Marvel Dc: Bastard Hero Vol1

Capítulo 26

Capítulo 26

La tía Sarah se sentó justo en frente de Sera sin sentirse nerviosa. Ella no es ni ladrona ni salteadora; no hay necesidad de tener miedo de la otra parte. A pesar de que la mujer claramente tenía rastros de odio hacia ella, Sarah no se movió.

"Sí, mi nombre es Sarah. Soy una criada empleada por el Sr. Yves. Soy responsable de ocuparme de la vida diaria del Sr. Yves. Si tiene alguna pregunta, puede preguntarme".

Cada movimiento elegante de Sarah revelaba el comportamiento de una buena tutora, la propia Sera no podía detenerla. Pero Sera siempre sintió que esta doncella había seducido a su hermano pequeño; de lo contrario, ¿cómo podría su tranquilo hermano pequeño querer contratar a una sirvienta?

"¿Desde cuándo trabaja aquí? ¿Quién vive en la casa? ¿Cuántos años tiene? ¡Por favor, dígame, señora, soy oficial de policía, así que no trate de mentirme!"

El olor a pólvora caliente impregnaba el aire, uno perteneciente a la hermana mayor de Yves y el otro a la tía Sarah. Ninguno de los dos conocía la identidad del otro, pero los sentimientos femeninos únicos que tenían los hacían constantemente desconfiados el uno del otro inconscientemente.

¡Era como si sus seres queridos quisieran ser arrebatados a la fuerza!

"Mi nombre es Sarah; mi esposo era un soldado del cuerpo 107 que murió en la primera guerra mundial. Tengo un hijo que trabaja en la tienda de un amigo". Sarah comenzó a presentarse.

"Hoy tengo cuarenta y cinco años. Conocí al Sr. Yves en el taller de repuestos hace unos días. Después de eso, me invitó a trabajar aquí, eso es todo. He dicho todo". Como no estaba haciendo nada ilegal, Sarah no le tenía miedo a esta mujer policía.

Al ver los encantadores ojos azules de la doncella y su hermosa apariencia, Sera suspiró por dentro. ¡Pero cuanto más atractiva es una mujer, menos confiables son!

Sera golpeó la mesa con fuerza, "¿Qué le pasó realmente a mi hermano este mes? Por favor, dígame, señorita Sarah".

"No lo sé, solo escuché que el Sr. Yves despertó del coma unos días después de la explosión. El resto, no sé mucho".

"Pero le diré una cosa, el Sr. Yves goza de buena salud". Respondió la tía Sarah con calma; no hubo pánico cuando la otra parte la estaba interrogando.

Sera miró por un momento; hasta ahora, ninguna señal de mentira por parte de la mujer.

Sera se sintió un poco frustrada; tal vez la otra parte no le estaba mintiendo.

Sera se sentó, bebiendo café apresuradamente, después de lo cual preguntó casualmente: "¿Cuánto salario mensual te da mi hermano?"

"Doscientos dólares al mes". Respondió la tía Sarah con una sonrisa juguetona; de alguna manera, tenía ganas de presumir frente a la hermana mayor de Yves.