Cubo de Rubik: La chica de ojos raros.

Capitulo 5

Jejeje no me maten, plis, se que me demoré un mundo pero aquí está por fin el otro capítulo :D No voy a prometer nada porque me conozco pero el otro cap ya está casi a la mitad, así que quizá sea rápido. Espero que les guste <3.

Ciara Stone

-Despierta...- Una voz dulce resonó en mi cabeza. Sonaba casi como un eco debido a que estaba entre sueños.

-Despierta, pequeña, despierta...- Escuché esta vez más claro, pues estaba más conciente. Conocía esa voz... Tenía esa sensación de tener en la punta de la lengua a la persona portadora de esa tranquilizante voz, pero al mismo tiempo...

No tengo idea de quién es.

Vivo sola.

-¡¿Que mierda?!- Esta ves si estaba despierta por completo, me senté en mi cama exaltada, mirando hacia todos los lados buscando a quien había hablado.

Pero no había absolutamente nadie.

¿Acaso lo soñé?

Quizá solo fue otra pesadilla. Aunque juraría que escuche una voz, aquí.

Entonces empecé a recordar la noche anterior, lo último que recuerdo es que iba a comer, en la sala. ¿Cómo es que estoy aquí? Realmente no recuerdo nada por más que me fuerce, aparte de ese sueño, bastante real, de nuevo.

Quiero pensar que solo estaba cansada y olvidé todo después de la cena porque sería lo más lógico y lo que menos me asustaría, pero todo esto de las pesadillas se está volviendo muy raro.

Me levanté todavía intentando convencerme de que todo era solo una mala jugada de mi cerebro.

Hasta que lo ví.

Si no fuera incolora hubiera palidecido, pero sentí un escalofrío subir por mi cuerpo.

Eso.

No.

Estaba.

Ahí.

Definitivamente no.

Okey ahora sí tengo miedo.

•••

-¡Deja de lanzarme cosas!- Esquivó mi cepillo de pelo-¡Puta loca!-

-¡¿Yo estoy loca?! ¡Saliste de una caja en la que no debería caber ni tu cabeza!- Grité histérica a la pelirroja que estaba al otro lado de mi habitación.

- ¡Pero tranquilízate! Déjame hablar.-

-No voy a hablar con una cosa que salió de una caja-

-¿Cosa? Auch.- Dijo aún escondiéndose atrás de un sillón. -Te la voy a dejar pasar porque estás sensible, supongo que son esos días del mes.- Salió de su escondite con las manos en alto. -Pero dame una oportunidad, soy inmortal, no inmune al dolor, por favor para.-

-¿Que eres que?- Cuestioné sorprendida.

-¿No lo vas a negar o decir algo tipo "es imposible"?- Dijo extrañada acercándose un poco a mi cuando vió que solté el perchero en mi mano.

-Saliste de una caja seis veces más pequeña que tu, ya me creo cualquier cosa-

-Y dale con la caja. ¿Tienes algún tipo de trauma con las cajas?-