Capítulo 20 : El dolor que compartimos

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Kayama Nemuri suspiró mientras miraba el techo de su dormitorio. Se había mudado oficialmente a la casa de Yamazawa, y aunque estaba agradecida por el regreso seguro de Shouta e Izuku, no podía evitar la amargura en su estómago. ¿Por qué Inko tuvo que morir? Sabía que no era justo esconderse de Izuku, pero cada vez que lo veía, decía Inko.

Ni siquiera les habían dicho a los demás que habían empezado a salir.

Sintió las lágrimas calientes brotar de sus ojos y movió su brazo para taparse los ojos. Su corazón se contrajo dolorosamente al recordar cómo se había sentido el abrazo de la otra mujer. Extrañaba esos brazos cálidos y amorosos. Esa sonrisa tierna. Los dulces besos que la harían sonrojarse como una colegiala.

Extrañaba a Inko.

Habían estado planeando contárselo a los demás durante el receso de la UA. Iban a tomarse unas pequeñas vacaciones y... Aunque no había pasado mucho tiempo, Nemuri iba a mirar anillos.

Inko había sido la elegida . Quizás su único . Y ahora se había ido antes de que tuviera la oportunidad de apreciar lo que tenían... podrían haber tenido.

Se sobresaltó cuando escuchó un pequeño golpe en su puerta. Secándose rápidamente las lágrimas, se puso una bata y la abrió. "¿Izuku?" cuestionó mientras el joven movía los pies torpemente.

"Yo..." Apartó la mirada y se sonrojó. "Quería saber si querías... ¿venir a visitar a mamá conmigo?" La voz de Nemuri quedó atrapada en su garganta cuando la miró con los ojos de Inko .

"S-sí". Ella se aclaró la garganta. "Déjame tirar algo, ¿de acuerdo, chico?"

"Cosa segura."

Unos minutos y una nota rápida para Shouta y Hizashi más tarde, y los dos estaban saliendo por la puerta en dirección al cementerio donde descansaba Inko.

El viaje fue tranquilo, el silencio solo roto por los pájaros madrugadores dando la bienvenida al sol naciente. Una capa de niebla brumosa los rodeaba, añadiendo serenidad a la mañana.

Nemuri debió haberse distraído, porque lo siguiente que supo fue que estaba mirando la lápida. El nombre de su novia tallado en la fría y dura piedra hizo que su corazón se encogiera de nuevo.

"¿Por qué yo?" preguntó en voz baja.

"¿Hm?" Izuku la miró, un dolor familiar en sus ojos.

"¿Por qué no traer a Shouta o Zashi aquí?"

"Porque..." Izuku miró hacia abajo. "Sabía de ti y de mamá." Los ojos de Nemuri se agrandaron. "Quiero decir... mamá en realidad me lo dijo antes..." Apretó un puño y rápidamente se secó las lágrimas. "Ella quería saber que estaba bien... si tenía dos mamás".

El corazón de Nemuri dolía algo terrible, y se tapó la boca para ahogar el sollozo que no pudo contener. Ella quería que yo... fuera su segunda mamá?

"Yo... sé que debe ser difícil... me parezco mucho a mamá". Izuku miró hacia otro lado. "Pero... Teniendo en cuenta la fecha que es hoy, pensé... Debería darte esto también". Él sonrió tímidamente mientras le tendía una tarjeta.

Se secó las lágrimas (no es que sirviera de nada) y aceptó la tarjeta. ¿Fecha? ¿Qué día es? Se estrujó el cerebro, pero no pudo entenderlo. En cambio, abrió la tarjeta.

Feliz Día de la Madre estaba escrito en la parte superior, y Nemuri se encontró arrodillándose en estado de shock.

Querida Mama Nem... ¿está bien si te llamo así? Si prefieres, puedo seguir llamándote tía Nem... Quería hacerte saber cuánto te aprecio. Perder a mamá... ha sido duro para todos. Y... Y siento que es un poco más fácil contigo. Nunca podré reemplazarla, ni querría hacerlo. Pero creo que ella estaría bien sabiendo que no estoy sin una madre, ¡porque también te tengo a ti! Hiciste a mamá tan feliz, y no puedo agradecerte lo suficiente por eso. Sé que iba a mirar anillos contigo. Gracias por hacerla verdaderamente feliz y... gracias por no dejarme sola.

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