❝ DOS ❞

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Las clases de japonés de Amelia progresaban a paso apresurado, ella estaba ansiosa por poder hablar con normalidad con sus amigos, en general es una muchacha parlanchina pero las barreras que representaban el diferente idioma la volvían una chica ...

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Las clases de japonés de Amelia progresaban a paso apresurado, ella estaba ansiosa por poder hablar con normalidad con sus amigos, en general es una muchacha parlanchina pero las barreras que representaban el diferente idioma la volvían una chica taciturna, sin poder hablar mucho. Podían comunicarse mediante mimicas y ciertas palabras en inglés que los tres entendían, pero no era suficiente, así que se esmeró lo más que pudo en poder aprender japonés, aún que fuera lo básico.

Ya habían pasado varios meses desde que llegaron a Japón, varios meses desde que se hizo amiga de Izuku y Kacchan, aún la educaban en casa, no sabía suficiente japonés como para poder ir a una escuela por si sola. Su amigo Izuku le había comentado lo preocupado que estaba, porque ya había cumplido cinco años y aún no manifestaba una particularidad, Amelia entendía que aquello era la razón de porque Kacchan insistía en molestarlo tanto, y no le gustaba.

Sin embargo, daba igual que idioma hablara, cuando se trataba de Kacchan este simplemente no la escuchaba.

━━ ¡Ya suéltame, duende verde! ━━ Exclamó el rubio sacudiendo su mano esperando a que la pelirroja ceda y suelte su mano, ella no entendía lo que el decía, pero sabía que se estaba quejando.

El insistía en usar su explosiones para quemar y asustar a Izuku, para presumirle su particularidad, a Amelia no le gustó, pero Kacchan también era su amigo y golpearlo no era una opción. Entonces tomó su mano, único lugar de donde salían sus explosiones y decidió no soltarla. Por más explosiones que el hiciera, aún si le hacía daño, Amelia no lo soltaría, porque ella no le permitiría asustar a sus amigos.

━━ ¡No voy a pasear de la mano contigo, loca! ━━ Continuaba zarandeando,  Amelia solo apretaba más, no quería dañarlo pero tampoco quería soltarlo. Ciertamente Kacchan no entendía el propósito de sus acciones.

Izuku por otro lado, al jugar mayormente el papel de espectador, tenía una perspectiva distinta y pudo entender casi inmediatamente el porqué de las acciones de Amelia, lo supo porque notó el patrón, Kacchan usaba sus explosiones para molestarlo y Amelia corría a entrelazar sus dedos y no soltarlo neutralizado así la amenaza de las explosiones, le parecía genial que ella se esforzará en cuidarlo, aún que le avergonzaba un poco.

La Dualidad Del Hereje ━━ BNHADonde viven las historias. Descúbrelo ahora