Capítulo 10

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Han pasado tres días desde aquel momento en que pude morir absorbida por un Acromano, estamos preparándonos para el ataque hacia ellos, organizamos cuadrillas, damos el último detalle de las naves y entrenamos incansablemente

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Han pasado tres días desde aquel momento en que pude morir absorbida por un Acromano, estamos preparándonos para el ataque hacia ellos, organizamos cuadrillas, damos el último detalle de las naves y entrenamos incansablemente.
-Necesito ir a visitar a mi abuela- Me dirijo hacia Devora un poco desanimada.

-Creo que es buena idea, talvez después no lo hagas ya que estaremos muy ocupados- me regala una sonrisa de apoyo.

-Anna no me dejara ir, y creo que Ian tampoco, soy muy mala para manejar las naves y quiere que entrene más- puse los ojos en blanco.

-De Ian yo me encargo- me dice Devora.

- ¿cómo escapó de Anna, alguna idea?- le pregunté, ya que es su hermana y la conoce mejor que yo.

-Claro que tengo una idea pero tendrás que hacer lo que te diga- entusiasmada me dice.

- Si solo de esa manera puedo ir con mi abuela, claro- asentí contenta.

Mientras Devora elaboraba el plan para mi pequeño escape, yo estaba en las afuera del edificio entrenando con mi don de los elementos naturales, cada vez era más sencillo controlarlos, estaba haciendo uno de mis mejores movimientos con el aire cuando de la nada me empecé a elevar, por un segundo creí que estaba volando.

-Eduardo, no seas tonto y bajame- le dije algo molesta y nerviosa ya que le tenía miedo a las alturas y a él le divertía hacerlo con su don de telequinesis, lo controlaba muy bien, que no solo movía objetos, sino también personas.

- solo quería ayudarte a controlar el aire- me dice con tono divertido.

-sabes que me da miedo las alturas- me dirijo hacia el con mirada amenazadora.

-¿me estás retando?-

-¿Qué quieres? Estaba practicando y me interrumpes-

-Siempre te diriges a mi molesta, ¿por qué?- me pregunta con curiosidad, tal vez tenía razón, siempre me dirijo hacia el un poco grosera, no se cómo actuar frente a alguien que me gusta.

-lo siento, me asustaste- me disculpo sinceramente.

-¿quieres que practique contigo?-

-Por supuesto- le sonrió amablemente.

Con su telequinesis movía objetos grandes los cuales yo esquivo con algún elemento natural, practicamos durante la tarde de manera silenciosa, Eduardo toma las cosas muy en serio, hasta que vimos el desastre que hicimos, tierra y árboles arrancados por doquier.

-Le hablaré a Jaqueline para que acomode el lugar- me decía Eduardo mirando el desastre que hicimos.

-Muy bien, aquí esperaré- mientras me senté en un tronco a esperar.

Observo que Devora viene hacia mi corriendo, agitada se detiene frente a mi, se inclina un poco para recuperar el aire.

-Devora, ¿Qué sucede?, creí que eras buena corriendo- le digo un poco burlesca.

Alina A Través De Los Sueños Donde viven las historias. Descúbrelo ahora