Cressi shots

Where is my super suit?

Desde hace mucho tiempo el mundo había empezado a ser realmente peligroso, muchos seres extraños habían empezado a surgir poniendo en aprietos a la humanidad. Sin embargo, es ahí donde también surgen los evolucionados, humanos con superpoderes dispuestos a ayudar a toda la población. Estos eran pocos y cada vez que eran descubiertos debían ser llevados a las instalaciones de "Strength" donde serían entrenados de manera rigurosa para desarrollar todas sus habilidades.

Cristiano había sido llevado ahí a los 9 años, cuando su madre descubrió que podía crear fuego sin necesidad de un mechero o fósforos. Cris se había emocionado muchísimo por todo lo que le esperaba y se propuso ser el mejor superhéroe del mundo.

La primera semana de su estancia fue algo complicada, nunca había estado lejos de su familia y se sentía algo solo.

Todo mejoró cuando conoció a Leo, un niño un poco menor que él, pequeño y delgado. Leo podía controlar el viento, podía generar pequeños tornados en sus pequeñas manos y a Cris le fascinaba.

Con el pasar del tiempo los dos se volvieron inseparables y sus poderes se desarrollaron bastante.

Cris era bastante competitivo, demasiado para su propio bien y le molestó un poco solo un poco que su amigo desarrollara un nuevo poder. Ahora Leo ya no solo formaba pequeños tornados en sus manos, ahora había desarrollado la aerocinecis que le permitía controlar libremente las corrientes de viento y podía incluso volar por los cielos y Cris estaba un poco celoso solo un poco.

Sin embargo a pesar de todo Cris podía apreciar algo increíble cuando lo veía y le comentó a Leo lo asombroso que era su poder y él tan tranquilo como siempre, solo le sonrío y le dijo que no era para tanto.

A Cris le gustaba la parte modesta de Leo, era encantador de alguna forma. Cris al ser tan competitivo no se quedaría de brazos cruzados y entreno hasta el cansancio, solo para convertiste en él mejor. Recuerda que un día se desmayó por el esfuerzo y Leo lo regañó por horas, fue divertido de cierta forma.

Leo lo cuidaba mucho, èl era bastante impulsivo y Leo era bastante sensato, imagino que por eso su amistad funcionaba tan bien.

De todos modos ese día dio un buen resultado y su poder se desarrolló de una forma increíble. Cris ahora podía generar grandes ráfagas de fuego y se sentía muy orgulloso de sí mismo.

Y de alguna forma se habían convertido en los jóvenes más prometedores del lugar. Cuando llegó el momento de salir a las calles ambos se sentían nerviosos y estaban en la habitación de Cristiano posiblemente por última vez en mucho tiempo.

_ ¿Qué nombre usarás?- preguntó Cris

_ Estaba pensando en Ventisca - contestó Leo viéndolo

_ Ese nombre apesta - Cris respondió burlón y Leo le lanzó una almohada.

_ ¿Y tú? - Pregunto Leo

_ Resplandor infernal - dijo seguro Cristiano - lo supe desde el día en que cree mi primera chispa.

Leo rodo los ojos y simplemente dijo

_ Supuse que sería algo llamativo

_ ¡Ya sé! - Casi gritó Cris - ¡Tempestad suprema! - finalizó como si fuera una revelación - ¡Te quedaría perfecto!

_ No creo que...

_ No acepto un no por respuesta - sentenció.

***

Leo estaba agotado, ser un superhéroe no era tan divertido como pensó, a veces quería tener la energía de Cristiano, bueno... no quería pensar en él... desde que se separaron por la selección de ciudades había estado bastante triste extrañandolo.