James escuchó gritos y fue corriendo hasta sus amigas, pero no encontraba el camino, la gran nevada que estaba habiendo en aquel momento había borrado las huellas y no sabía como volver.
Le costaba caminar entre la nieve y tan solo se podía guiar por los gritos.
Corrió todo lo rápido que pudo, pero de repente cesaron los gritos y se escuchó un golpe en seco.
Se quedó paralizado un momento y después continuó corriendo. No sabía donde estaba ni hacia donde iba.
Llegó a donde estaban las chicas y en cuanto las vio paró, no podía creer lo que estaba viendo, la nieve que había al rededor de los cuerpos se había vuelto rojiza. James apenas podía mirar aquella escena.
Corrió en busca de ayuda, corrió hasta que se dio cuenta de que estaba completamente perdido, en mitad del bosque, donde nadie podía oírle.
Se sentó en el suelo, acurrucado entre las raíces de un árbol más grande. No sabía que hacer, estaba perdido, hacía mucho frío y cada vez estaba todo más oscuro.
Se quedó allí sentado un buen rato, pensando que todo estaba pedido y que ya no quedaba nada más que hacer.
De repente vio algo entre los árboles, se levantó y se acercó a aquella cosa roja que se movía con el viento. Era un trozo de hilo rojo, como el del jersey de Michael, que se había quedado enganchado en un árbol.
Al levantar la vista vio que más adelante había una caseta de madera oscura que se camuflaba con el bosque.
Vio unas huellas que iban hacia aquella caseta. James recuperó toda aquella esperanza de ser salvado que había perdido y corrió para llegar allí.
Al acercarse vio que tenía luz dentro y eso significaba que habría alguien, entonces corrió aún más animado.
Llamó a la puerta y mientras escuchaba pasos que venían a recibirle, vio el pomo manchado de sangre, pero ya era demasiado tarde.
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La Tormenta
Mystery / ThrillerEn un pueblo perdido en mitad del bosque se encuentra un grupo de amigos a los que les intriga todo lo que pueda haber en el...