Capítulo 3: La sorpresa

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Lucía rompió el silencio con una carcajada. No podía creer que Martín le hubiera pedido salir de esa manera tan original y divertida. Se dio cuenta de que él estaba bromeando, pero también hablando en serio. Se dio cuenta de que ella quería salir con él, y mucho. Se dio cuenta de que no tenía nada que perder, y mucho que ganar.

- ¿Sabes qué? - dijo Lucía con una sonrisa - Me parece una idea genial. Vamos a salir juntos y a ver si somos compatibles según nuestro signo.

Martín respiró aliviado al escuchar la respuesta de Lucía. Se alegró de que ella se lo hubiera tomado con humor y con ganas. Se alegró de que ella hubiera aceptado, y mucho. Se alegró de haberse atrevido a pedirle salir, y mucho.

- ¿En serio? - dijo Martín con una sonrisa - Me parece una idea fantástica. Vamos a salir juntos y a ver si somos compatibles según nuestro signo.

Lucía y Martín se miraron con complicidad y emoción. Se sintieron felices y nerviosos por haber dado el primer paso hacia algo nuevo y desconocido. Se sintieron ansiosos y curiosos por saber qué les esperaba en su primera cita.

- ¿Y cuándo quieres que salgamos? - preguntó Lucía con ilusión.

- Pues... ¿qué te parece hoy mismo? - propuso Martín con decisión.

- ¿Hoy mismo? - repitió Lucía con sorpresa.

- Sí, hoy mismo - confirmó Martín con seguridad - Así no perdemos tiempo ni nos arrepentimos.

- Bueno, pues... me parece bien - aceptó Lucía con entusiasmo - Así no perdemos tiempo ni nos arrepentimos.

- Perfecto - dijo Martín con satisfacción - Entonces, ¿a qué hora te paso a buscar?

- Pues... ¿a las ocho? - sugirió Lucía con timidez.

- A las ocho está bien - dijo Martín con simpatía - Entonces, ¿dónde te paso a buscar?

- Pues... en mi casa - dijo Lucía con nerviosismo.

- En tu casa está bien - dijo Martín con amabilidad - Entonces, ¿cuál es tu dirección?

Lucía le dio su dirección a Martín, y él se la apuntó en su celular. Luego se despidieron con un beso en la mejilla y una promesa de verse pronto. Lucía se quedó en la cafetería, terminando su artículo y pensando en su cita. Martín se fue a su oficina, terminando sus casos y pensando en su cita.

Ambos se sentían emocionados y nerviosos por lo que iba a pasar esa noche. Ambos se preguntaban si iban a gustarse y a divertirse. Ambos se preguntaban si iban a ser compatibles según su signo.

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