Hagamos nuestro propio canon [Miguel O'hara x Spider Lego]

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Miguel se encontraba haciendo stream de Minecraft en Twitch, con su avanzada computadora, tratando de tranquilizarse después de todo el alboroto ocasionado por Miles. Andaba medio emperrado.

Luego de que unos zombies le matarán a su lobo, se ardió y lanzó violentamente todo lo que tenía a su alrededor al piso. En ocasiones solía ser muy volátil.

Cerró el strim, se quedó pensando un buen rato y se puso a ver fotos suyas con su hija en silencio, todo melancólico, ignorando lo que sea que Lyla le estuviera tratando de decir. Esta dejó de insistir segundos después y se marchó, ya que era conciente de cómo se ponía Miguel cada vez que veía fotos de su niña, rechazaba cualquier tipo de consuelo o contacto alguno.

-Así que es ella -dijo una voz muy cerca del hombre, haciendo que este diera un pequeño salto del susto.

-¿Eh? -Miguel desconocía de dónde provenía aquella voz. Se asomó a sus lados, pero nada-. ¿Hay alguien allí?

-Por aquí, Miguelito -exclamó la voz.

O'hara miró con detenimiento su hombro derecho, y logró observar una pequeña figurita colgada de su deltoides.

-¿Q-que haces aquí, Peter? -preguntó nervioso-. Permíteme. -Miguel tomó a Spider Lego con gentileza y lo colocó encima de su hombro.

-Asi está mucho mejor -el pequeño arácnido se quitó la máscara y le ofreció una sonrisa de dicha a su jefe-. Perdón si te asusté.

-Hasta crees. No me asusté, solo... Me tomaste por sorpresa. Eso -aclaró, disimulando su vergüenza-. ¿Cómo es que no me di cuenta de que entraste aquí?

-Bueno, mis portales son chikitos, pq yo soy chikito, así que Lyla trató de decirte de mi llegada pero parecías estar hipnotizado -narró vivazmente los hechos-. Fue por eso que subí hasta aquí para ver qué te sucedía y luego ví esas fotos...

-No es nada que te incumba -gruñó. Apagó la computadora bruscamente y después de aclarar su garganta preguntó-: ¿Que haces aquí a estas horas?

-Bueno, ehmm -se quedó pensando unos segundos. Ya se arrepentía de haber venido-. Lo mismo debería preguntarte a ti. Es muy tarde, jeje...

-Tengo muchas cosas que hacer, ya lo sabes. Además, si no esperabas que estuviera despierto a estás horas, ¿por qué molestarse en venir?

-Ah, es que, no me refería a eso... Yo, ehhm, es que yo -el cerebro de spidey echaba humo. No sabía cómo explicarse-. A lo que venía era para...

-Ajá... -Miguel observaba atentamente al hombre de lego, a la espera de que concluyera la oración.

La mirada dominante de O'hara no ayudaba mucho a que el pequeño arácnido se expresara correctamente, poniéndolo aún más nervioso.

-Vamos, puedes decirme lo que sea. Si es por lo del historial de búsqueda en algunas computadoras del spider-ciber, puedo explicarlo -dijo nervioso.

-¿Qué? No, no he visto el historial ¿Por qué lo dices?

-N-no es nada, olvídalo. Y no pienses en hacerlo entonces -Miguel soltó un leve suspiro de alivió y luego murmuró-: gracias a dios.

-Realmente a lo que vine, fue a decirte que puedes contar conmigo para cualquier misión. ¡No seré un estorbo! Así que si se presenta alguna pronto, me gustaría ser participe de eso, o que al menos me tomaras en cuenta -dijo muy rápido, casi rapeando, con la cara roja. Bajó del hombro de Miguel hacia el escritorio de un gran salto-. Sip, solo vine a decirte eso, pero creo que no era el momento. Lamento haberte interrumpido, y también hacerte perder el tiempo.

Spider Lego le dio la espalda a Miguel y abrió un portal todo chikito, todo bonito, de regreso a su universo.

-Peter, espera -dijo Miguel con un tono sereno. La minifigura se detuvo y volteó-. El motivo por el que no decidí llamarte fue porque no quería que nada te pasara. Creí que así te mantendría seguro -Miguel desvío la mirada, se le veía algo inquieto.

Peter de Lego se sorprendió ante tal declaración. Aquellas palabras llegaron directo a su corazón, haciéndolo sentir muy aliviado.

-Yo... Ehm, bueno. Gracias, Migue -dijo algo ruborizado-. No se que decir.

-Digo, si, eres de los mejores del lugar; muy disciplinado. Así que arriesgar a tan valioso elemento no sería sensato. -era notable como el hombre comenzaba a sudar-. Por el bien del equipo; eso mismo.

-Si, entiendo -dijo entre risas nerviosas. Se colocó su máscara y caminó en dirección al portal-. ¡Nos vemos luego!

-Hasta pronto, Peter -luego de que el portal se cerrará, Miguel suspiró y se cubrió la cara con sus manos-. Creo que debería dormir más. Me estoy sintiendo raro.