El Deseo del Duende |Kevin Álvarez|

Capitulo Diecisiete ✯ "Acercamiento"

Al día siguiente.

Azul C✯

Durante la noche no pude dormir, al parecer no dormir se me estaba haciendo una mala costumbre, a pesar de que Julie estuvo conmigo, la sensación escalofriante seguía ahí, mi amiga durmió como una bebé, admitía que le tenia envidia por eso, me daban ganas de preguntarle "Oye Julie, ¿No sientes que alguien te observa mientras duermes?" Pero claro que no lo haría, detestaria que por mi culpa luego no quisiera venir a acompañarme.

Tampoco pude pegar el ojo, porque estuve pensando en lo que Kevin me había dicho acerca de lo que tenía que hacer con Marco, ¿Y si realmente le gustó pero no se anima? ¿Pensará que soy una aprovechada? Se que Marco tiene buena posición económica y por eso es que muchas mujeres quisieran estar con un hombre como él... Probablemente era muy selectivo y por eso estaba soltero.

— No has tocado tu desayuno desde que lo serviste ¿Ya viste la hora? Tenemos quince minutos para llegar al trabajo — hablo Julie mientras metía un bocado de comida a su boca, la mire y solté un suspiro.

— No tengo hambre — respondí, Julie dejo los cubiertos a los lados de su plato y me miró con molestia.

— ¡Come! — exclamó — Te aseguro que si no lo haces ahorita te arrepentirás, tenemos mucho trabajo y apenas vamos a tener tiempo de comer.

Julie tenía razón, así que mire la comida y me forcé a comerla, por alguna extraña razón, no había pasado nada raro con Julie en mi casa, las cosas no habían cambiado de lugar y tampoco me habían escondido cosas, ¿Será que el duende se fue? Bueno eso ya lo averiguaría después.

**

Julie y yo habíamos llegado a la oficina, pero había algo que nos llamo la atención, una mujer, quien estaba sentada en la silla de Marco dentro de su oficina, pudimos verla por qué tenía la puerta abierta. Daniela se acercó a nosotras con una sonrisa en los labios y antes de saludarnos decidió arruinar mi día.

— Es la novia de Marco, se llama Cecilia, pero todos la conocen como Cecy — comentó con tono divertido — Es una lastima Azul, ya te ganaron a Marco.

— ¿Cómo puedes asegurar que es su novia? Es la primera vez que la ves. — pregunto Julie, internamente le agradecí, pues tenía exactamente la misma duda que ella.

— Por qué llegaron juntos tomados de la mano, y la presentó como su novia, ¡Dah! Se perdieron de eso por llegar tarde — dicho eso, Daniela se alejo, mire una vez más a la mujer que miraba su celular muy cómodamente sentada en esa silla, parecía tener unos 35 años de edad, tenía la piel apiñonada, cuerpo delgado y cabello rizado color negro, era atractiva, no lo podía negar.

Sinceramente me sentía mal, estaba muy decidida a hacer algo al respecto con mis sentimientos, quizás comenzar a actuar y hacerle saber que me gustaba, pero ahora hacer eso resultaba imposible.

— Ánimo, Color — escuché a Julie — No es el fin del mundo, quizás deberías verlo como una oportunidad para olvidarte de él.

¿Olvidarme?... ¿Cómo podría hacerlo? Si desde que lo conocí me había atraído, y olvídarme de alguien era difícil para mí, no tenía la habilidad de dejar a las personas de lado, aunque me lastimaran lo suficiente. Aguante mis lágrimas y me dirigí a mi lugar de trabajo, ni siquiera mire a mi amiga, me dispuse a hacer lo que tenia que hacer, si mantenía mi mente ocupada, probablemente dejaría de pensar que la novia de Marco estaba ahí.

**

La noche había caído, y por primera vez me había quedado hasta tarde en el trabajo, Julie y Daniela se habían ido ya, también la novia de Marco ya no estaba, únicamente quedaba un chico que siempre parecía estar en su mundo, con audífonos puestos y comiendo paletas mientras tecleaba sin parar, sabía que él se llamaba Teo y que se encargaba de la publicidad y esas cosas. También estaba Marco en su oficina revisando unos documentos, y yo estaba terminando de editar las notas.