¡No más Noah Holland!
Estaba decidido, por lo que restaba del día no hablaría con él, no pensaría en él, ni respondería sus mensajes.
Estaba en un pequeña reunión de estudios, y lo único que provocaba en mí el castaño era distracción. Lo borraría de mi mente por todo el día y me concentraría en lo importante: estudiar.
Puse mi celular en silencio y miré a mi compañera, le pasé mis apuntes para que pudiéramos tomar los puntos importantes. Hicimos lo mismo con sus apuntes y los de Louis.
-La tercera parte es de las más importantes, creo que Claire lo explicó mejor, yo apenas lo apunté.- comenté
-Estoy de acuerdo, yo nisiquiera entiendo qué quise escribir en esa parte.-
Claire y yo reímos.
-Debes mejorar tu caligrafía Louis...- sugirió Claire.
-Lo sé, el profesor dijo estar casi una hora corrigiendo mi trabajo porque no entendía mi letra.-
-O la mejoras, o creas un curso para comprenderla, porque no siempre tendrás con quién compartir apuntes.-
Los tres reímos y continuamos pasando apuntes.
Claire y Louis eran una gran compañía, no diría que eran grandes amigos, pero compartíamos algunas clases y eran muy agradables. Eran graciosos y entretenidos, pero cuando se trataba de los estudios ambos se tomaban todo muy enserio. Yo había descubierto que me resultaba más fácil estudiar con alguien, así que nos reuníamos al menos dos veces a la semana.
Estuvimos casi tres horas encerrados en la biblioteca, me dolía el cuello y los hombros, y mi trasero probablemente estaría más chato de lo normal de tanto estar sentada. Era demasiado para ser viernes, mi mente ya había llegado a su limite del día, necesitaba un respiro y un baño desestresante.
-Creo que ya es suficiente por hoy.- dije estirando mi cuerpo y haciendo sonar todas mis articulaciones.
-Si, además parece que estás muy solicitada.-
La miré sin comprender.
-Tu celular no ah parado de iluminarse.- indicó señalando el aparato.
-Ah, no es nada.-
Había estado evitando mi celular todo el día, por lo que lo metí en mi bolsillo ignorándolo otra vez, y me concentré en guardar mis cosas.
-Bonito bolso. ¿Es Kashmir?- preguntó Claire.
-Ah si, fue un regalo de mi cuñada.-
-Debió costarle una fortuna.- Claire volvió a admirar mi bolso fascinada.
-No, es imitación.- una vez que tube todas mis cosas, me dispuse a irme. -Nos vemos la semana que viene.-
No esperé el saludo de los chicos, salí de la biblioteca y empecé a caminar por los pasillos.
A mi nunca me interesó tener cosas de marcas, caras o importadas; pero aquí parecía fascinarles a todos, y no me gustaba dar explicaciones de dónde había obtenido un bolso tan caro, si no venía de una familia adinerada.
La verdad el bolso si era original, Charlotte me lo había obsequiado por mi cumpleaños, pero prefería que todos pensaran que no lo era.
Que mi madre fuera de las mejores organizadoras de eventos de Bristol, o que mi padre fuera dueño de una de las empresas textiles más grandes de Europa, no era algo que me gustara presumir. Así fue toda mi vida, y eso no me ayudó a conseguir amigos, nada cambiaría ahora.Mi teléfono vibro dentro de mi pantalón, y pensé en ignorarlo otra vez, pero cuando lo tomé y vi la llamada no pude hacerlo.
-Hola...-
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(Des)Afortunados Amigos #2
Teen FictionNaomi dice ser la Wells con menos suerte. Desafortunada en el juego, en las amistades, en la cocina, y ni mencionemos al amor. Aunque una beca para estudiar en Columbia, New York no suena tan desafortunado... ¿no?