Capitulo 13

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La verdad? Que bueno que traía lentes ya que mi rostro al descubierto de verdad que debio ser todo un poema

-¡¡QUE!!- grite dando un paso hacia atrás

-que tengas sexo conmigo, porque conformarte con cualquiera si me puedes tener a mi, se que me deseas-

en serio que esta chica si que tenía una gran autoestima

-escucha... Yo nunca voy a desearte- hable firme

-Claro que si... Todo el mundo me desea... Osea mírame... Soy perfecta y eso nadie lo contradice...-

-de verdad quisiera saber quien fue el desgraciado que te dijo que tu eras perfecta... Tu no tienes nada de perfecta... Te acuestas con cualquiera, tuviste una enfermedad de transmisión sexual y para el colmo eres una maldita perra-

Sinceramente me di una auto palmada en la espalda cuando todo eso salió de mi... Christopher no tenía ningún filtro

Esmeralda se enojo y levanto su mano y me iba a golpear pero agarre su brazo antes de que me tocara

-no te atrevas a tocarme!- grite tomando su brazo con fuerza

-sueltame maldito loco de mierda!-

-escuchame bien Esmeralda... No te acerques a mi con ningún tipo de intención, no me agradas y nunca lo harás-

dicho eso solte su brazo y segui caminando, no me gustaba pelear pero alguien necesitaba ponerla en su lugar

-maldito loco! Vas a pagarmelas!- grito con su voz chillona por lo enojada que estaba no le tome importacia y seguí caminando, luego de subir de nuevo me meti a mi habitación, me quedé mirando un punto fijo en la habitación, camine hacia el baño y me rescarque en el pequeño tocador que había y me mira al espejo, algo me pasaba sentia algo extraño y como si fuera una broma un vaso que estaba en la mesilla de noche de mi cama cayó al suelo rompiendose al instante, camine hacia el y comencé a recoger cada pedazo de cristal que había, al terminar me levante y me mire una vez más en el espejo, pero esta vez en el que estaba en la habitación y justo cuando iba a tirar los pedazos de cristal del vaso vi una persona pasar por la puerta que iba al baño, rápidamente me encamine e intente buscar a la persona que según yo había visto, tal vez solo querían jugarme una broma y yo de tonta había caido como si nada; ho eso creí cuando seguí buscando a alguno de los chicos y no encontré a nadie, sentía que algo andaba muy mal... Mi cabeza comenzó a dar vueltas junto con toda la habitación... Mis piernas se sintieron débiles y caí al suelo con fuerza, mi vista comenzaba a nublarse y lo último que mire fue a un chico correr hacia mi.

...

El latido de mi corazón rezonaba con fuerza en mis oídos... Donde diablos estaba y porque estaba aqui

-ha pasado mucho tiempo Emily- trague duro al reconocer aquella voz tan familiar que no había escuchado en un tiempo, tome fuerza en mi manos y logre ponerme de pie para buscar el lugar de donde provenía aquella voz... Todo era muy blanco y no lograba reconocer absolutamente nada

-Rider...- susurre, mire hacia todas las direcciones posibles

-Rider... Si estas aquí por favor dejame verte... Yo necesito saber que estas bien... Que tu... -

-Emily- la voz volvió a llamarme pero esta vez al girarme logre ver lo imposible, Rider estaba parado frente a mi y apenas me vio sonrió... Iba a correr hacia el pero sentí un escalofrío y eso me hizo correr mas rápido hacia el... Sentía que corría demaciado y no me acercaba para nada y eso para mi era frustrante... Pronto me di cuenta que no iba a lograr alcanzarlo nunca ya que su imagen cada vez se hacía más y más borrosa.

Te Amo Hoy Mañana y Siempre (en Edición) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora