|| SICARIO || chanmin

prólogo

Mi nombre es Christopher Bang, soy el asesino a sueldo más buscado de todo Corea. Se preguntaran: ¿cómo es que una persona puede llegar a convertirse en algo así? Si, algo, no alguien, pues un persona que asesina a sangre fría mientras le lleguen al precio adecuado, no es una persona, es un monstruo, eso soy yo.

Seria difícil explicar que fue exactamente lo que me convirtió en un ente sin sentimientos ni respeto alguno por la vida, probablemente fue la combinación de muchas terribles experiencias que viví en mi infancia, que mi mente se ha encargado de reprimir por mi propio bien.

Nunca en mis mas de diez años de oficio me he sentido ni un poco mal o culpable por alguno de mis atroces actos; y mira que he hecho cosas absolutamente terribles, hasta el día de ayer.

Recibí una llamada con una petición muy común para mí: poner una bala en la cabeza de un chico provocándole una muerte rápida y sin dolor, algo que he echo tantas veces que es casi rutinario para mi. Sin embargo, un escalofrió recorrió mi cuerpo de pies a cabeza por este encargo en especifico.

Te preguntaras entonces: ¿qué puede ser tan malo para provocar un sentimiento así en un sicario sin escrúpulos? bueno, la verdad es que no es la petición lo que me remueve sentimientos, es la victima.

Su nombre es Kim Seungmin, la primera vez que lo vi fue cuando estaba investigando a un tipo rico que traicionaba a su socios de negocios. Lo seguí a todos lados por una semana para conocer su rutina y poder elegir el momento mas adecuado para actuar, eso fue lo que me llevo al conservatorio mas prestigioso del país.

Según lo que recuerdo, el tipo fue a buscar a su hija mayor a ese lugar, pero ni siquiera me fije en eso, pues este hermoso ángel capto mi atención desde el momento en que mis ojos tristes se posaron sobre el.

Decir que me cautivo es un eufemismo, literalmente desarrolle algo mas que una obsesión por ese hermoso chico, sueño con el, lo anhelo con cada parte de mi ser, es la personificación de mis mas oscuras fantasías. Es probablemente la única persona en el mundo que logra hacerme sentir algo y es muy irónico, pues ni siquiera sabe de mi existencia.

Te imaginarás como me siento cuando me están pidiendo que aniquile a la única persona en este mundo que me hace sentir humano.