Capitulo 30

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Ya era de noche, los chicos se habían ido antes, estaba demasiado aburrido, Pedri no había subido en ningún momento, ni siquiera lo había visto cuando fue a despedir a sus amigos, era raro aunque la casa era demasiado grande seguro estaba en algún lado penso Gavi, su estómago sonaba por hambre, ni siquiera sabía si había preparado la cena, con mucha pereza se levantó de la cama y bajo las escaleras.
- Pedri, dónde estás?- grito el menor, no recibió ninguna respuesta, pero escucho ruido en la cocina, como si alguien estuviera cantando, cuando entro a la cocina vio a Pedri de espaldas con los auriculares puestos, por eso no le respondía, sonrió inconscientemente al ver a Pedri cantando besos de Rosalía, Pedri volvió y vio al menor, sus mejillas se pusieron rojas de la vergüenza.
- Ahora eres un capullo cantante?- pregunto Pablo con un tono de burlo.
- Ahora espías a escondidas?- le devolvió la broma a Pablo y este se puso rojo.
- Eres insoportable
- Y tú un niñato
- Engreído
- Tonto
- Capullo
- Niñato
- Ya callate- dijo el menor, Pedri quería decirle callame, pero no quería poner incómodo al menor.
- La cena ya esta lista, lávate las manos y vienes
- Ahora te crees mi madre
- No seas cochino - dijo el mayor con una sonrisa, Gavi le hizo caso, cuando regreso Pedri ya estaba comiendo, se limitó a sentarse y comer en silencio, le respondió los mensajes a sus padres y a Julián y se puso a ver Instagram.
- Termine, no te olvides de subir, tienes que curarme- aviso el menor, subió a su habitación y se tiro en la cama mirando el techo, sería su primera noche durmiendo con el mayor, obviamente en cuartos separados, no quería dormir, tenía miedo, no quería tener una pesadilla, no quería que Pedri lo viera en ese estado, se clavo las uñas en las palmas de las manos y empezó a pensar, que pasaría si Pedri se enteraba, detestaba tener esas pesadillas, no tenía una excusa para que Pedri no sospechara, Pedri no era Julián, Pedri no se iba a creer lo que le dijera, escucho la puerta abrirse y dio un salto.
- Toca joder - Pedri sonrió inocentemente
- Ya te dije, es la costumbre
- Olvida esa costumbre y empieza a tocar - hablo el menor, Pedri ignoró el tono que uso el menor, se sentó y vio que Gavi no abría los puños.
- Abre las manos Pablo - dijo Pedri seriamente, mirando al menor
- Solo cura las heridas joder - dijo Gavi evitando mirar al mayor, Pedri le abrió las manos a la fuerza y vio que estaban manchadas de sangre, las marcas de las uñas eran más profundas.
- Joder Gavi, si sigues así no van a sanar - hablo el mayor mientras cogía una gasa y alcohol para desinfectar, Gavi empezó a soltar maldiciones por el ardor.
- No lo puedo evitar y no me digas así- dijo el menor mientras se aguantaba el ardor
- Así como?- pregunto el mayor
- Para ti soy Pablo- dijo el menor mientras se sonrojaba
- Bueno Pablo, la heridas no van a sanar si sigues así, joder no es bueno que hagas eso, mira como estas
- No necesito otro sermón
- Pues te callas y escuchas, las heridas van a seguir ahí si no te controlas, joder se que no es fácil, pero inténtalo, respira hondo y cierra los ojos, odio verte así, se que puedes salir de esto joder, pero inténtalo - habló Pedri mirando a Pablo.
- No sabes nada, dejame en paz - le quito las manos y se levantó de la cama - Buenas noches Pedri, iré a dormir, sal de mi habitación.
- Deja de alejar a las personas joder, es por tu bien
- Dejame en paz y lárgate, no quiero verte
- Eres imposible
- Y tú un estúpido, ahora largo- Pedri salió de la habitación dando un portazo, Gavi sintió náuseas y fue corriendo al baño, vómito todo, se sentó en baño y las lagrimas empezaron a salir, se sentía tan estúpido, odiaba ser tan vulnerable y sensible, odiaba saber que Pedri podría lograr sentir asco por él, se odiaba tanto, se levantó y se fue a acostar, no tardo en quedarse dormido.
Mientras tanto Pedri estaba en su habitación, se sentía un completo idiota, no debió hablarle así al menor, sabía que Pablo era demasiado sensible, una llamada lo sacó de sus pensamientos, era su madre, joder, la necesitaba tanto.
- Hola mamá, cómo estáis?
- Hola cariño, todo bien, tú como estas,cómo estás llevando el tema de Gavi?
- Es difícil, no se como tratarlo, siento que lo trato mal, siento que no lo estoy ayudando en nada, me siento un inútil mamá
- Cariño no digas eso, eres una excelente persona y eso todos los sabemos y se que vas a ayudar a Gavi, esto lleva tiempo, habla con su psicóloga, pregúntale como lo puedes ayudar, se que los dos van a salir de esto, confío en ti cariño
- No lo puedo ayudar, no se que hacer, Pablo me quiere lejos de él, cuando siento que damos un paso, siempre volvemos a lo mismo, es tan difícil, lo amo mamá y odio verlo así, odio saber que fui la causa de sus cicatrices, odio ser un puto cobarde y dejarlo solo, Pablo no merecía todo el daño que le hice - dijo el mayor empezando a llorar
- Sabes que Pablo es un niño de un hermoso corazón, no te odia, pero esta recentido, sintió que lo abandonaste, no eres un cobarde, fue el miedo y el amor los que te hicieron actuar así, solo querías protegerlo cariño.
- Solo logre hacerle demasiado daño, logre hacer que me odie, lo dañe demasiado, casi muere por mi culpa, y yo solo quiero que el este bien.
- Y lo va a estar, los dos van a estar bien, tienes un mes para ayudarlo, tienes un mes para que sanen juntos, se que lo van a lograr, confío en ti cariño - dijo Rosy, cuando Pedri le iba a responder escucho un grito, y su corazón sintió miedo.
- Te llamo luego mamá, te amo - corto la llamada y salió de la habitación, volvió a escuchar el grito y abrió la puerta de Gavi con fuerza, estaba dormido, sudado y llorando, estaba teniendo una pesadilla, repetía muchas veces lo mismo «no me toques», «alejate de mi», estaba confundido, se sentó al lado del menor y le empezó a acariciar la cabeza.
- Pablo estoy aquí tranquilo - susurró el mayor, Pablo estaba temblando y no deja de llorar
- No me toques, no me toques - repetía el menor entre sollozos
- Cariño, soy Pedri, todo esta bien, estoy contigo, nada te va a pasar - Gavi se despertó de golpe y lloro más, Pedri lo abrazó, Gavi repetía que lo sentía mucho, lloro en los brazos de Pedri como un niño pequeño, su cuerpo empezó a temblar y se dio cuenta de que Gavi estaba mordiéndose el labio hasta hacerlo sangrar y estaba apretando los puños con fuerza.
- Pablo mírame, estoy aquí tranquilo, deja de hacer eso, te estas haciendo daño, mírame cariño, respira conmigo y cuenta hasta 10, Pablo necesito que respires- le abrió las manos y las entrelazó con las de él, sintió sus manos húmedas, tal vez era la sangre, sus labios estaban llenos de sangre, se los estaba destrozando.
- Pablo cariño, deja de hacer eso, mírame, mírame joder - lo tomo del mentón y estampó sus labios contra los del menor, sintió el sabor metálico de la sangre, pero no le importo, solo quería que Pablo este bien, no dejo de besarlo, ni le soltó las manos, el menor poco a poco se iba calmando, su respiración estaba volviendo a ser la misma, cuando sintió que el menor estaba un poco tranquilo dejo de besarlo, su corazón se rompió al ver el estado del menor.
- Lo siento mucho Pedri, doy tanto asco - dijo Gavi sollozando
- Claro que no, incluso así te ves demasiado guapo
- Deja de mentir
- No miento, estas realmente guapo
_ No quería que me vieras así, lo siento mucho - agacho la cabeza y las lagrimas empezaron a brotar.
- No sientas vergüenza, estoy contigo, quieres hablar sobre lo que soñaste?- pregunto el mayor mientras dibujaba circulos en su mano.
- Prometes no juzgarme, ni sentir lástima por mi - hablo el menor tratando de no mirar al mayor
- Nunca lo haría, confía en mi - dijo Pedri con una sonrisa
- Hace un mes salí con Julián y Grealish a una discoteca, te extrañaba y solo quería olvidarte por un momento, tome demasiado, Julián estaba buscando a Grealish y yo fui al baño, entro un hombre al baño y me amenazó con una navaja, no podía moverme, tenía mucho miedo, ni siquiera podía defenderme, me sentía demasiado mareado, me empezó a tocar y yo solo podía decir que no me tocará, no podía moverme, estaba temblando, me toco Pedri, yo lo siento mucho, si sientes asco pues te entiendo, hasta yo me siento así, cuando termino Julián entró al baño y me vio llorando y solo puede decir tu nombre, pensó que era por ti, me levanto y fuimos a casa, no fui capaz de decirle nada, me sentía asqueado- hablo Pablo llorando mientras abrazaba a Pedri.
- No fue tu culpa, nada es tu culpa, ni siquiera lo que paso, ese Gilipollas se aprovecho de ti, nunca digas que fue tu culpa, porque no es así, lo siento mucho nunca debí dejarte solo, nunca debí aceptar que te cambiarán de equipo, joder Pablo no debiste callar.
- No quería que sintieran asco, a parte estaba borracho, no me iban a creer
- Nada justifica lo que ese maldito te hizo joder, se aprovecho de ti, maldita sea Pablo, no vuelvas a insinuar que fue tu culpa, porque no lo es, ven aquí - lo abrazó y lloro en silencio, ahora entendía el porque de sus pesadillas, maldito hijo de puta, Pablo sintió las lagrimas del mayor y se sintió mal, se sentó en su regazo y lo miro a los ojos.
- No llores, te ves muy feo - bromeó entre lágrimas Pablo
- Lo siento mucho - dijo Pedri pegando sus frentes
- No te lo conte para que te empezarás a culpar, solo quiero que me abraces toda la noche y me hagas sentir otra vez en casa maldito capullo - dijo Gavi sonrojándose
- Primero tengo que curar esas heridas - dijo Pedri mientras lo sentaba a un lado y iba por el botiquín para curarlo.
- Dame las manos, joder Gavi esto se ve peor, tendré que ponerte vendas - aviso el mayor mientras lo curaba
- Odio las vendas - dijo Gavi con mala cara, Pedri termino de desinfectarlas y cogió a Gavi de la cintura, lo sentó en su regazo y le levantó la cara.
- Va a arder un poco, pero se que puedes soportarlo - Pedri empezó a curar sus labios lentamente.
- Me besaste- dijo el menor
- Si y lo volvería a hacer - confesó Pedri con una sonrisa
- Capullo pervertido - dijo el menor mientras le daba un beso en la mejilla. Pedri guardo las cosas y se acostó a un lado mientras lo abrazaba, le empezó a hacer cariñitos en la cabeza y el menor se empezaba a relajar, después de un rato sintió la respiración del menor más tranquila y supo que se había quedado dormido.
- Prometo cuidarte y no volver a dejarte solo, te amo mucho Pablo Gavira - le dio un beso y lo dejo cómodamente en su cama salió de la habitación y se fue directo a su cuarto, vio un mensaje de la psicóloga de Pablo, respondió y se acostó a dormir, la primera sesión de Pablo era mañana.

Holaaa nuevo capítulo, espero que les guste mucho, no se olviden de comentar y dejar sus votos, estoy muy feliz por el cariño que le estan dando a la historia, los quiero mucho.
Hasta la próxima

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