Aiden's Shadow [INAZUMA ELEVEN]

𝐂𝐚𝐩𝐢́𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟏𝟏

[Narra Amity]

Sofía y yo fuimos las últimas en entrar, allí estaban ya todas tumbadas hablando, casualmente de amoríos, más concretamente parecía que hubieran estado hablando de Mark, Sofía lo notó al instante. Antes de unirme a la conversación me metí en el saco de dormir que estaba al lado de Albia, notando así que Loa intentaba disimular que no estaba despierta haciéndose la dormida

—Oye, que no hace falta que os calleis, podéis seguir hablando. Ya se que estáis hablando de mi hermano–comentó Sofía mientras se metía también entraba en su saco de dormir
—¿Mark?¿Os gusta Mark en serio?Por dios, que gustos más malos, sin ofender Sofía–respondí al instante–Digo, Mark solo se centra en el fútbol, fútbol y más fútbol, no le importa nada más...¿Cómo te podría gustar alguien que fácilmente te cambiaría por un balón de fútbol?Digo, si vais a estar en líos amorosos que por lo menos sea con un guapo millonario que se le pueda sacar provecho después, como digo yo siempre, mejor llorar entre billetes que entre cojines
—No te preocupes, si no me ofendo, la verdad que en ese sentido tienes toda la razón, Amity–me contestó Sofía de manera sincera
—¿Eh?¿Por qué?Mark es un chico muy amable–respondió Tori mirándonos
—¿Cómo novio?–preguntó Nelly
—No, como amigo...¿Por qué tendría que verlo como novio?–Tori estaba cada vez más confundida pero Silvia y Nelly parecieron dar un suspiro de alivio
—Bah, por dios, al menos buscaros un amor más interesante, por ejemplo, estar enamorada de un pelo helado de pistacho está interesante–dije, claramente para picar la Loa, la cual enseguida lo notó poniéndose roja, pero seguía intentando sobrevivir haciéndose la desinteresada

Después de aquella charla sobre Mark, parecieron tener en cuenta mi otra parte de la explicación y todas me miraron con curiosidad

—¿Por qué dices eso, Amity?–me preguntó Noelia, refiriéndose claramente a lo último de mi discurso, no lo relacionado con Mark
—¿Cómo que por qué?Porque es la verdad, el amor te vuelva más débil y te quita tiempo para conseguir tus objetivos, si al menos vas a perder tu tiempo que menos qué que sea con un dios griego y con billetes en las manos–yo siempre tuve una idea muy clara sobre eso, no era una cazafortunas ni una interesada pero yo lo veo lógico, tampoco es plan de hundir tu vida en la miseria solo por amor
—¡El amor no es débil!¡Puede que te haga actuar muy tontamente pero también es muy importante! El amor te da fuerzas y muchas ganas de salir adelante, el amor es muy importante–se quejó Sofía tras mi explicación
—¿Es que a ti no te gusta nadie, Amity?–me preguntó Celia, he de admitir que por instinto mis mejillas se pusieron algo rojas cuando en mi cabeza apareció la imagen de ese estúpido pelirrojo niño mimado. ¡No!¡No se porque apareció ahí!¡No me gusta ese imbécil!
—¡Pues claro que no!Eso son simples tonterías y nimiedades para mí, además tengo que centrarme mucho en ser la mejor delantera y no puedo tener distracciones. Y tampoco quiero tener a Bryce echándome la bronca, con las veces que lo hace por mis travesuras junto a Claude está bien–respondí apartando la mirada. Por instinto empezé a hablar de mi vida en la Academia Alius, pero por supuesto de manera camuflada y con los nombres reales, vale que a veces soy tonta y eso pero no tanto
—¿Claude?¿Él está bien? Hacia mucho que no sabía de él–me preguntó Albia por lo bajito, yo solo le di una sonrisa pícara
—¿Claude?¿Es ese él que te gusta?–saltó Sofía a molestar, seguramente debió escuchar como Albia me cuchicheaba su nombre y se hizo ideas equivocadas
—¡Iugh no!–me dió un escalofrío de solo pensarlo, quiero mucho a Claude, o Torch en su versión extreterreste pero definitivamente jamás saldría con él–La única muy cercana que tengo con él es para molestar a Bryce y liarla juntos, ay, es tan divertido ver la cara de molestia de Bryce y el resto. Además, ya hay alguien interesada en él, una graaan amiga mía–le di un pequeño codazo a Albia, ella se puso un poco roja y después se hizo la dormida. Mirala como duerme cuando le interesa
—¡Oohh!¡Una amiga tuya está enamorada de él!¡Qué lindo!–dijo Noelia
—¿Bryce?¡No puede ser!¡Otro pretendiente más!¿¡Pero cuántos tienes?!¡Comparte!–se quejó Sofía, que ya lo había vuelto a sacar todo de contexto–Dios da pan al que no tiene hambre
—¡Qué no plasta!–salté, también quiero mucho a Bryce, o Gazelle actualmente en la Academia Alius, y aunque tuve un pequeño crush en él cuando éramos más jóvenes, es decir cuando era una niña pequeña, nada que ver con ahora, lo quiero por ser una gran figura de hermano mayor para mi y porque también es mi capitán–¡Bryce es un amargado y usa demasiada gomina en el pelo, y nos dejamos un dineral en champú pantene!Siempre me está regañado por meterme en líos, aunque sean cosas para nuestro propio beneficio, como cuando quise quitarle algunas cosas a Xavier y su equipo porque es el niño mimado de Padre, y Padre siempre lo consiente y no es justo, se lleva todo solo por ser el favorito, me da rabia

Si, básicamente les estaba contando mi vida en la academia Alius, conseguir el título de Géminis, el favoritismo de Padre hacia Xene por razones que desconocemos... Bueno, todo aquello, pero claramente camuflado para que nadie sospechase

—¡No puede ser!¿Ahora ese tal Xavier?¿Ese es el que definitivamente te gusta?¡Ya comparte Amity!Te pasas–de nuevo Sofía volvió a inventarse las cosas como le dió la gana
—¡N-no!¡Por supuesto que no me gusta ese imbécil!¡Es solo un estereotipo de chico guapo pelirrojo de ojos verde y niño mimado con un futuro asegurado, muy popular entre las chicas. Es un idiota, no lo aguanto–mis mejillas me traicionaron y se tiñeron de rojo. Mierda, ¿Por qué se ponían rojas?¡No me gusta maldita sea! Apunto estuve de darme dos buenas ostias en la cara para que dejasen de ponerse así
—¡Pero dijiste que es guapo!¡Y te pusiste roja!–exclamó Sofía
—¡No estoy roja!¡Es mi tono natural!–salté yo, era poco creíble pero la vida es difícil–¡B-bueno!Cambiemos de tema...¡Noelia!¿A ti te gusta ese tal Vegetta que han sacado del equipo no?
—B-bueno a ver, es muy lindo y mucho más amable de lo que parece... Y tras Aiden pues...–intentó decir ella. Te había tocado, ahora sufrías tú

Habría seguido preguntando de no ser porque Loa se levantó gritando y nos mandó a todos a callar y a dormir

—¡Son las dos de la mañana y hay que madrugar!¡Callaos y dejad dormir de una vez!–estalló, y después de su grito, apagamos rápidamente la luz, nos metimos en los sacos de dormir y todos a mimir