Prólogo

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El informante miró nervioso al venerado rey de Alariel. A sus cuarenta años, el cansancio y desgaste eran fuertemente apreciables en el rostro del soberano de la nación del sol, aunque obviamente era más que comprensible, después de todo, la guerra y décadas de reinado demandaban un alto precio del cuerpo y la mente de todo gobernante.

-¿Cuá es la situación actual? -preguntó el rey Solerian, adoptando una postura rígida en su trono.

Con un nudo en la garganta, el informante se acercó un poco más al rey, quedando completamente cubierto por la imponente sombra del trono que era proyectada por los rayos del sol que atravesaban el enorme ventanal de la sala.

-Lamento informarle que se han reportado más desapariciones en toda la nación -comenzó a hablar el temeroso hombre, desenroscando el pergamino que un general le había entregado hacía pocas horas-. Vintos, Severia y Beros han sido los lugares con más casos de desapariciones de habitantes, se reporta que la mayoría de las víctimas se encuentran entre los 20 y 30 años de edad. La Ciudad Flotante sigue siendo segura, pero me temo que los casos más recientes han ocurrido en Zunn.

-Si la situación sigue escalando, será solo cuestión de tiempo para que ocurra lo mismo en los territorios faltantes -dijo el rey Solerian, endureciendo su voz-. ¿Qué está pasando en Ilardya?

-Lo mismo, majestad -respondió el informante-. Por el momento, Pivoine es la única de las islas del reino de la Luna que no ha reportado desapariciones. He recibido un mensaje que expresa el deseo de los gobernantes de Ilardya por convocar una reunión con usted, ¿desea agendarla ahora mismo?

-Que sea lo más pronto posible y notifícales que podemos organizar la reunión en Alariel -sentenció el rey.

El informante desenrolló otro pergamino, y sintiéndose más nervioso que antes, dirigió su mirada hacia el rey.

-Es mi deber comunicarle otro asunto de suma importancia, mi señor.

-Habla -demandó el rey, frunciendo el ceño.

-Como usted bien sabe, en los últimos años se han propagado rumores en todo Fenrai sobre el descubrimiento de personas que poseen habilidades distintas a los poderes del sol y a la magia de la luna.

-¿Qué intentas decirme, Neo? -lo interrogó el rey, con severidad.

Neo, el informante, sintió un nudo en el estómago y miró con preocupación al rey.

-Se ha descubierto recientemente que esas historias ya no son únicamente rumores, su majestad. 

El Escuadrón EstrellaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora