Etapa 1: Negación.

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|⠀Universo Alternativo; Tails y Nine tiene 16
⠀como Sonic y el resto, Nine es un zorro
⠀común.



- ¡Se ven geniales juntos!

Amy chillo se emoción ante la noticia. Mofó sin que la vieran como niño chiquito cuando no le dan lo que quiere, con los brazos cruzados, escondido a espaldas de una pared pero que podía oir perfectamente todo.

- No tan alto Ames -Le dice Sonic- Aun no lo hacemos oficial.

- ¡Pero se ven tan lindos!

El (nuevo) compañero se veía algo incómodo, lo notabas con esa sonrisa a la hora de calmar a la chica:- No estoy acostumbrado a tanta atención, por eso apenas te lo décimos. -Le expresa Nine de forma amable- Pero aprecio el cumplido.

¿Tiene derecho de molestarse siquiera? No.

" Apenas llevan un par de meses conociéndose, no significaba nada. Esa relación era algo pasajero. "

Repetía Tails como un mantra en su mente.

Sonic conocío a Nine en una aventura y rápidamente lo integra al grupo. El kitsune estaba más que encantado de aprender lo que zorro común sabía, pues (consideraba que) tenía más talento con la tecnología del que él poseía. Admiraba muchísimo la habilidad de Nine con la maquinaría.

- ¿Como crees que Tails se lo tome? -Pregunto Amy- Puede que sea un cambio el hacer tanto juntos a que tu tener una relación estable.

Eran compañeros, al menos desde hace unos cuantos años, él estuvo primero que ese farsante. Sonic recapacitaria, se daría cuenta de que cometió un error y-

Oh...

Y fue cuando vio como tomaba su cintura que tomaba su cintura para apagarlo a él, que supo que no había más chance.

- Por favor, Tails es como mi hermano mayor -Responde- Tal vez este algo celoso, pero es porque quiere asegurarse de que Nine sea el indicado para mí.

Y fue cuando supo que no eran simples celos, sentía envidia de no ser él el que ocupe ese lugar. Estaba consciente de sus sentimientos, más no consideraba que pasaba de algo más que atracción física hasta ahora.

Lo quería muchísimo.

Nine lo miro escepticismo; no era experto en relaciones, pero conocía lo suficiente como para saber que interferir en una relación tan duradera como esa amistad era imprescindible, y sospechaba que el zorro de dos colas no la pasaría muy bien.

- Sonic... Deberías hablar con él primero. -Sugiere el más alto, tranquilamente.

Más Tails no pudo escuchar más. Comenzó a caminar hasta su cuarto, y cerrar la puerta con tanta fuerza que creyó que la paso al otro lado. Era el coraje acumulado que le gritara que rompiera todo a su alrededor, que aullara maldiciones y llorara todo lo que necesitara.

Reemplazado, por una "versión" mejorada de el mismo.

Tenía que admitirlo, Nine era un genio en toda la palabra; crear una tecnología tan sofisticada para controlar ocho garras metálicas sin necesidad de un dispositivo director al cerebro era tarea complicado y tan sorprendente que el mismo haya logrado ese objetivo.

Él en cambio, era un simple mecánico. (Desde su perspectiva) no ha hecho gran cosa.

Para ese momento, estaba teniendo un autocontrol increíble para no ir y reclamarle. Pero se fue cauando tomó una taza y lo estrelló contra la pared.

- ¡Se suponía que éramos los dos contra el mundo!

La situación etaba sacando lo peor de él. Lo vio cuando miro los trozos de cerámica en el suelo, y sintió las lágrimas humedecer sus mejillas.

Pensó en todo lo que habían pasado juntos. Paso por el momento exacto donde se dio cuenta que miraba al erizo con otros ojos; cuando insistía que debería buscar refugio en vez de ayudarlo, poniendo su vida en riesgo, solo estaba concentrado en sus ojos de verde brillante.

¿Los momento que ambos pasaron cerca de la muerte con contaban?

Negó con la cabeza y suspiro. Lo que hizo a continuación fue tomar una riñonera y un sudadera negra antes de salir por la ventana, no se tomó la molestia de recoger los trozos quebadros de la taza antes de irse.

- Hey Boddy! ¿Tienes tiempo?

Cuando Sonic llegó tocando la puerta, no hubo respuesta alguna.

Luego de insistir otra vez, abrió la puerta. No había nadie, la ventana estaba cerrada y la habitación intacta. Pero Sonic nota lo de la taza hecha pedazos, a lo que él suspira cuando entendió perfectamente lo que pasaba.

Más no esperaba que fuera tan grave. Lo podías ver en sus orejitas ligeramente caídas. A pesar de todo lo veía como un hermano y no podía evitar sentirse... Mál.

No debería, pero Tails es como su família.

- Supongo que te daré tu espacio...





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| hey, desconocides de Internet. otra historia de una crackship que amo.

ruegen pq no deje esta historia en hiatus indefinido. jiji gracias por tomarse la molestia de leer🌹

y si, así ví el cuartito de tails puberto.

las cinco etapas del rechazo · scourtailsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora