Un Dulce Sabor ❥ chanbaek

Capítulo 1

Baekhyun recordó aquel día.

Día de tormenta y lluvia, corría un fuerte viento y las nubes de a poco iban tornándose de color gris apuntando a que se acercaba un clima de lo más bochornoso. A pesar de todo no existía ni una posibilidad ni causa que pudiera impedir a Byun Baekhyun de salir por la noche para iniciar su cacería habitual. Ya era costumbre así que eventualmente no le importaría en lo absoluto cualquier acontecimiento que fuera a impedir su llegada a cualquier bar gay, club nocturno o discoteca.

Todos esos sitios frecuentaba cada día de la semana y el año entero si quería para ir buscando a esa persona que pudiera darle la satisfacción que anhelaba. Claro está que no todas las veces salía victorioso de esos encuentros porque a cualquier víctima podía surgirle un asunto importante y de la nada se iban, pero cuando no ocurría nada de eso todo podía marchar a la perfección. Ya parecía que hasta tenía una receta de "Cómo comer deliciosamente a los humanos, paso a paso".

Al principio tiraba para ambos bandos pero luego se dió cuenta de que su labia no iba con las mujeres, si no que con los hombres así que prefirió elegirlos a ellos como el género predeterminado para disfrutar de sus noches de placer. Le resultaban amables y de buen carácter las chicas que conoció al inicio de su cautivante búsqueda pero llegó un momento en el que ya se le hizo muy monótono, así que optó por cambiar el prototipo.

Baekhyun llevaba tanto tiempo sin un rumbo perfecto el cual seguir que no tuvo más opción que convertirse en el perfecto vampiro que le fascinaba el sexo, la lujuria, la bebida y un poco del romanticismo pero del agresivo. Para ser alguien de la especie con casi 100 años ya le bastaba con comportarse de esa manera además de no tener a nadie que pudiera evitarlo. Simplemente era él sólo por la vida sin padres, hermanos, tíos ni pareja. No había ningún lazo sentimental por ningún lado.

De pronto sentado con un vaso de whisky en mano recordó una de las primeras veces que intentó probar la sangre y cuerpo de un chico. Su nombre era casi inolvidable; Kim JongIn de 23 años. Adulto joven, cabello castaño oscuro, ojos de miel bastante bellos, alto y de una musculatura perfecta que resultaba del gusto de Baekhyun. También si se ponía a recordar con más detalle a fondo, sus muslos de bailarín llamaban bastante la atención siendo tapados por esos jeans rasgados que llevaba aquel día que se conocieron. Baekhyun había ido a un bar gay a eso de las 11:00 de la noche estando lleno y con personas por doquier bailando en la pista, charlando y bebiendo. Observó detenidamente el paisaje y por el momento veía que todo estaba normal. Aún no lograba conectar con nadie de los sujetos que estaban allí estaba que le llamó la atención ese chico, Jongin que estaba sentado en la hilera de taburetes frente al bar tomando en completa soledad. Baekhyun pudo deducir al instante que no hablaba con nadie porque probablemente era su primera vez en un sitio así y porque además se veía bastante joven, ¿Quizás había encontrado el premio que tanto buscaba?

Necesitaba acercarse más para saberlo.

A ese chico de cabello castaño y ojos melosos le faltaba un poco más de valor y confianza en sí mismo si quería llegar con alguien esa noche. No tenía ni la menor idea de que ya estaba siendo observado por otro sujeto de cabellera negra (en ese entonces) Baekhyun tenía aquel look. Mientras la música de alto volúmen resonaba por las paredes del bar esperó el segundo exacto en el que Jongin se volteó en el asiento y quedó mirando hacia el frente.

Veía como bailaban esos hombres tan apegados, rodeandose con los brazos y dándose miradas cautivantes. Él también esperaba conseguir un poco de eso en el momento pero no encontraba la forma, era de personalidad tímida y no se le hacía fácil entablar conversación. Pegó el último sorbo de su trago pensando en rendirse por esa ocasión hasta que... sus ojos recaen en Baekhyun quien lo estaba mirando directamente, apoyado en su mano con unos ojos tan bonitos lo estaba viendo a ¿Él? Jongin no quería creer pero quizás sí.