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Jungkook pronto notó su estómago dar un vuelco y una sonrisa cubrir su rostro.

Le gustaba a Taehyung.

Le gustaba a su hyung mucho más de lo que pudiese hacerlo Hoseok.

Ojalá hubiese podido disfrutar mucho más de aquella confesión si no fuese porque las lágrimas de Taehyung lo hicieron sentir como la miseria que era.

—Hyung —lo llama tratando de secar sus lágrimas —también me gustas.

—No, no me sirve eso —niega apartado su mano —solo te gusto porque Jimin te ha dado la patada y como yo te he dado siempre todo de mi soy la opción fácil.

—No es así —trata de agarrar la mano de Taehyung pero este se aparta —estaba confuso y pensaba que Jimin me gustaba pero quien en verdad me gusta eres tú.

—Jungkook llevo meses escuchándote babear por Jimin mientras prácticamente ignorabas mi existencia excepto cuando te convenía. Hemos follado mientras me decías que no hablase porque entonces no podrías concentrarte en que era Jimin y he estado consolándote cuando te rechazó, ¿en verdad esperas que te crea? Porque mientras tú hacías todo eso yo simplemente seguía ofreciéndote más y más de mi porque estoy enamorado de verdad.

Jungkook sabía que al contrario no le faltaba ni una pizca de razón porque él mismo había estado convencido de que estaba colado por Jimin.

Además todo aquello le hizo sentir aún peor, porque si lo pensaba estaba claro que Taehyung gustaba de él y aún así nunca lo tuvo en cuenta.

Lo que no imaginaba era que el contrario estuviese enamorado, aunque aquello explicaba que hubiese aguantado tanto.

—Hyung en verdad lo siento —susurra sabiendo que probablemente no lograría convencerlo.

—Sé que lo sientes pero no puedo creerte tan fácil porque tú mismo no pareces convencido de que yo te guste de verdad —Taehyung solo quería irse a su casa y ponerse a llorar el resto de la semana.

Siempre había soñado en ser correspondido por el menor, de hecho siempre había luchado por él con una pequeña esperanza de ser aceptado, pero ¿por qué ahora que era mutuo se sentía tan mal?

—Taehyung... lo único que puedo decirte es que realmente me gustas y quiero que estemos juntos, así que déjame intentarlo —pide ofreciéndole un pañuelo que sí que fue aceptado —entiendo que no me creas porque he andado detrás de Jimin todo el tiempo, pero solo estaba confundido... quiero decir hyung es tan genial y todo el mundo lo adora, por eso lo idealicé tanto. Además como siempre te he tenido para mi no he sabido valorarlo y simplemente lo obviaba —Taehyung se quedó en silencio escuchándolo y secando sus lágrimas.

Había llorado tantas veces por Jungkook que no tenía dedos suficientes para contarlas.

—Si quieres que estemos juntos necesito que lo demuestres... no quiero ser solo el premio de consuelo por el rechazo de Jimin y acabar aún más lastimado.

—Lo sé, lo sé y yo no quiero que sea así —aclara sosteniendo sus mejillas y limpiando sus lágrimas —déjame intentarlo, ¿sí?

Taehyung asiente no muy seguro, después de todo seguía sin creerlo al 100%, pero al menos Jungkook quería intentarlo y eso lo tranquilizaba.

Por fin había podido quitarse aquel peso de encima y si todo salía bien, podría salir con Jungkook y cumplir su sueño.

Realmente podría conseguir aquello que mucha gente ansiaba pero que poca conseguía: tener algo con su crush.

Taehyung esbozó una leve sonrisa y guardó el pañuelo antes de mirar al menor, haciendo que este le sonriese de vuelta.

—¿Quieres que tengamos una cita mañana? —pregunta cuando retomaron el camino de vuelta hacia casa de Taehyung.

I love you, but it hurts «KookTae»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora