Los reyes contrarios

♤C.1

AMANDA FARLEY.

20 de enero.

10:30 AM

•Día del viaje a Khisfire.

Toco impacientemente la puerta de la habitación de mi hermana. En quince minutos tenemos que empezar el viaje -que no es nada corto para mi gusto, dura 5 horas- Si no sale lo más probable es que me termine dando un ataque al corazón por los nervios que tengo.
De tan solo pensar que voy a tener que estár semanas y quizás meses en un lugar al que es completamente desconocido para mí, hace que la piel se me ponga de gallina -Se que sólo es un tiempo, pero no me gusta salir de mi comodidad por mucho tiempo, entiendanme.-

Estoy a punto de abrir la puerta, ya no me importa si está desnuda o sea lo que sea que esté haciendo para no abrirme la puerta.
Pongo la mano sobre el picaporte y no hay necesidad de que la empuje, porque esta lo hace por si sola.

Veo a mi hermana con un vestido color rosa pastel con encaje y con una segunda capa de tela más corta del mismo color por encima, su cabello castaño está recogido en un moño y dos de sus mechones más cortos del frente caen a los lados de su rostro.

La examino de arriba a abajo, luce bien, y lo sabe.

--Estoy nerviosa. ¿Crees que me veo bien? ¿Y si le parezco horrible? ¿O si...--
Me encuentro interrumpiendola porque me marea de lo rápido que habla --Te ves perfecta, tiene suerte de que se va a casar con una mujer cómo tú, ¿okey?.-- Asiente mientras se adelanta hacia la puerta.
Cierro la puerta cuando ella sale de su habitación, y nos apresuramos a bajar dos largas escaleras para llegar al primer piso.

Luego de unos minutos, el viaje comienza.

Time after.

Veo desde lejos el castillo de la familia
Bellwood, el entorno que lo rodea es muy diferente al de mi familia.
Khisfire tiene muchas playas, sólo hay un par de bosques por lo que tengo entendido. En Langston todo es diferente, mi castillo familiar está rodeado de verde, hay bosques y jardines por todas partes. Es todo lo contrario a lo que es aquí.
Todo esto da una sensación de alegría y felicidad, en mi reino no es así, no siempre...

Salgo de mis pensamientos cuando noto que el carruaje se acababa de detener y un hombre de traje se acerca a abrirme la puerta del mismo, me bajo con la ayuda de sostener su mano -Si no la aceptaba, probablemente, me caería por el largo vestido que tengo que utilizar.-

Espero a que sea el turno de Amaris y mis padres para bajar del carruaje. Subimos un par de escalones antes de entrar al castillo acompañados por... no sé exactamente quiénes son, pero son dos hombres rubios, creo que son hermanos por su parecido.
Al entrar hay empleados en el costado de la puerta en forma de fila, todos hacen una reverencia a medida de que vamos avanzando.

Veo a al rey y a la reina parados al frente de una escalera. La reina se llama Fleur Brown Bellwood, tiene el cabello oscuro y los ojos color verdes esmeralda. El rey se nombra Fendler Bellwood, tiene el cabello negro y los ojos azules, su piel es pálida, aúnque no lo crean, parece ser algo amistoso por su semblante.

Llegamos al frente de ellos y hacemos una reverencia por respeto.

--Fendler Bellwood, es un honor volver a verlo. Fleur, encantado de conocerla.-- Saluda mi padre a ambos.