CAPÍTULO 7-Siempre esperar la siguiente mala noticia

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Tal vez me digan que no es gran cosa, pero déjenme hablarles de la soledad, siempre se ha sabido que los humanos somos una especie social.

Un defecto de fábrica, si me lo preguntan.

Dependemos de los vínculos para sobrevivir hasta las interacciones más básicas ayudan a mantenernos con vida, las estadísticas indican que el sentimiento subjetivo de soledad incrementa en un 20 por ciento en la muerte prematura.

Sí, parece que estoy redactando un libro de texto, es que así es, lástima que nadie se molestó en leerlo.

Y déjeme decirles, hay muchas formas de sentirse solo.

Era el primer día de clases para los de último año, un nuevo semestre daba a nuevas oportunidades, Einar agradecía que estuviera rodeado de idiotas y casi la mitad de su salón reprobara, repitiendo año, el encanto de las escuelas públicas.

Einar había tomado la iniciativa de tratar de cambiar la imagen que todos tenían de él y quisas tener un amigo, no conocía las primitivas reglas que debes seguir en la amistad, los miles de foros, libros, series de bajo presupuesto, no podían explicar cómo funciona la extraña amistad.

Pero había cinco básicos pasos que siempre se repetían, una buena aura, lo que sea que signifique, se supone que la impresión que des es lo que las personas tomarán en cuenta si eres un buen tipo o un idiota(saque estas porquerías de Twitter no me juzguen).

No sabría decir en qué grupo estaba Einar, quien ahora se miraba detenidamente en el espejo, supuso que la ropa también es algo importante.

Hay entra el punto número dos, una buena elección de colores en la vestimenta, hay estudios que dicen, los colores alegres son una buena forma de atraer personas. Con una camiseta marrón y una chaqueta de mezclilla, supongo que era lo suficientemente alegre, mi armario no reflejaba exactamente lo que las personas dirían alguien accesible.

O mentalmente estable, aunque quien lo está en estos días.

Sacudiendo con desespero su cabello rebelde, punto tres, un peinado que enmarcara bien tus facciones faciales, pero parecía que el cabello de Einar se reusaba a cambiar, suspirando de frustración, se dio por vencido, que todo lo demás de él cubriera este pequeño paso fallido.

Caminando hacia su puerta se giró un momento para contemplar su habitación y con un último suspiro tomo su mochila y salió de su habitación, en el camino se colocó sus audífonos cuando vio la puerta de la habitación de luz, de quien fue la magnífica idea de tener a luz justo enfrente de su habitación.

Bajando los escalones sintiéndose aliviado en el momento en que vio la luz prendida de la cocina, solo podía significar una cosa mama había llegado de su turno nocturno de la semana y sería la pequeña temporada en que habría un desayuno fresco esperando con tal vez una charla solo entre Einar y su mamá.

Pero sus esperanzas callaron como una piedra al ver el bolso de su madre y ella misma simplemente preparando sus cosas para volver a ir a trabajar.

-Lo siento, cariño, tengo doble turno y quieren que esté muy temprano hoy -Habló con prisa besando su mejilla antes de tomar su bolso y salir de casa, pero regresó de golpe para dar un último aviso- Cielo, despierta a tu hermana, si vuelve a llegar tarde tendrá detención por dos semanas-

Cuarto punto, un buen desayuno, algo que te satisface al comer.

Otro punto, el cual tendría que ignorar...

Solamente bastó esa oración final para ponerlo de mal humor y regresar a ser el viejo y original Einar Noceda, la simple mención de su hermana le había arruinado el día antes que iniciara, Pasándose una de sus manos por su cabello, trató de esquivar la orden de su madre.

TODO SE QUEDA- LA CASA BUHO (MALE CHARACTHER)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora