Mi Pequeña Luna

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Lisandro

El sol ya se había ocultado y la luz de la luna estaba en su punto más alto

Solo estábamos mi luna y yo, los demás ya se habían ido a dormir puesto que ya era un poco tarde

Cómo luna empezaba a tener frío entramos al jacuzzi, ella estaba jugando con el agua mientras que yo solo la veía con una leve sonrisa

Lisandro- ¿Ya no tienes frío luna?

Eva- poquito

Lisandro- ven, te daré calor- asiente y se acerca a mí

Hago que se coloque a horcajadas mío y junto nuestros cuerpos, casi no hay ropa de por medio y el agua está un poco caliente, su temperatura subirá rápido

Acarició su cabello mientras miro con detenimiento su rostro

¿Quién diría que esta pequeña humana que le encanta el chocolate y las fresas sería mi luna?

Elian- ¿Es queja?

Lisandro- para nada. Ambos sabemos que haríamos lo imposible por ella

Eva- ¿En que piensas papi?

Lisandro- en lo mucho que te amo- una sonrisa se formó en su rostro y sus mejillas se tornaron rojas logrando que yo también sonriera

Mis brazos rodean su pequeño y delicado cuerpo atrayéndola lo más posible a mi

Lisandro- amo tenerte así, de esta manera mi mundo está a salvo

Tomo su mentón con delicadeza y la besó, presiono su cintura evitando separar nuestros cuerpos

Su olor me estaba volviendo loco, y no sólo a mi, también a mí lobo

Eva- papi- coloca sus pequeñas manos en mi pecho intentando alejarme de ella

Lisandro- ¿Que ocurre pequeña?

Voltea hacia los lados fijándose que no haya nadie viéndonos

Río y tomo su mentón volteando su rostro

Lisandro- tranquila nena, lo más seguro es que todos estén dormidos

Eva- ¿Y si despiertan?

Lisandro- no creo que despiertan hasta que el sol salga

Asintió aún sin estar muy segura, aproveche ese momento de distracción para besarla y atraer su cuerpo al mío nuevamente

Deshago el moño de su corpiño haciendo que este caiga y deje sus pechos libres

Bajo mis labios hacia su cuello y luego a sus senos, tomo ambos con mis manos juntándolos y los meto en mi boca

Eva- ahhh~- hace su cabeza hacia atrás y acaricia mi cabello

Empieza a mover lentamente sus caderas rozando su entrepierna con mi miembro erecto sacándome un gruñido

Ese simple movimiento de caderas combinado con su olor hizo que mi autocontrol se fuera al carajo

Me estaba controlando porque no quería lastimarla, su cuerpo es tan sensible y delicado que temo lastimarla

Eva- daddy~

Lisandro- si luna- digo mientras beso su cuello y coloco mis manos en sus caderas evitando que se detenga con ese vai ven

Eva- quiero tu nudo, por favor- una sonrisa se formó en mi rostro al escuchar aquellas palabras y se hizo más grande al ver sus mejillas totalmente rojas