Marvel Dc: Bastard Hero Vol1

capitulo 105

capitulo 105

Después de que Klaus dio la orden, los soldados trajeron a la mujer llamada Edie y a la niña a la habitación.

"¡No no!" Erik, que tenía casi diez años, fue detenido por los nazis y se sintió impotente cuando vio que se llevaban a su madre y a su hermana.

"Woo ~ ¡Por favor, por favor no lastimes a mi hijo!" Como madre, llora y no quiere que su hijo sufra daño.

Esta escena podría ser muy conmovedora, pero todos en la sala eran personas entrenadas que estaban acostumbradas a matar. Y mucho menos parpadear, no sintieron lástima en absoluto.

Sinthea tenía curiosidad por lo que había intercambiado Yves. Esa persona siempre actúa de manera inesperada; debe haber un plan específico que él haya planeado.

Klaus se acercó a Erik, "¿Eres Erik? Sé que estás ocultando algo, muéstrame tus habilidades. De lo contrario, tu madre y tu hermana morirán".

"¡Soldados, apunten a la mujer y la niña!" Klaus gritó.

Erik estaba confundido y no sabía a qué habilidad se refería el terrible hombre. Solo podía mirar fijamente a Klaus, esperando poder explicarlo claramente.

Klaus solo se burló y se dio la vuelta. ¡Necesitaba un Mutante capaz, no un niño al que cuidar!

Dentro de la habitación se escuchaba el grito de miedo de una mujer, ¡cualquiera que se enfrentara a un arma mortal seguramente estaría aterrorizado!

Un destello de luz brilló a través del Dr. Zola. ¿Esta prueba se referirá a superpoderes ocultos? ¿Es el poder lo que busca Schmidt?

"Klaus, date prisa, eres demasiado lento". Zola se sentía impaciente.

"¡Disparar!" Klaus agitó su mano con una mirada indiferente. Por supuesto, era una orden para matar gente. Este incidente había ocurrido muchas veces en los campos de concentración, por lo que no era sorprendente.

"¡Por favor! ¡Por favor, señor, por favor no mate a mi madre y mi hermana!" Erik se arrodilla impotente, suplicando entre lágrimas y sin saber qué hacer. No podía pelear, solo podía suplicar.

*¡Bang Bang Bang!*

"¡¡¡Ah!!!"

De repente, se escucharon disparos en la habitación y los gritos previamente fuertes de la mujer se silenciaron. No había necesidad de explicar; la mujer aparentemente estaba muerta.

"¡¡¡Ahhhh!!!" Erik miró al soldado nazi con una mirada de enfado.

Una débil turbulencia se extendió por el aire y las armas de acero comenzaron a vibrar en las manos de los soldados. Incluso Yves, en la distancia, sintió vibrar su arma magnética.