Smell Of Smoke

24

Fuera del hospital, en el estacionamiento, Samantha descansaba contra el capo de su auto, tomando un cigarro de uva con la mano derecha, mientras que con la izquierda peinaba su cabello.

Hace una hora Abril había despertado, no podía evitar sentirse feliz, pero, tampoco podía evitar sentirse enojada, por eso, no había entrado a la habitación después de llamar al doctor.

Si tan solo las tres idiotas esas, la hubieran escuchado, ahora posiblemente estarían en casa, tomando unas cervezas o algo, disfrutando, pero no, estaban en el hospital, con el miedo de perder a Vicky a flote, si bien les habían dicho que ella estaba bien, no podía evitar sentir que había algo más, sabía que Nuvia también sabía esto, por eso no se había movido del lado de Vicky, en ningún momento, desde que llegaron, trataron de separarla del cuerpo inconsistente de la castaña, pero no podían, no siquiera con los guardias, ya que Sam, los había amenazado, si tocaban un pelo de la castaña, la misma mano con la que lo hicieron, dentro de unas horas, no estaría. Así que, nadie puedo hacerla salir, aún cuando el horario de visitas había culminado.

-Abril está preguntando por ti.- una voz a su lado la hizo girar, Nuvia la miraba con los ojos rojos y las mejillas levemente sonrojadas y brillantes, supuso que por las lágrimas.-

-¿Fuiste a verla?.-

-Noo, ahora nos comunicamos telepáticamente.- contestó sarcástica, sacándole el cigarrillo para llevarlo a sus labios.- Ve a verla, siento que realmente necesita verte.-

-Esta ahí por su culpa, que se aguante.-

-No, Sam, no está ahí por su culpa, es culpa de ambas, ve a verla ahora.- dijo, alejando en cigarro, cuando la rubia quiso tomarlo, está solo murmuró lo que supuso fue un insulto y con pasos lentos comenzó a caminar hacia el interior del lugar, dirigiéndose hacia la habitación de la castaña, solo para verla mal por un rato, antes de entrar, un mensaje de Ama, avisando que ya estaba por llegar, la hizo sonreír, pues gracias a Diosito o quien sea, no iba a tener que aguantar por tanto tiempo a Ari y así podría contener se ganas de gritarle y reclamarle por no hacerle caso, y evitar, una secuela después de todo, Abril recién había despertado y aunque estuviera enojada, no podría hacer nada que pudiera dañarla.-