04
–Tú puedes hacerlo Jeon. –Se susurró a él mismo.
Había pasado alrededor de una semana del accidente. Jungkook luego de unos días de recuperación regresó a la escuela, la campana sonó, anunciando el inicio del almuerzo. Una ola de estudiantes saliendo de sus clases llenó el pasillo de la escuela, Jeon se encontraba caminando hacia la cafetería entre la multitud de estudiantes. Pronto llegó a su destino, buscando a la chica de la foto que le mostró Addison aquel día.
–Debe estar por aquí. –Caminó por las mesas, en busca de esa chica. Unos minutos después pudo visualizar en una de las mesas a la chica, sonrió y se acercó a ella, sentándose a su lado–. Hey, hola.
La chica se giró para ver a la persona que había hablado. Su cabello era negro, el cual terminaba hasta la altura de su pecho, sus ojos eran cafés, y su piel tan blanca como la nieve. Fácilmente, podrías deducir que cuidaba muy bien su piel.
–Oh, hola, tú debes ser Jungkook. –Sonrió mirando al castaño.
–Sí, soy yo, ¿Cómo lo sabes?
–Addison me contó sobre ti. Por cierto, soy Roseanne Park, pero dime Rosé. –Extendió su mano hacia él.
–Lindo nombre. –Sonrió estrechando su mano–. Jeon Jungkook, un gusto conocerte.
–El gusto es mío. –Alejó su mano. Su atención se desvió a la pequeña cámara que Jeon llevaba en su bolsillo–. Addison me dijo que te gusta hacer expediciones.
–Ah, bueno, es ci-
Fue interrumpido gracias a las risas que se acercaban a su mesa. Era nada más y nada menos que Jimin y Taehyung, el dúo más problemático de la escuela. Estos dos chicos eran conocidos por sus ingeniosas bromas, al igual que ser los típicos rebeldes. Todos unos personajes sacados de una película.
–Vaya, vaya, mira que tenemos aquí. –Dijo Jimin con una sonrisa mientras colocaba sus manos sobre la mesa, mirando a Jungkook y Rosé.
–¿Qué haces con ella? Rarito. –Taehyung miró al castaño de pies a cabeza, como si estuviera analizando al joven.
–¿Rarito? –Susurró, mirando a los dos chicos. Rosé colocó una mano sobre su brazo para hacerle entender que ella se encargaba de la situación.
–¿Qué crees que haces, Park? –Miró a Jimin–. Déjanos en paz.
–¡¿Dejarlos?! –Exclamó como si la chica hubiese dicho la peor cosa del mundo–. No dejaré a mi prima sentarse con este tipo de personas. –Miró de nuevo a Jungkook.
–Jungkook no es ningún "rarito".
–¿Ah, no? –Se cruzó de brazos sin apartar la mirada de ella–. Se cree cazador de fantasmas y sube vídeos a YouTube.
–Que por cierto, tienen 30 vistas. –Recalcó Kim, ganándose una mirada por parte de Jeon.
–Bueno, al menos no hago el idiota por la escuela.
–Por favor, rarito. –Se inclinó en la mesa para mirar fijamente a Jungkook–. No te compares con nosotros.
–Ya basta, Jimin, no es necesario empezar una discusión por esto. –Se levantó del banco–. Si quieres arruinarle el día a alguien hazlo con otra persona. –Tomó el brazo de Jeon.
–Espera, espera. –Colocó su mano encima de la de Rosé, haciendo que soltara el brazo del castaño–. Está bien, nos disculpamos.
Rosé levantó una ceja, esperando a que Jimin y su mejor amigo se disculpen con Jeon. Ambos chicos suspiraron para luego sentarse frente a ellos.
–Lo siento por haberte dicho tus verdades.
–Ahg. –Rodeó los ojos.
–¡Bien! Lo siento por haber sido unos tontos contigo. –Miró a su prima y soltó otro pesado suspiro.
–Dejando de lado esta ridícula situación, ¿Has ido a lugares abandonados? O es pantalla verde.
–¡No es pantalla verde! –Se cruzó de brazos, ofendido–. He visitado muchos lugares abandonados para grabar los vídeos.
–Amigo, puede que ahora la gente sea tan estúpida para creer vídeos falsos. Pero el camino fácil siempre se termina rápido.
–Jimin tiene razón, la gente en internet quiere ver algo real y no contenido basura.
–La idea de hacer investigaciones a lugares abandonados no es mala, pero te enfocas demasiado en crear algo paranormal falso que te olvidas de las otras posibilidades. Una investigación no debe tener de ley algún fantasma o algo así.
–Entonces, lo que están sugiriendo, ¿Es que haga exploraciones? –Miró a los dos chicos.
–¡Así es! Conocemos un hotel abandonado. Te podemos llevar y ahí grabas un vídeo, podemos encontrar cosas muy locas.
–¿Estarían dispuestos a ir conmigo? –Preguntó sorprendido. No esperaba que estos dos tipos le sugirieran algo así, mucho menos que quisieran acompañarlo.
–Por supuesto, será divertido.
–¿Te unes a nosotros? –Miró a la chica de cabello negro.
–Seguro, suena genial. –Sonrió y miró a los tres chicos.
Jungkook sonrió ante la idea de ir a un hotel abandonado. Esta era su oportunidad de hacer nuevos amigos, ya no tendría que obligar a Yoongi a ir con él, estos chicos se veían tan interesados en este tipo de cosas como él. No pasó mucho tiempo para que la emoción se apoderara de su cuerpo, no podría estar más feliz ahora.
–¡Genial! Podemos encontrarnos en la cafetería que está cerca de la escuela.
–¿Hablas del Kim Coffee? –Miró al castaño–. Ahí trabaja el novio de Addison y sus amigos.
–¿Conoces a Jin?
–Claro que lo conozco. Addison es la mejor amiga de mi hermana, ¿Tú de donde conoces a Jin?
–Bueno, hace no mucho tuve un accidente de auto. –Rascó su nuca–. Mi hermano y yo chocamos contra la cafetería de Jin y él me llevó al hospital.
–Oh, por Dios, ¿Ahora estás bien?
–Lo estoy, no te preocupes. –Le sonrió.
–Bien chicos, entonces, ¿Nos vemos en la cafetería después de la escuela? –Los miró a los tres.
–Así es, pasaremos un buen rato juntos.
Los chicos pasaron todo el almuerzo hablando sobre ellos para conocerse mejor. No fue problema para Jeon adaptarse y acostumbrarse a estos chicos muy rápido, no podía esperar para salir con ellos. Sería la primera vez que hacía algo así sin Yoongi.
ESTÁS LEYENDO
DDT [Detrás Del Tablero]
NezařaditelnéFuiste atado a una maldición que no pediste, fuiste condenado toda tu vida a sufrir. Los secretos cuestan, y este, costó tu alma.