Blue Flames | Lando Norris+18

22- Sour diesel

16 de febrero de 2021

Maya
— Buenos días, le hablaba para contactar con Maya Javadd— dice la voz grave que habla cuando contestó a la llamada.

Aún con la habitación completamente a oscuras, e intentando enfocar la vista, hago mi mejor esfuerzo por contestar— Buenos días, está hablando usted con ella— digo— ¿Quién habla?—

— Encantado señorita Javadd, soy el organizador del desfile que se celebra hoy de Diesel y llamaba para asegurarme de que va a acudir hoy—

Joder, me había olvidado completamente del desfile.

— Claro, no se preocupe— contesto intentado parecer lo menos nerviosa y cantosa posible.

— Perfecto, que tenga un buen día. Nos vemos esta tarde— oigo como se despide el señor y, cuando copio su acción, termina la llamada.

Intenté levantarme rápido de la cama sin marearme para ir al baño e intentar arreglar mi cara. Después de hacer mis necesidades lavé mi rostro y dientes, saqué del armario una mascarilla facial y, otra para las ojeras. Coloqué ambas y las dejé actuar mientras que iba a desayunar algo sencillo.
Al cabo de quince minutos fui a retirar los tratamientos y enjuagué con agua bastante fría para terminar de despertarme y mejorar el resultado de mi piel. Volví a cepillarme los dientes y esta vez me dirigí al armario para elegir la ropa con la que iría. Debía ser algo cómodo pero no podía ir muy desarreglada tampoco.
Acabé optando por un clásico, un jean holgado y la parte de arriba más ceñida de color blanco.
Agregué accesorios y fui al establecimiento que me habían ordenado, era el sitio en el que tendría lugar el desfile.

Mientras esperaba a que el taxi me dejase en el sitio acordado miré mi teléfono, y me centré en una notificación.

El comentario de Lando.

Después de estar "desaparecido" por tanto tiempo ¿comentaba la foto de la nada?
Preferí no darle importancia y pensar que lo hacía para que los chicos no sospechasen mucho sobre el estado de nuestra amistad.

No iba a comerme la cabeza en un día tan importante por una tontería como esa.

Miles de personas corriendo de un lado a otro y que parecían tan decididos sobre su destino me abrumaron al llegar. ¿Qué hacía yo ahí? ¿En qué momento había llegado ahí?
Aún me parecía increíble la idea de estar a punto de desfilar para una marca tan importante, seguía sin creérmelo.

— ¿Maya, no?— noto a alguien tirar suavemente de mi hombro.

— Sí—

— Siéntate por aquí, enseguida aviso a las maquilladoras para que vengan a ayudarte— dijo el hombre con una sonrisa— La ropa que vas a tener que ponerte está aquí— señala una percha mientras habla— y ahí te puedes cambiar cuando terminen— señala un pequeño vestidor.

— Vale, muchas gracias— contesto lo más simpática que puedo sonar, y volviendo a enseñar una gran sonrisa.

Me seguía pareciendo irreal estar preparándome para desfilar por primera vez, y más para una marca tan importante como esta.

— Hola guapa— oigo a una mujer con dulce voz hablar detrás de mí, por lo que levanto la mirada y la veo reflejada en el espejo frente de mi.

Se trataba de la maquilladora, una mujer de unos cuarenta y largos años, con el pelo bien recogido y que portaba en su uniforme varias brochas.

— Soy Susana, pero me puedes decir Susi— sigue hablando con una mirada encantadora— Voy a ser tu maquilladora hoy, junto a Valentina.

— Encantada Susi, a mi me puedes llamar May— contesto mientras cruzo una pierna sobre la otra y sonrío.