Un Error Tras La Perspectiva.

Capítulo 2

Johanna Mackenzie

Recibo una notificación en mi celular y siento una vibración que indica la llegada de un mensaje "Darla". Desbloqueo la pantalla y abro directamente el mensaje.

"¿Johanah, vas a venir a mi fiesta? Quiero que vayamos juntas."

"Sí, voy a ir con Chelsea."

Conozco a Darla desde el preescolar, aunque no habíamos tenido comunicación hasta que coincidimos en el mismo grupo de la preparatoria.

Darla está celebrando su cumpleaños número diecisiete  y ha organizado una fiesta a la cual nos ha invitado personalmente a Chelsea y a mí, quien es mi mejor amiga en el bachillerato.

Conocí a Chelsea el primer día de clases. Comenzamos con un simple "hola" que se convirtió en una parte muy importante de esta etapa, convirtiéndose en mi mejor amiga de la preparatoria hasta ese momento.

Al principio, no estaba muy convencida de asistir a la fiesta de Darla.

Tenía esa sensación de: "¿Qué es lo peor que podría pasar?". A veces, soy un poco paranoica, supongo que debido a los malditos antidepresivos.

Después de vivir la peor decepción amorosa de mi vida, ¡Caí en depresión! No, estoy exagerando,no puedo recordar desde cuándo estoy en esta maldita situación. Pero bueno, salir a distraerme nunca hace daño, especialmente cuando realmente lo necesito.

Llegó la hora de ir a la fiesta. Me arreglé y esperé el mensaje de Chelsea que decía:

"Ya estoy aquí. Te espero sentada en la barra".

Respondí simplemente con un "Ok." De inmediato me puse en marcha y me dirigí hacia donde Chelsea estaba esperando.

El lugar no era exactamente de mi ambiente. Era una especie de bar con temáticas estilo Euphoria, pero con un presupuesto más reducido. También vendían comida, pero el principal atractivo era el alcohol, obviamente.

Analicé el menú por un momento, pero en mi opinión, todos los tipos de vinos y cervezas son prácticamente iguales. Al final, pedimos nuestras bebidas mientras esperábamos a los demás invitados. Para mi agrado, no llegó todo el mundo, pero aún así la pasamos bien.

Sin embargo, Darla no parecía estar disfrutando. Su mejor amiga, Hannah Jenner, no asistió. Según lo que Darla nos contó, a veces Hannah es muy sangrona y cambia de opinión, especialmente por su novio, con quien parece tener una relación tóxica.

Por lo que se, y según Darla nos ha contado en este rato, ella y Hannah son mejores amigas desde la secundaria y siempre han tenido una relación complicada.

Hay momentos en los que hablan mal una de la otra, pelean y luego vuelven a hablarse como si nada hubiera pasado. Es una especie de amistad tóxica, pero no es asunto mío contar los detalles.

—Hola —Saludó Franco.—Venía acompañado con dos chicos, uno de estatura promedió, con nariz respingada de cabello café oscuro con los ojos de un negro azabache.

El otro chico, alto y delgado con cabello rubio y ojos marrones de unas facciones muy bonitas.

Después de inspeccionar a esos dos, volví a la realidad.

Franco tomó asiento al lado mío y quede en medio de el y Chelsea, el ambiente se tensó un poco ya que, no teníamos buena relación con él.

Nadie se atrevió a cortar ese silencio incómodo así que yo intervine.

—Bueno, eh... si ¿Quién más va a venir a la fiesta?–.Pregunté.

—Los demás me cancelaron así que parece que somos todos.–Dijo darla.