Mi Pequeña Luna

41

Eva

No se ni que hora es, pero no puedo evitar sentirme preocupada, ya pasaron unas semanas desde que mis bebés nacieron y son muy tranquilos por el momento pero eso no evita que me preocupe

Así que aquí me tienen, a altas horas de la noche enfrente de sus cunas observandolos con detalle para verificar que estén bien

Es normal que me sienta así ¿no?. Soy madre primeriza y no se si lo estoy haciendo bien, solo quiero que ellos estén a salvo y que nada les ocurra

De repente siento unos brazos rodear mi cintura desde atrás, di un pequeño brinco por el susto pero enseguida me tranquilicé pues se que es Lisandro

Lisandro- ellos están bien, volvamos a la cama ¿si?- deja su mentón en mi hombro

Eva- quisiera pero no puedo dormir sabiendo que algo malo puede ocurrirles

Lisandro- y el paranoico según era yo- golpeo levemente su brazo haciéndolo reír- vamos cariño, tienes que descansar, llevas varias noches así

Eva- lo sé, de verdad que intento ya no estresarme tanto pero no puedo

Lisandro- yo me se una técnica muy buena para quitarte todo ese estrés- dice mientras lleva una de sus grandes manos a mis pechos

Río negando con la cabeza y me volteo para verlo

Eva- ya le dije que no lo haremos con nuestros hijos durmiendo a lado nuestros- dejó un pequeño beso en su mandíbula mientras que el acaricia mi cintura

Es algo que hemos estado discutiendo últimamente, a él poco le importa tener sexo con nuestros hijos en la misma habitación, pero a mi me incómoda bastante por lo que estas semanas a estado en abstinencia

Lisandro- estas siendo una luna muy desobediente

Eva- aja. Me estas poniendo nerviosa, mejor regresa a la cama

Lisandro- no me gusta dormir sin ti nena

Lo sé de sobra, ya se acostumbro a dormir sosteniéndome como si me fuera a ir a alguna parte

Suspiro y asiento. Intentare dormir una vez más, igual todavía faltan unas horas para que amanezca

Tomados de la mano regresamos a nuestra cama y nos recostamos, sus brazos no tardaron en rodear mi cuerpo y yo deje mi rostro en su cuello inhalando su aroma. Sin duda alguna estar entre sus brazos es una buena manera de conciliar el sueño

(.....)

Unos besos húmedos en mi cuello me desepertaron, quise tardar en abrir mis ojos pues se sentían muy bien

Cuando sus labios fueron a los míos no dude en corresponder, sentí como sonreía mientras mis brazos rodeaban su cuello

Su cuerpo se colocó encima del mío y enseguida rodee su cintura con mis piernas, el bulto en su entrepierna empezó a rozarse con mi intimidad robandome un pequeño gemido

Lisandro- ¿ya me dejaras quitarte todo ese estrés que dices tener?- solo asentí gimiendo y acercando mi cuerpo al suyo

Eva- ¿donde están Hes...- estampó sus labios contra los míos impidiéndome terminar

Lisandro- abajo, sus tías saben cuidarlos

Con algo de desesperación se deshizo de mi ropa y su boca no tardo en ir a mis senos. Ultimamente le encantan, dice que están mas grandes por el embarazo

Lisandro- había estado envidiando a mis hijos estos días por esto- toma entre su mano uno de mis senos y lo mete a su boca

Eva- ah- arqueo mi espalda llevando mi mano a su nuca