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Para cuando Junhui logra divisar la delgada figura de Xú Minghao entre la gente, siente que se paraliza, que el mundo deja de girar y los únicos que pueden moverse son solo ellos dos, que su corazón comienza a latir tal como cuando tenia a penas 22 y su pulso se aceleraba cada vez que tenia al menor cerca suya. Siente perder el aliento mientras lo mira de pies a cabeza, sintiendose a gusto y encantado con respecto a lo que ve. No pudo evitar sentir sus ojos levemente aviedrados al cautivarse con la imagen del menor a quien no habia visto hace años, y que cuando vuelve a ver, viste un traje bellísimo y es el dia de su boda. Probablemente el día más importante de su vida y a la vez siendo el más deprimente de la suya, y no hay forma de que pueda evitarlo.

Sus miradas parecieron cruzar por una milésima de segundo, pero fueron suficientes para que Minghao le sonriera amablemente a Junhui por estar feliz de verlo, para luego desviar la mirada. No pudo reaccionar, quedó estático luego de chocar miradas con él... ver al menor sonreirle, luego de tantos años, se siente como un golpe en el estómago que le deja sin aliento que demora en recuperar.

Pero algo se sintió cálido en su pecho entre tanto dolor.

—¿Jun? ¿Estas bien? —Preguntó el coreano a su lado con algo de preocupación en su voz, luego de presenciar la escena.

—Estoy embelesado, Wonwoo. —Habló aún siguiendo con la mirada al novio, en lo que pareció casi un murmullo que fue lo suficientemente audible para los oidos del mencionado. —No creo que lo supere nunca. —Sonó triste, sintiendo como si aquella frase hubiese salido de su alma y se colara inconscientemente entre sus labios.

Escuchó al castaño suspirar y comenzar a hablarle algo que parecia un consuelo o un regaño, no pudo distinguirlo del todo ya que simplemente decidió no prestar atención al discurso de Jeon, suponiendo que se trata de palabras que no quería escuchar. Y se permitió volverse sordo, asintiendo en respuesta al menor como si lo escuchase a pesar de no prestar atención a ni una sola palabra. Mentiría si dijera que no era un completo terco con respecto al tema, por que incluso ahora, buscaba a Minghao con la mirada para no perderlo de vista a pesar de que Wonwoo estuviera a su lado dandole buenas razones para dejar ir sus sentimientos por el más joven, dándose el lujo de no tomar en cuenta ninguna palabra que saliera de los labios de su amigo.

—Jun. —Jeon volvió a hablar, pero parándose frente al aludido, invadiendo su campo visual frunciendo su ceño. El chino suspiró.

—Lo sé, Wonwoo. Créeme que lo sé. —
Dijo haciendo contacto visual con su amigo. —Lo intenté todo para lograrlo, y nada funcionó. Solo mírame... cortejéandolo con la mirada en su propia boda, como si su esposo no se encontrara aqui mismo. —El coreano exhaló ruidoso en respuesta.

—Realmente no tienes caso... —Encaró para moverse de en frente del rubio, haciendo notar que en realidad no valía la pena hacer que Wen intentara volver a poner los pies en la tierra.

Reconoció en un instante la desagradable voz del novio ajeno tras un microfono que lo hizo fruncir levemente su ceño en respuesta. Soonyoung le indicaba a los invitados que tomaran asiento ya que era hora de la cena.

El par buscó por un par de mesas para saber donde debían sentarse, hasta que la encontraron. Y al tomar asiento, se toparon con compañeros de trabajo de Minghao ya que compartirían la mesa. Lo que menos se le habia pasado por la cabeza a Jun en aquellas cirscunstancias, era que conocería a personas tan agradables como Vernon, Jeonghan y Joshua en la boda de su ex novio. Mingyu llegó a la misma mesa luego de que sirvieran la comida, pareciendo cansado a pesar de que la noche habia comenzado hace poco. Y antes de comenzar a comer, una mujer adulta hizo un brindis, y Junhui se enteró por parte del más alto que se trataba de la cuñada de Minghao. Luego de que aquella mujer terminara sus palabras, fue Mingyu quien se puso de pie y dió un breve discurso por el cual brindar, en donde a mitad de él su voz se quebró y dejó salir una lágrima, expresando el orgullo y felicidad que sentía por su mejor amigo, pero no finalizó sin antes incluso dar unos breves comentarios que hicieron reir a todos los invitados.

『 婚禮 』𝑱𝒖𝒏𝒉𝒂𝒐Donde viven las historias. Descúbrelo ahora