*Narra Alex*
Me sentía vacío. Vacío sin aquellas llamadas que me hacia Amy a modo de despertador. Todas las mañanas, y habitualmente a la misma hora, Amy acostumbraba a llamarme por teléfono. Una de las mejores "despertallamadas" como yo les llamaba fue cuando cumplimos un año juntos...
*Narra Alex en el pasado*
Las 9:30 de la mañana, sonaba mi teléfono. Era Amy con su llamada habitual.
- ¡Despierta dormilón! - me susurró ella. Abre la puerta y dirigete al baño.
No añadió nada más.
Me vestí y me dirigí hacia el baño, como bien decía en la llamada.
Estaba oscuro. Encendí la luz y había una nota en el espejo.
LÉEME.
Dirígete ahora hacia la cocina.
Me apresuré y bajé a la cocina. Me puse en el lugar de Amy. Lo que más usaba ella en el baño era el espejo y en la cocina... ¡La nevera!
Abrí la nevera y había una cesta llena de cerezas, su fruta preferida. Al fondo había una nota.
LÉEME.
¿Por qué no pruebas a comer un par de cerezas?
Me las comí y seguí leyendo.
Y ahora que sabes a cereza, abre la puerta.
Fui corriendo a la puerta. Abrí la puerta y esperaba verla a ella, pero solo había un paquete. Abrí el paquete y había un disco, aparentemente de musica. A Amy le gustaba cantar, así que lo metí en el reproductor de CDs. Era ella cantando. No una canción cualquiera, sino la canción de nuestro primer beso. Amy estaba cantando 'we found love' para mí. Ahora sí, sonó el timbre y era ella.
La cogí en brazos y la llevé hasta el jardín. Nos tumbamos los dos en el jardín. Me puse encima de ella, casi llorando de la emoción.
-¿Por qué te has molestado en hacer todo esto?
- Por ti, tonto. - me dijo riéndose.
Iba a empezar otra frase pero la corté con otro beso.
- Bueno, pues ahora te tendré que dar tu regalo de aniversario, ¿no?
Entramos en casa y se quedó a pasar todo el día conmigo ya que tenía libre la casa.
No se fue hasta caer la noche. Una película romántica y palomitas. No nos hizo falta nada más aquel día.
