La reunión de Rodrigo Herrera | Shark Tank México

Capítulo 1: La primer mordida

Todo transcurría con mucha normalidad en el set del famoso programa de emprendimiento, Shark Tank México. Varios emprendedores presentaban sus proyectos e ideas a cinco implacables tiburones, los cuales, eran reconocidos a nivel nacional por sus productos que sacaban al mercado, o de algunos negocios en sus empresas.

Los más halagados de todos eran Arturo Elías, Carlos Bremer y Marcus Dantus. Los tres los ovacionaba el público, y en especial, por esa personalidad tan característica, de su humildad para ayudar a las personas empresarias que más necesitaban de enfoque, o algo parecido.

Los que menos se admiraban, o por lo general, que fuera muy pocos seguidores, eran Patricia Armendariz y Rodrigo Herrera. Eran los que principalmente, en la mayoría de los pitches, discutían por un detalle poco interesante, o con una exageración altísima.

O eso, era lo que llegaban a pensar lo que se veían el show por televisión. Las críticas por las redes sociales eran más que evidentes, para decir de las creencias de ambos.

Pero, todo se había salido fuera de su lugar, en una de las primeras presentaciones, ya que, tres emprendedores, que eran socios de su compañía de comida, habían convencido a pocos Sharks.

Cómo era de esperarse, Rodrigo no estaría dispuesto a arriesgarse a comer un alimento que no fuera concurrente en el, y normalmente, lo rechazaba no de una buena forma.

Esto, por un lado, empezó a molestar a sus otros cuatro compañeros, y esto, más que afectarle, no le dió importancia al hombre de traje negro. 

Mientras los empresarios contaban de sus ventas, de la valuación que era meramente alta, y también de sus utilidades, y el precio de los productos, ese fue el preciso momento en que se vinieron las ofertas.

Patricia le había visto una buena potencia en esa cadena de comida, y por ello, había hecho la propuesta de la cantidad de dinero, y el porcentaje de la empresa, y aún cuando la valuación no era lo que los Sharks esperaban.

También Carlos, el buen Tío Charly, se unió a esa oferta de la mujer de traje azul, y ella, sin duda, le agradó la idea, y así, se convertiría en un muy posible trato en el que se pudieran involucrar los dos grandes tiburones.

Sin embargo, el fundador de Genomma Lab, no se quedaría callado por un buen tiempo, y así, haría su única oferta, en el que había puesto bajo condiciones para mejorar la calidad y la saludabilidad de los alimentos.

E igual, y ya que Armendariz no se estaba aguantando en escuchar al de pelo negro, en mencionar tales "atrocidades" con los cambios en la comida, estarían por comenzar una de las más fuertes peleas que se hayan hecho en el tanque. 

— Solo fíjate lo que te está diciendo Rodrigo. ¿Qué más no le puede convencer para que tu empresa sea buena competencia? — le dijo sin pensarlo más Patricia, volteando al emprendedor.

Los 3, parados en el set de grabación, y notando cómo esa seriedad de Rodrigo, parecía decir que todo lo estaba tomando sin juegos, entonces, pidieron un poco de espacio para ellos.

— ¿Podemos pensar un poco mejor sus propuestas, a solas?— cuestionó un poco nervioso el muchacho.

— Si, adelante, pero te quiero dar un consejo antes de que te vayas, carnal.— habló así Arturo, haciendo que los empresarios, le prestaran atención. 

Se quedaron mirando por unos momentos a Arturo, y el mayor de los Sharks, y por la respuesta que había hecho Patricia, no sería de extrañarse que iba a seguir su comentario.

— Te ruego que no te vayas con Rodrigo. Sería una de las barbaridades más grandes que podrías hacer en tu empresa. Toma la oferta de Paty. Ella te puede ayudar con Carlos.— le aconsejó, en lo que parecía un tono desesperado Ayub.