Mi Destino Eras Tú (Jenlisa G..p)

Sus ojos

Seúl 16 de enero,el clima seco y frio de la mañana creaba una atmósfera melancólica, pero  a ella no parecía afectarle. Después de todo,llevaba en aquel lugar desde los 6 años, cuando sus padres, con falsas promesas,le aseguraron  que volverían  por la tarde,diciéndole que era un bonito lugar para jugar.

Había pasado bastante tiempo desde entonces.Evitaba cerrar los ojos y recordarlos,porque con esos recuerdos llegaba un dolor inmenso,acompañado de un resentimiento que la consumia.
Al principio pensaba que tal vez algo les habia sucedido,pero con el tiempo  comprendió que la habian abandonado.

Lisa tenia casi 11,era una niña  delgada,alta para su edad, con el cabello rubio y unos grandes y preciosos ojos color miel que constrastaban con la seriedad de su rostro.Su  sonrisa,aunque hermosa,apenas se dejaba ver,y su voz,aún menos.Las pocas veces que se atrevia a hablar,solo recibia burlas y,en ocasiones,golpes de sus compañeros de cuarto.Por eso encontró su mejor refugio  en los libros,que,aunque escasos,se convirtieron en su mundo desde que aprendió a leer unos años atrás.

Se sentó en la entrada, debajo de su árbol favorito del orfanato llamado London House for Childrens y dispuesta a leer una historieta vieja.Los libros  de la biblioteca ya los habia leído todos por decirlo asi,excepto  los que las hermanas le decían que no eran para su edad.

De pronto empezó a escuchar movimientos en la entrada y se sobresaltó,aquel lugar no recibía ni realizaba eventos, generalmente solo llegaban en cheques o donaciones muy ocasionalmente.Claramente esta era una excepción.
En un segundo vio como las madres y sus compañeros se formaban en la entrada mientras ella solo atinó a hacer lo mismo.La gran puerta del orfanato se abrió.

La moderna Land Rover color negra y  lunas polarizadas dio aviso del ingreso al lujoso Mercedes Benz del año que traía consigo aún sin saberlo, el destino marcado para dos hermosas adolescentes.

La familia kim en pleno bajaba del lujoso auto.
El señor , la señora Kim y sus dos hermosas hijas Hiunji de 15  y Jennie de 12 o mejor dicho 13 años,porque sí,ese habia sido el inicio de su cumpleaños número 13 organizado por su padre y con un gran mensaje.

Jennie:" es momento de que empieces a ver que todo en esta vida no solo es hacer dinero sino también agradecer el porque lo tenemos y en abundancia"- AYUDANDO-
Y asi fue como llegó a aquel lugar.

- Papá exclamó Hiunji mirándolo a través de sus exclusivas gafas de sol..¿Es necesario venir a este sucio y horrible lugar?,no pudiste solo traer a Jennifer...que hago yo acá?

-Silencio! exclamó Eun Kim, señalando el ingreso al jardin de  las hermanas.
Los saludos y la emoción reinaba en los adultos por otro lado los niños corrían a abrazar a la señora Kim aún sin conocerla,que mas daba era una persona nueva,de las que nunca solian pasar por ahi y ella los recibía amorosamente.

Hiunji por su parte solo atinó a quedarse en el auto frunciendo el ceño y sacándole la lengua a cuanto niño trataba de acercarse.

Los guardespaldas de los Kim empezaron a bajar muchas cajas,bolsas conteniendo juguetes y donaciones.

No muy lejos de ahi Lisa permaneció en su mismo lugar,mirándose las zapatillas algo viejas y sucias,pero era lo único que tenia para usar.

Estaba a punto de marcharse cuando,por primera vez,una voz la detuvo.Sin pevio aviso,una chica morena apareció a su lado,casi frente a ella,y le dijo - ¿No te acercas? - ¿No te gustaría un obsequio? mira, hay muchos- , añadió señalando despreocupadamente hacia la camioneta.Lisa permaneció en silencio.-Hola -,insistió la mayor,con una sonrisa amable,me llamo Jennie...extendiendo  su mano. Pero su gesto se quedó en el aire.La niña, con la cabeza gacha,apretaba nerviosamente  los bordes de sus pantalones y, con la punta del pie , jugueteaba con una rama seca del jardin.

Esa indiferencia inesperada despertó la curiosidad de Jennie. Porque ella a sus 12 ,perdón 13 años ya empezaba a hacerse notar con cualquiera a su alrededor,sobre todo  los amigos y amigas de su hermana.

Llevaba un hermoso vestido color crema,delicadamente adornado  con un lazo negro que ceñia su cintura y unos zapatos  de diseñador que hablaban de un mundo distante.Frente a ella ,en marcado contraste,se encontraba esa niña desgarbada ,con  zapatillas de lona gastadas,jeans rasgados y un polo  que apenas le cubria del frio,aunque Jennie no estaba segura  si era el frio lo que la hacia temblar o el miedo que su presencia le provocaba. Giró la cabeza, barriendo el espacio con la mirada,y al comprobar que estaban solas,tomó una decisión que hasta entonces le habia parecido insignificante,pero que ahora cargaba de significado.Con suavidad le levantó el rostro tomando su barbilla entre los dedos y,con seguridad,repitió : -Hola me llamo Jennie  y yo...-  pero sus palabras quedaron atrapadas en su garganta cuando  los ojos color miel de Lisa se  clavaron  en los suyos.Fue como si todo el aire asu alrededor se hubiera detenido,como si algo en su pecho,hasta entonces inexplorado,se encogiera.Bajó la mirada,recorriendo la pequeña nariz,los labios suaves y carnosos,las mejillas ligeramente sonrojadas. era realmente adorable la forma en que aquellos ojos, grandes y  tristes ,la observaban de una manera que nunca habia conocido.Por un instante,quiso decirle lo hermosa  que era, pero se detuvo,esbozando una leve sonrisa,recordando quien era.  Jennie Kim, la que siempre recibía los elogios,la que con apenas trece años,ya habia aprendido a romper corazones con la misma facilidad con que sonreía o daba la espalda. 

Jennie no entendía qué la estaba invadiendo, esa mezcla de curiosidad y nerviosismo que le provocaba aquella niña.Era hemosa de una manera extraña,desgarbada, sí,pero habia algo en su timidez que la inquietaba.Mas alta que ella,pero tan retraida que parecia encogerse con cada paso.Y mientras Jennie se sumergía en sus propios pensamientos.Lisa aprovechó ese breve momento de distracción.- -¿Qué estaría pasando por la cabeza de aquella morena de ojos oscuros? Seguramente el mismo asco que todos sentían al mirarla.Con ese pensamiento rondando su mente,Lisa se zafó del leve contacto,retrocedió un par de pasos y,sin mirar atrás,se alejó apresuradamente.Jennie no alcanzó a escuchar su voz;solo observó como se desvanecia entre las sombras del jardin trasero del orfanato.Estuvo a punto de seguirla,pero la voz de su padre la llamó,obligándola a entrar.Qué comienzo mas peculiar para su cumpleaños.

En el recorrido de regreso a su mansión los padres Kim compartían miradas de satisfacción,recordando a uno que otro niño curioso del orfanato y los felices que se veían con los obsequios y donaciones.

Se prometieron regresar mientras Hiunji solo fruncia el ceño y jugaba en su celular.En el asiento trasero  una castaña perdida en sus pensamientos observaba el paisaje,pero lo único que estaba en su mente eran esos ojos color miel que no lograba apartar de su memoria.Su corazón latia de manera extraña,a trompicones,como si se resistiera a seguir el ritmo habitual.Se sentia rara,fuera de lugar.Ni siquiera habia ecuchado un "hola.Una pequeña risa escapó de sus labios,casi sin darse cuenta - ¿Qué te pasa?- pensó,tratando de recomponerse-Eres una Kim. No puedes permitirte esto.Eres la  heredera de un imperio,perteneces a una de las familias mas ricas del país,una niña no puede confundirte ni hacerte sentir cosas-.Y asi ,se pasó el resto del viaje,escuchando las quejas de su hermana y la risa de sus padres.Sin embargo,en lo más profundo de su ser,  aún no se daba cuenta de la gran mentira que acababa de decirse.