándose cuenta de la presencia invasiva del rubio el cual inclinaba su cuerpo con tal de verla más de cerca, y se dio cuenta que en la situación en la que se había puesto podría arruinar la buena imagen que su padre quería tener con el señor Choi.

Presionó sus labios y desvió la mirada hacia su guardaespaldas, lo más sensato es salir de los lugares concurridos ahora que no luce demasiado presentable, pero no estaba segura de que hacer con el hombre que la miraba de forma tan curiosa. ━━Hey ¿me estas ignorando?━━ Naeya miró la rubio y arrugó el entrecejo ¿ha estado hablando todo este rato? Tal vez estaba demasiado ida como para escucharle.

━━Retírese de una vez, ya le dije que si no quiere, no hablará con usted.

━━Está bien.━━ Dijo Ella encontrando su voz más temblorosa de lo que esperaba. Le sonrió al hombre a cargo de cuidarla intentando apaciguarlo y nuevamente miró a Goo. ━━Señor Kim

Fue interrumpida apenas las palabras salieron de su boca. ━━No vengas con formalidades ahora, menos cuando te ves así. ━━ El tono de sorna en el no sólo irritaba a Naeya, la preocupaba al ver que, poco a poco, su prestigio podía estar empezando a desmoronarse.

━━Goo.━━ Dijo ahora con una voz un poco más severa y así como el de lentes pidió, sin formalidades. Su semblante serio estaba lejos de querer disimular su apatía, más su ceño fruncido connotaban su descontento con la situación. ━━Perdón por el infortunio, no estaba ignorandolo, solo no lo escuché. ¿Qué era lo que me estaba diciendo?

━━Conozco esos ojos.━━ Ignoró la pregunta de la mujer y se acercó aún más a ella, con sus manos en sus bolsillos y su espalda encorvada por estar inclinado con tal de tener su rostro a la altura del rostro de Naeya. ━━Aún detrás de esas lentillas, puedo reconocer esos ojos.

El hombre de seguridad tuvo la intención de detener la charla, pero solo hizo falta una mirada fugaz de Naeya para detenerle. ━━¿Y que es lo que ve?━━ Preguntó ella.

━━La impotencia de un mal perdedor.

━━Oh.

Volvió a sentirlo, como de un momento a otro crecía más el morbo violento que rodeaba a la muchacha, esa aura atraparte que se sentía segundos antes de una pelea, pero solo era la mirada penetrante de Naeya. ¿Lo que le dijo la ofendió? ¿Por eso de pronto siente como si ella quisiera matarlo?

━━Ya debo retirarme, perdone.━━ Pero en cuanto la vio con intenciones de escapar, se decepcionó. Como si toda esa sensación de amenaza fuese solo una introducción a una obra vacía, como un prologo prometedor pata una historia a medio hacer.

━━Ouh, vamos.━━ Dijo en voz baja mientras hacía un puchero. Tuvo intenciones de ir tras de ella, pero la llegada de un mensaje a su celular lo hizo darse media vuelta y salir de allí. Era el señor Choi llamando a su guardaespaldas.

Ya unos metros lejos, Naeya y su acompañando caminaban a paso apresurado. ━━¿Quiere que la lleve con su terapeuta?━━ Preguntó su cuidador el cual ya era bien conciente de su estado.

━━No, solo necesito ropa más cómoda.

Reposaba sobre el sofá bermellón de la oficina mientras el agente le charlaba sobre sus candidatos, sobre como eran físicamente, sobre cuales eran rubios, cuales preferían el te por sobre el café, y otras características inútiles que Naeya no se m...

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Reposaba sobre el sofá bermellón de la oficina mientras el agente le charlaba sobre sus candidatos, sobre como eran físicamente, sobre cuales eran rubios, cuales preferían el te por sobre el café, y otras características inútiles que Naeya no se molestaría en memorizar. Aquella prueba era para encontrar un candidato que llegue a llevarse bien que ella, pero en realidad Naeya les ignoraba la mayoría del tiempo, solo era un esfuerzo vano de su padre por conseguirle un amigo a la chica.

Las oficinas White Tiger es un lugar que Naeya frecuentaba muy a menudo, por la afiliación con su padre y porque siempre recurrían allí para sacar guardaespaldas o seguridad para otras áreas. ━━¿Puedo verlos?━━

Lo siguió hasta una habitación en la que habían por lo menos veinte jóvenes que rondaban su edad. Era complicado encontrar gente de esta profesión que además tengan la edad de Naeya, apenas tiene trece, pero aún así la mayoría de candidatos no pasaban los veinte.

Todas y cada una de las personas de la habitación se levantaron de su lugar para recibir a Naeya, excepto un joven de unos once años que estaba sentado hasta el fondo de la habitación, en una esquina casi escondido, con su mirada sumergida en su celular. ━━¿Y ese?━━ Miró con duda al agente y este le explicó es el hermano menor de un candidato, que no tenía donde más dejarlo y simplemente lo trajo. Naeya frunció el ceño fijando su mirada en el niño, pronto lo reconoció, aquel muchacho en el psiquiatra que esperaba junto a ella, el muchacho del oso azul.

Los hombres formados en una línea miraron con curiosidad a Naeya y su pequeña charla con el agente a cargo, ansiosos por saber cual será el elegido.

━━Mike.━━ Dijo, recordando su nombre. El alzó la cabeza y la miró con los ojos entrecerrados, pronto se dio cuenta de la situación. ━━Tu y tu hermano ya pueden retirarse.━━ Uno de los hombres formados dejó salir un suspiro y comenzó a caminar hacia la salida, Naeya supuso que se trataba del hermano.

El niño la miró con claro enojo, más, en la situación en la que estaba, lo que menos le convenía era hacer algo. Rodeado de hombres los cuales aspiraban a conseguir un trabajo para resguardarla. ━━Jodida zorra rencorosa.━━ pasó por su lado dictando palabras de odio, y en cuanto estuvo cerca, se dio la libertad de escupirle en la cara.

Naeya se movió a tiempo como para evadirlo, pero aún si se hubiese quedado estática la saliva no llegaría a alcanzarle.

Había una mano frente a su rostro, una mano grande y llena de cortadas, la mano del señor Kim deteniendo el escupitajo. Lo miró de reojo sin demostrar en su rostro su descontento, tendrá que dejar ir a uno de sus mejores guardaespaldas y no puede hacer nada al respecto... ¿Que demonios hará ahora que su luchador favorito se irá? ¿Con quién peleará sin contenerse ahora que el único que podía someterla no estará?

Nuevamente empezaba a sentirse algo irritada con la presencia de el señor Kim, y ahora su cercanía parecía ser el pronto gatillante de una reacción erratica. Así que lo terminó rápido.

━━Si les pido que se pongan de rodillas ¿Lo harán?━━ Se giró para mirar a los hombres formados, y vio como todos se arrodillaron casi de inmediato. ━━Y si les pido que se peleen entre ustedes ¿También lo harán?━━ ladeó la cabeza y fijó sus ojos en las mirada confundidas que se daban los unos a otros. ━━Los últimos dos en pie se quedarán con el puesto.

Violence  ━━ Lookism x OC Donde viven las historias. Descúbrelo ahora