3. In Prision

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Un chillido lo hizo levantarse en medio de la noche. A lo lejos ya se escuchaba uno de los tantos disturbios entre los reos, era un día normal tras las rejas.

Suspiró molesto acercándose a la puerta observando tras esta y a lo lejos, un policía el cual golpeaba a un reo repetidas veces al parecer en la zona de las costillas, su pensamiento instantáneo fue que eso dejaria grandes marcas. Era obvio por los zapatos que aquellos guardias llevaban puestas y las armas que ultizaban. Sin embargo, no mostró señal alguna de sorpresa ante la situación, era un castigo normal y era mejor fingir dormir para que ninguno de los guardias testaturados se acercara a hacerle la noche imposible a él.

Tomó entre sus manos una tiza blanca y la colocó sobre la pared escribiendo una línea más de las 310 que llevaba. Contaba días, bastantes largos.

"Cellbit Lange, 310 días"

Jugó entre sus manos con una de las últimas armas que había fabricado manualmente probando el filo de este, sobrepensó el como antes no hubiera creído que un simple cubierto de plástico pudiera convertirse en un arma mortal. ¿Eso era importante?

Se regañó a sí mismo por divagar y se posicionó mejor para caer en sueño.

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La mañana siguiente transcurrió casi tan rápido como sus ojos se cerraron.

Eran las 6AM, como era costumbre ya había actividad a esa hora. Se apresuró a unrise a la fila junto a los demás reos a la zona de aseo. Entrando y terminando de asearse miró hacia el espejo una última vez para analizar su aspecto. ¿O era algo más?

Exacto.

Hace dos minutos, cuando Cellbit estaba en la ducha (o fingiendo tomarla) había estado atento de murmullos, quejas. ¿Qué era especial?

Eran en su idioma natal, era una sorpresa escuchar brasileros en aquel centro carcelaria donde más predominaba el español e inglés. Y aunque fuera una buena noticia, había notado que aquellas dos voces eran inexpertas y por alguna razón le esperaban fuera de aquel habitación.

Tomó aire, casi listo para lo que venía y antes de pasar por el umbral sintió un golpe, no tan fuerte, que suficiente para hacerle perder el equilibrio un momento y reaccionó. Dio la vuelta sacando el arma que había estado contemplando la noche anterior y amenazó con este mismo cerca del cuello del chico.

—Que porra você quer? (¿Qué mierda quieres?)— habló sin alzar demasiado la voz pero demostrando su molestia al joven que había irrumpido. Al otro lado se encontraban también otro, utilizaba lentes pero al leer su expresión supo que no iba a defender a su compañero.

Casi al instante empujó al joven de camiseta azul hacia el otro, logrando que ambos cayeran al suelo por la fuerza y repitió la pregunta una vez más.

— Que porra você quer? — su paciencia se iba delimitando un poco pero la cara de susto de ambos jóvenes le hizo rodar los ojos. — Cobardes.

El chico de lentes se levantó limpiando el atuendo que denotaba que era nuevo en aquel lugar y habló rompiendo el silencio antes de que el ojiazul se retirara de la habitación.

— Eu sou Mike — toció un poco nervioso y continuó — Puedo hablar español también, él es Pac.

— No pregunté sus nombres. ¿Su forma de presentarse es golpeando a alguien? — rió sarcástico aún empuñando el filo del arma entre sus dedos.

— Sabemos que eres Lange, nos dijeron que podíamos confiar en ti.

— ¿Es algo que debería importarme?

Salió inmediatamente del lugar fastidiado, no los dejó terminar porque ya sabía que era aquella situación. Otro encargo, otra vez arriesgar su vida por dinero.

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* Si se dan cuenta también el primer capitulo fue una introducción a la vida de Roier. Ahora este es sobre Cellbit. El próximo será siguiendo el hilo de letters. A ver qué ocurre. 🧍‍♂️ /muak muak. Gracias por leer. ♡

「  PRISIONER  」  GuapoDuo AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora