The Magic Of Love (PAUSADA)

Capítulo 9

Al día siguiente, en la cocina del castillo de la alicornio, yacía el dragón y la ya mencionada, platicando.

—¿Sabes que podría ser una buena oportunidad para ti, Spike? —Twilight se dirigió a Spike con dicha incógnita, mientras con su magia alzaba una taza de café, dándole un sorbo.

—Ya lo sé —respondió el escamoso—. Pero ¿Estás de acuerdo con esto? —consideró la opinión de su amiga.

—Bueno... por el momento creo que es una excelente oportunidad para que aprendas algo nuevo y te sirva de experiencia —argumentó sabiamente.

—¿De verdad no te molesta? —volvió a preguntarle.

—Spike. Eres mi asistente, no mi esclavo —respondió, esbozando serenidad—. Además, es bueno que aprendas algo nuevo —dijo, recordando que él, aparte de hacer el quehacer, acomodar libros y una que otra cosa más, no sabía hacer nada.

—Está bien. Si tú lo dices —exclamó, encogiéndose de hombros.

—¡Esa es la actitud! —sonó positiva—. Es bueno que hagas otras actividades. No quisiera que estuvieras atado a mí por siempre —lo último lo dijo en broma.

—Entonces... ¿Ya no me necesitas? —Spike se quedó pasmado.

—No es eso —refutó, acercándosele para abrazarlo—. Lo que pasa es que sabes que llegará un momento en que harás tu propia vida. Por eso es bueno que tengas esta clase de experiencias, Spike, para que estés preparado. Algún día tendrás tu propia familia, y yo siempre estaré ahí para ti y tu para mí —sus palabras hicieron eco en los pensamientos del dragón.

—Oh, ya veo... —musitó, captando las palabras de Twilight—. Muchas gracias —Agradeció, otorgándole un lindo y tierno abrazo.

Twilight tardó un poco en reaccionar, estaba siendo abrazada por su asistente, quien le provocaba sentimientos confusos, sin embargo, algo hizo que ella también lo abrazara, hasta separarse.

—V-vamos a desayunar —soltó la alicornio de cuero violeta. Pero antes, ella se acordó de algo más—. Spike, hay algo que debo decirte.

—¿Sí? ¿Qué pasa? —el mencionado alzó una ceja.

—Y-yo, ehh... y-yo —se quedó como en una especie de trance. Quería contarle sobre los extraños sentimientos que retoñaban hacia él, más al final no lo logró—. Mucha... suerte —solo soltó eso.

Al finalizar el desayuno, Spike tomó rumbo hacia la granja de nuestra amiga granjera: Applejack, no sin antes haberse despedido de Twilight y Starlight.

Cuando llegó, pudo ver como Applejack salía de la granja a toda prisa. Él la saludó y ella se detuvo.

—Hola, Applejack —saludó el asistente número uno.

—Hola, Spike —saludó la contraria—. Veo que si aceptaste mi oferta —notó.

—Sí. Twilight insistió en ello —respondió, soltando una breve carcajada.

—Me alegra que hayas venido, pero llegaste en un mal momento. Saldré por un tiempo, tal vez esté fuera unos días —comunicó, acomodándose su sombrero—. Es una misión del mapa. Hay mucho trabajo, pero no te preocupes, con el buen trabajo que hiciste la otra vez seguro no será un problema —puso su casco en la espalda del dragón de escamas verdes.

Spike se fijó en Applejack. Pudo ver como su cutie mark brillaba incesantemente, entiendo a lo que ella se refería.

—Bueno. Daré mi mayor esfuerzo —dijo Spike, asintiendo con determinación.

—Sé que lo haras —agregó la yegua granjera.

—Nos vemos luego. Que te vaya bien —se despidió de ella antes de ingresar en la granja.