✿ · Mal amigo · ✿
.
✿
·Solo dos días luego del encuentro con Kirishima, Bakugō se enteró por parte de Izuku que este ayer había hablado con el pelirojo de su gusto por las manualidades.
- ¡Él simplemente preguntó al respecto y todo fluyó de forma genial! -explicó con emoción mal contenida Izuku, gesticulando con sus manos mientras comía de manera torpe su paquete de galletas de avena- Pero yo jamás había mencionado nada al respecto. Me preguntó cómo lo habrá averiguado... -murmuró para sí mismo, haciendo un pequeño puchero confundido antes de morder una de sus galletas
- Tch, seguro fue tu cara de nerd -soltó Katsuki, sintiendo un profundo orgullo por dentro al escuchar lo que acababa de contarle el pecoso
Su cabeza llenándose de pensamientos como: ¡Ja! Fuí yo quien le dijo. ¿Viste como soy genial haciendo gancho?
Sin embargo, Izuku viró sus ojos con diversión ante lo dicho por su amigo, continuando su parloteo de un tema a otro, hasta que sus alarmas previamente programadas les indicaron que ya era hora de su siguiente clase.
Y, a pesar de que Katsuki no tenía un nuevo plan para acercar a su amigo al teñido, no le preocupaba demasiado el asunto. Pues tenía la impresión de que el pecoso podría llegar a tener una oportunidad con el pelirojo si realmente se lo proponía.
Aunque el hecho de que Izuku no se atrevería a averiguar si esto era cierto -a menos que fuera el mismo Kirishima a decirle que sentía lo mismo- aún era un problema.
Uno que, a pesar de todo, Bakugō tenía la confianza de que se resolvería a su tiempo.
Y es que, por ahora, Katsuki solo tenía cabeza para pensar en el trabajo de investigación estadística que se les fue encomendado en la clase de la tarde.
.
✿
.
A la salida de su última clase, Katsuki avanzó solo por la cafetería, más que dispuesto a gastar su dinero en los -bastante mediocres- capuchinos que ofrecían allí.
Necesitaba beber algo dulce y caliente luego de la pesada jornada que tuvo.
Tal vez le compraría uno a Izuku también. El idiota se ofreció como voluntario para ayudar a los de nuevo ingreso, así que ahora está atrapado por otra larga hora más.
Un café le vendría bien a ese pequeño tonto. Asintió para sí mismo Katsuki, agregándose a la corta fila frente a la caja de la cafetería
- ¡Hey! ¿Cómo estás, amigo? -preguntó una voz al costado del rubio recién ubicado en la fila
Bakugō se estremeció por el sorpresivo llamado, apretando sus puños de manera inconsciente antes de girar su rostro para toparse de golpe con la sonrisa inmaculada del teñido.
- ¡Perdón! No fue mi intención asustarte -se disculpó el pelirojo, sonriendo con diversión ante el obvio sobresalto del rubio
Pero Katsuki frunció su ceño con molestia ante las palabras del otro, devolviendo su mirada al frente para evitar a toda costa al teñido que, obviamente, quería reírse de que se "asusto"- No me asusté, idiota... -reclamó entre dientes Katsuki
Sin embargo, ante su actitud gruñona y posición a la defensiva, Kirishima se rió entre dientes, asintiendo ante lo que acababa de decir.
- ¿Cómo has estado? -volvió a preguntar Eijirō, consiguiendo una respuesta murmurada de parte del, aún tenso, cenizo
Sin embargo, de un momento a otro, entre preguntas agradables que hicieron sentir al rubio que la fila avanzaba más rápido, Katsuki se vió arrastrado por el pelirojo a comprar un brownie para acompañar su capuchino.
El café de Izuku enfriándose a su lado mientras, sin notarlo, la hora comenzaba a pasar con el pelirojo hablando y hablando sentado a su lado en una de las pequeñas mesas de la cafetería.Kirishima saltaba de un tema a otro con una agilidad impresionante, dispuesto a llevar la conversación casi por completo él solo. Y Katsuki, aunque perdido entre el dulce sabor de su capuchino y el parloteo incesante -pero no irritante- del pelirojo, alcanzó a tener un pequeño hilo de pensamientos sobre como el sujeto a su lado parecía pensar que eran amigos de toda la vida o algo así.
Guiandose por la forma en que le hablaba con tanta confianza.
- ¡Oh! Se me está haciendo tarde. Tengo taller de voleibol en media hora y aún debo ir por mis cosas -declaró de repente el teñido, bebiendo lo último de su café de un sorbo antes de levantarse de la mesa compartida
- Hmm -asintió Katsuki, acabando, al igual que el contrario, lo poco que le quedaba de capuchino
Kirishima sonrió mientras tiraba el vaso de cartón a la basura- Espero que nos podemos ver después, hermano. ¡Adiós! -se despidió
Su sonrisa permaneciendo tan deslumbrante como siempre mientras se retiraba del lugar luego de otro asentimiento por parte de Katsuki, dejando a este último con un sentimiento agradable pululando en su pecho.
Cada vez se convencía más y más acerca de que, realmente, Izuku no tendría problemas para acercarse a un tipo tan amable y dispuesto a hablar como el pelirojo.
El único problema es la timidez del pecoso. Y Katsuki comenzó a pensar que su plan de "conseguir que Kirishima se interese en Izuku", debería transformarse en un "conseguir que Izuku tenga las pelotas de hablarle a Kirishima".
·
✿
·

ESTÁS LEYENDO
Mal amigo [KiriBakuShima]
FanfictionIzuku ha estado enamorado de Kirishima Eijirō desde hace mucho tiempo. Tanto que Bakugō, siendo su más cercano amigo, siente que ya conoce al pelirrojo como la palma de su mano ante todas las historias y anécdotas que el pecoso le cuenta sobre este...