Capitulo 3

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Una disculpa, tuve unos problemas legales con mi pa, por lo cual no logré actualizar el miércoles. No sé cuando tiempo me tarde arreglar todo en mi casa, por lo que el próximo capitulo tarda en llegar.  

Besos y disfruten. 

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-¿Dónde estás, Potter?

Al final la oferta de Baisley fue muy seductora y no puede rechazarla. El maldito sabe como convencerme. 

Según escuche, él ahora debería estar cerca del lago negro... o eso se supone porque ya lo busque 2 veces enteras por todo el lugar y nada que aparece. Además hace un viento infernal que no es recomendable estar acá mucho tiempo, a menos que quieras morir congelado. 

Estoy a nada de darme por vencido, cuando llego una fuerte brizada que provoca que mi bufanda se vuele y caiga a los pies de alguna criatura sin cuerpo o eso parecía hasta que reconozco la túnica de los gryffindor y recuerdo que oí a Granrger mencionar algo sobre que Potter tiene una capa de invisibilidad. 

Voy a recoger mi bufanda y no sé si quiero golpear a Potter o pedirle que ser su sumiso. Justo ahora prefiero la primera, que puta vergüenza de seguro me vio nerviosa y preguntado por él. Merlín ya llévame contigo, cuando estoy solo suelo hablar en voz alta, un habito que se supone nadie sabía. Cuando llego a su lugar veo como el desgraciado se burla de mi. 

Sosténgame que lo mató

- Aquí estoy, Malfoy. 

Si ya me die cuenta, pedazo de bobo 

- Parece que mi escondite no fue muy bueno- cometa ignorando mi comentario y terminando por sacarse la capa de encima, pues hasta esta momento solo se le veía la cabeza, porque se la quito para hablar, y los pies. - ¿Para qué me necesitabas? 

- ¿Eh?- aun sigo un poco avergonzado por que me viera interesado en él que no tengo suficiente concentración. 

- Preguntabas por mi paralelo 

Yo solo me pregunto cuando tiene me estuvo observando y escuchando. Este hijo de puta se burlo de mi todo este tiempo. 

- No te busque ¿Por qué yo te buscaría a ti? Ni que fueras importante. 

En vez de obtener que su sonrisa de apague obtuve el efecto contrario 

- Si por eso no estuviste gritando a los cuatro vientos "Ay, Potter ¿Por qué siempre desapareces cuando más se te necesita? " - Que vergüenza- Deja de mentir que te poner todo rojo

- Jódete- Volteo mi cara para que no me vea y me planteo la posibilidad de irme, pero en serio quiero ese dragón. 

- Pero no me trates feo- luego de ver que aun no respondo, se aclara la garganta para llamar mi atención por lo que volteo a verlo- Quedemos en que tú no me buscabas a mi, si no en que yo te buscaba a ti ¿te parece? De todas forma tengo una propuesta que hacerte.

- Te escucho - La curiosidad me gana ¿Con qué cosa saldrá? 

- Me comentaron que tu escuchaste de mis gustos por el BDSM y que estabas pensado en pregúntame si aceptaba enseñarte, pensé que era broma, pero viendo como me buscaste y tu reacción creería que es verdad así que... Malfoy ¿aceptas ser mi sumiso?

Mi cara debe ser un poema, ya que Harry se esta aguantado la risa ¿Cómo puede ser posible que él se enterara de todo? ¿Alguien más lo sabrá? Por el momento ignoraré ese detalle y me centrare en lo importante... 

¡Harry Potter, quiere que sea su sumiso!

- ¿Por qué me ofreces esto? Si tú me odias. Me rechazas, prefieres el apoyo y compañía de otros ¡Ni siquiera me hablas! ¿Por qué quisieras que yo sea tu sumiso? No tiene puta lógica- Estoy tan conmocionado y que dejo ver parte de mis miedos- Si haces esto para búrlate de mí déjame decirte que no eres el héroe que todos piensan que eres. 

Por primera vez desde que comenzamos a conversar, Hary agarra una postura seria ya no hay ni una pisca de diversión en su mirada, esta fue remplazada por una mirada dura y segura.

- Malfoy, no me burlo de ti. Comprendo tu punto, y por eso quiero que tu ahora entiendas el mío. Te hice una propuesta, ya que creo que puedes darme lo que deseo y yo a te puede satisfacer en lo que quieras hacer. Si quieres saber porque te lo pregunto a tí, es simple; físicamente me atraes, tienes el tipo de cuerpo que me enciendo y creo que puede ser divertido verte en una posición sumisa considerando tu personalidad. 

Estaba a nada de responderle cuando, sostiene mi mentón obligándome a verlo fijamente. Me pierdo en sus ojos que se me olvida cualquier cosa que le iba a decir 

-Necesito que entiendas que es una propuesta, por lo que no estas obligado a aceptarla. Si te soy honesto desea dominarte hace un tiempo, así me encantaría que la aceptarás y si es así podemos poner todos los acuerdos que desees. 

Creo que todos sabemos que para este momento, no hay cosa que me haga rechazar su propuesta, pues por primera vez me siento correspondido. Y por ahora, prefiero imaginarme que así es y que también le gusto.

- Elaboremos los acuerdos de una vez. 







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