♡ One-Shots {Bnha} ♡

Bakugō Katsuki

Título: Devuélvemelo, rey de los demonios
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Palabras: 1,8k
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Advertencia: AU Ángeles y demonios
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El cielo y el infierno, la luz y la oscuridad, los ángeles y los demonios... Es algo complicado de creer, pero dada la situación de _____, que fue convertida en ángel hace tan solo 1 mes, tras su trámite muerte al ser atravesada por una flecha muy afilada cuando trataba de proteger a uno de los niños de su pueblo.

No le importó mucho su muerte, puesto que pensaba que al menos ahora podría ver a sus dos amigos que habían fallecido hace ya 1 año y algunos meses. ¿La causa? Hubo una gran guerra entre dos pueblos, uno era el de estos tres y el otro el pueblo vecino. Tal fue la pelea que al defender su hogar y por supuesto a su querida amiga, ambos terminaron cayendo al suelo tras ser atravesados por las terribles y puntiagudas espadas sin importarle a los soldados enemigos lo muy jóvenes que estos eran.

______ quedó destrozada cuando los vio yaciendo en la hierba rodeados del líquido carmesí que había desprendido sus cuerpos hace apenas unos minutos.

Tomó el pulso de uno de ellos inútilmente pues su corazón había dejado de latir. Ese dia perdió a sus dos mejores amigos; Bakugō Katsuki y Midoriya Izuku.

Cuando se convirtió en un ángel por las buenas acciones que realizó, obtuvo un sobrenombre al ahora ser "el ángel de la bondad y resurrección". Sin embargo la tristeza seguía muy presente dentro de ella al no encontrarse con las únicas personas que ansiaba ver.

Al cabo de un tiempo ______ descubrió que Izuku había sido enviado al infierno por razones que ella desconocía. Por esa razón decidió hacerle una visita al rey de los demonios y pedirle como fuera que le devolviera al peli verde y que lo dejara regresar al cielo junto a ella.

Allí se hallaba, frente a la puerta que la llevaría al trono donde se situaba su mayor obstáculo en esos momentos. Un pequeño temor a que rechazara su propuesta hizo que sus nervios subieran a flote, haciéndola temblar sutilmente. Sin embargo eso no le impidió empujar la gran puerta y adentrase al gran salón con determinación.

El lugar era simple, devorado con múltiples candelabros que daban la luminosidad suficiente para que unos ojos carmesíes se clavaran en ella con total interés. Aunque ella aún no se había percatado de ese pequeño detalle al estar admirando el definido tamaño de la habitación sin haber detenido sus pasos por la larga alfombra roja.

Al llegar frente a Bakugō, mejor dicho, frente al rey, se sorprendió mucho al reconocerlo, preguntándose como había ocurrido eso.

El rubio ceniza le dedicó una mirada curiosa acompañada de una orgullosa sonrisa, pues sabía que terminaría acudiendo a él, aunque pensó que se retrasaría un poco ese día.

Por otro lado, la chica tuvo un fuerte pensamiento de darle un abrazo por el tiempo pasado sin poder verse al haber dado su vida por protegerla. Más consiguió contenerse quedándose estática y a su vez sosteniendo la mirada de este.

-¿K-Katsuki?.-Logró pronunciar finalmente haciendo que Bakugou sonriera con orgullo. La chica que tanto amó en si vida pasada siendo humano lo recordaba con exactitud.

-Bienvenida a mi condenado infierno ______.- Saludó con brevedad.- ¿Qué quiere un ángel del rey del inframundo?

-Verás...Me han dado la información de que Izuku fue enviado aquí y me gustaría mucho recuperarlo. Quisiera que volviera conmigo al cielo.- Dijo directa y con sinceridad, no mentiría ni le daría vueltas al asunto, Katsuki la conocía demasiado bien para tratar de engañarlo.

Sin duda no se equivocaba, el rubio la miraba intensamente con esos ojos rubí que ella tanto había extrañado en el pasado. Aunque había un pequeño problema... Bakugō no le entregaría a su amigo así sin más, ¿Total para qué? ¿Para que después no vuelva a verla nunca más? ¿Para luego abandonarlo?. No iba a permitir tal cosa, por supuesto que no.