If you jump, I jump

Capítulo 1

Todo se veía maravilloso, las velas en los candelabros eran encendidas poco a poco, las copas estaban brillantes y apiladas perfectamente y los músicos organizando sus instrumentos. Mi esfuerzo valió la pena, los invitados y nuestros huéspedes especiales quedarán fascinados con todo esto; el baile de hoy será uno de los más importantes de la temporada de 1870 en Inglaterra y como no, cuando la princesa no heredera la organiza.

Según Madre recibiremos a sus amigos de Italia, ellos se quedarán con nosotros durante casi un año; mencionaron algo de la renovación de un castillo y cuando supe de la noticia sabía que debía organizar algo magnífico para ellos, hace mucho mis padres no los ven y sería una agradable sorpresa un recibimiento así.

–Todo está casi listo, princesa – Asentí y agradecí a todos el esfuerzo realizado, éramos un muy buen equipo y sin ellos no pudiera hacer semejantes bailes.

Faltaban unas dos horas antes de que llegaran los invitados y tenía el tiempo perfecto para arreglarme. Me encaminé hacia mi habitación para tomar un baño relajante y proseguir a la producción de mi atuendo, en la cama yacía un vestido del más bello azul con detalles con perlas y bordados, ellos serían acompañados de mis perlas favoritas y mis zapatos de tacón a juego con el vestido, los últimos detalles arreglando mis ondas de mi larga cabellera rubia y estaba lista para el baile.

Mi hermana Victoria heredera al trono de Inglaterra lucía despampanante, su vestido rojo era una maravilla y qué decir de mis padres, ellos lucían tan maravillosamente con sus trajes más nuevos y con colores blancos a juego. Como era la segunda al trono yo entraba al final, no me molestaba, yo desde pequeña entendí que mi lugar no es en lo político ni en gobernar, mi lugar era en las artes, siempre lo fue y me alegro de que Victoria será la heredera.

Después de entrar decidí que era mejor separarme de mi familia un poco, ellos pasarían a la fase dos de mi lista, saludar literalmente a cada una de las personas ahí. Observaba todo a mi alrededor admirando mi trabajo y viendo cómo la gente lo disfrutaba, algo llamó mi atención, tres hombres entraban al salón eran muy intimidantes y algo pálidos, imaginé que eran los amigos de mis padres que raro, creí que iban a ser cuatro de ellos, mi hermana mencionó algo sobre que vivían en una zona algo nublada y que eran sensibles a la luz del sol por un tipo de condición después me encargaría de arreglar su itinerario de visita de acuerdo a como se sientan más cómodos.

Vi que mi padre me llamaba con la mirada queriendo que me acercara con ellos, tomé un bocado de aire y me acerqué lentamente, tenía curiosidad de saber de ellos, pero al mismo tiempo me ponía nerviosa al acercarme a tales intimidantes hombres. Entre más me acercaba, mejor podía verlos; dos de ellos con colores claros y uno con un traje color marrón. Cuando llegue mi padre me sonrió y comenzó a presentarlos.

– Mis queridos amigos les presento a mi hija menor, la princesa Aurora, Aurora, ellos son los hermanos Vulturi, en el medio Aro a su derecha Marcus y a la izquierda de Aro, Caius. Debo presumir que mi hija organizó este baile de bienvenida para ustedes, cuando supe que vendrían le dije que organizara todo para ustedes. Lo lamento, tengo que ir con el primer ministro, Aurora, has que nuestros invitados se sientan bienvenidos. Me retiro.– Se retiró mi padre y me quedé con los tres pálidos hombres.

– Mi más cordial bienvenida, como menciono mi padre, soy Aurora y me encargaré durante su esencia de que la disfruten lo más que puedan. – Hice una reverencia y junté mis manos.

– Pero qué maravilla de princesa, mi querida Aurora, me presento, soy Aro, no sabes lo mucho que tu padre nos ha contado de ti, todo bueno, no te asustes, nos alegra que seas tú las que nos brindará una agradable estancia. Quiero hablar por mis hermanos y yo que este baile es el más exquisito que hemos visto en años querida mía, nuestras más sinceras felicitaciones.--

–Oh, si Aro tiene razón querida, tu organización es verdaderamente maravillosa, me presento soy Caius. – Hizo una reverencia y tomó mi mano para plantarle un frío beso.

– Me complace saber que disfrutan del baile, suelo ponerle mucho empeño a este tipo de cosas, he de decir que soy fanática de la organización en general, ya sea de bailes o fiestas de té e incluso de itinerarios para nuestros huéspedes, hablado de huéspedes corríjanme si me equivoco, pero me informaron que serían cuatro. ¿Estoy en lo correcto?-- Pregunte con curiosidad si hay algo que me disgusta son los malentendidos y si llegan a cambiar el plan no podré dormir por reorganizar todo de nuevo.

–Debe disculparnos su alteza, no hay ningún mal entendido, si hay cuatro de nosotros.– Comenzó Aro.– Pero en este momento no sabría decir dónde está nuestro último invitado, quizá Marcus y Caius podrían ir a buscarlo.

– Eso no será necesario Aro.– Habló alguien llegando al lado de Caius. Era un hombre rubio, alto y con un porte audaz. Nunca había visto a alguien tan hermoso en mi vida. Llevaba un traje color azul rey que sin intenciones se parece al mío. Cuando levanté mi mirada, sus ojos ya estaban en mí. Sus ojos, sus ojos eran de un color dorado ¿Acaso eso era posible? No me importó en ese momento, lo único que pensaba era en que no quería sacarlo de mi vista. Pasaron segundos cuando él, sin separar su mirada, se presentó.

– Soy Carlisle Cullen, su alteza, lamento la demora, pero el mesero tuvo dificultades con las bebidas.-- A diferencia de Caius, tomo mis dos manos y las beso. Cuando sus fríos labios besaron mis manos, quise temblar, mi corazón dió un giro y si fuera posible, mil mariposas volarían alrededor de nosotros en ese momento.

– Lo bueno es que ya has llegado Carlisle, la bella Aurora nos estaba contando de su amor por la organización.-- Dijo Marcus.- Porque no nos cuentas más acerca de eso querida Aurora. – Juro, que en ese momento no podía hablar, estaba tan hechizada viendo al de ojos dorados que simplemente no salían las palabras de mi boca.

–Y-yo, sí, lo lamento deben disculparme, pero no me siento muy bien, debería ir por un vaso de agua o por aire fresco, los veo más tarde, mis más sinceras disculpas.-- Sin esperar respuesta, salió rápidamente de ahí, casi corrí al jardín. Necesitaba aire, parecía que él me lo había robado todo con solo una mirada, mi cuerpo se sentía diferente, parecía un sueño.

En mi vida había conocido a muchos hombres, algunos agradables y otros no tanto, no eran feos, pero con Carlisle, con él sentí que me iba a desmayar, su mirada en mí me hacía alucinar, no sé qué me pasa, lo conocí hace nada, pero fue diferente, algo en mí lo sabe, él es diferente. Cuando estaba por regresar un ruido me hizo voltear. Era él.